𝟎𝟐 | day one

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Freen soltó un largo suspiró cuando salió de su institución, hoy era el día en que le presentaría a su mamá quién era su "novia", no quería que la timidez la terminara delatando, con suerte esto no duraría ni dos semanas pues su mamá nunca se quedaba tanto tiempo en la ciudad. Se detuvo cuando observó a una chica alta de cabello rosa, negó sonriendo no podía ser ella ¿Qué estaría haciendo ahí? Así que simplemente la ignoró y se dedicó a buscar sus audífonos.

—No sirve de nada que me ignores vamos al mismo lugar— la menor dio un pequeño brinco.

—¿Ah?— Ladeó su cabeza y lo observó fijamente—¿A vas dónde lugar?— La pelirosa alzó una ceja— Digo ¿A qué dónde vas?— Freen se sonrojó, detestaba ponerse nerviosa pues se convertía en la torpeza de carne y hueso.

—Querrás decir ¿A dónde vamos?— la menor asintió ya resignada a qué no podía hablar bien— Faye dijo que a tu casa, te sugiero que respires para que te calmes.

—Estoy calmada yo— Quiso golpear su cabeza con fuerza contra los árboles.

—Se nota— Murmuró— Por cierto no me dijeron tu nombre.

—Freen— Balbuceó.

—¿Cuánto llevamos de novias?— La menor se sonrojó una vez más.

—Mes uno...¡Un mes! Eso sí— Becky rio, esa chica de cabello negro era tierna.

—También me dijo que me darías el número de Charlotte— La menor asintió. De la bolsa de su sudadera sacó un papelito y se lo entregó— Bien ¿Y cuánto tiempo haremos esto?

—No lo sé— Musitó mientras comenzaba a jugar con las correas de su mochila— Espero que no tanto tiempo.

—Si dejas de ponerte nerviosa esto puede ser divertido y podemos ser amigas— Alzó la vista para mirar a la mayor y ella bajó la vista para verlo.

—No soy buena para socializar o entablar una conversación sin revolver palabras— Becky negó.

—Oh, te digo de una vez que odio poner apodos— La pelinegra asintió— Y yo respondo dónde nos conocimos en dado caso de que pregunte.

—Bien está— Comenzó a tronar sus dedos intentando deshacer un poco los nervios— Contestar todas puedes quieres sí...

—Okey eso me está estresando, comprendo que son nervios pero intenta calmarte— La menor asintió— Pero hazlo.

—No es fácil— Murmuró, sacó su teléfono para revisar la hora— ¡Santo Dios! Voy tarde— Miro a la más alta— Digo vamos tarde.

—¿Acaso eres religiosa o por qué...?— Freen no le permitió terminar pues la jaló y comenzaron a correr hasta su casa donde su madre ya debía estar enojada por no ser puntual.

A más de medio camino Freen notó que seguía sosteniendo el brazo de la mayor por lo que lo soltó mientras su rostro se sonrojaba o podía ser porque corrieron más de tres cuadras, ambas siguieron corriendo hasta que divisaron la casa donde vivía la menor con sus amigas, se detuvieron frente a la puerta para recuperar un poco de aire pues no sé habían detenido ni siquiera cuando los autos pasaban. Freen abrió la puerta y se asomó para ver si su mamá seguía ahí y para su desgracia ahí estaba mirando fijamente la puerta y con el ceño fruncido.

—¿Dónde demonios estabas, Sarocha?— La pelinegra ingresó a la casa—¿Y por qué estabas sudando?¿Qué estabas haciendo?¿Y tu novia?— Cada que intentaba hablar su madre sacaba una nueva pregunta.

—Yo...

—Freen— La menor volteó— Oh hola ¿Usted es la mamá de Freen, no?— La mujer asintió mientras observaba a Becky atónita— Lamento la demora, Freen se distrae con cualquier cosa que mira— La menor frunció el ceño, eso era cierto, en silencio se cuestionó como es que la pelirosa lo sabía pero se resignó a qué fue una coincidencia.

Pretend to be my girlfriend「 Freenbecky 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora