— cuéntame bien que pasó, no estoy en el tercer año de abogacía en vano.
Habló Adriana, a la vez que veía los golpes tenía Victoria, no le queria decir nada de eso, pero se notaba que eran algo por lo que sufría demasiado. Tenía la cara un poco marcada, moretones en todo el brazo y las piernas, rasguños y algunos cortes en los brazos. Y está segurísima que estos cortes no se los hizo ella.— Cate vino, la noche del 23 de abril, a pedirme permiso para una fiesta. Cómo no era la primera a la que iba a ir, le dije que si. Pero anteriormente ya me venía preocupando porque Cate llegaba drogada a casa, me dijo varias veces que ya ha tenido relaciones con su novio, y de hecho, el la estaba vendiendo por pornografía. Nunca me animé a denunciarlo porque Cate me pidió a llantos que no lo denuncie, que ella era feliz con él. Y desde esa noche, Cate no volvió. Fui a la casa de Santiago pero el me dijo que se quedó en la fiesta.
— lo piensas denunciar ahora?
Asintió con la cabeza, era algo complicado, pero ella lo podía hacer.Se quedaron hablando un largo, largo, y muy largo tiempo.
— Vickita, tienes que comer y dormir.
— no quiero, no me da la mente para pensar en comer.
— y de dónde tu piensas sacar energía para poder estar bien?
— te piensas que aunque coma voy a estar bien?
Le preguntó irónicamente, era obvio que ella no iba a poder estar bien hasta que no aparezca su otra mitad.— Victoria, estás en una pérdida excesiva de peso — habló la pelinegra, observando el cuerpo extremadamente flaco, escondido detrás de una baby tee, y unos shorts de jean. — hace cuanto no comes?
— desde el segundo día que Cate no volvió.
Bufó, y comenzó a observar la habitación de su exnovia.
— volviste a los antidepresivos?
Asintió, las cajitas y tabletas de pastillas eran delatadoras en su mesa de luz. Pero tampoco le quería decir que es por su culpa que volvió a caer en eso.— am-... Victoria, sabes bien que no puedes tomar eso sin que te lo digan. Son bien fuertes los que tu tomas.
Casi casi, se le escapa un "amor", era complicado para ella acostumbrarse a volver a hablarse por sus nombres, después de once años de apodos.volvieron a hablar de cate, y Victoria no aguanto más. La tatuada terminó llorando frenéticamente en un abrazo a su ex.
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what do we need to be happy?
Fanfiction"solo necesitamos darlo todo por una personita..."