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Nicole viajaba para Rosario junto a su pareja, por fin se iba a volver a encontrar con su familia, con sus amigas, con su ciudad...

Dicho sea de paso, era la primera vez de Hassan visitando la ciudad de su novia, y conociendo a sus amistades y padres en persona, a los hermanos ya los había cruzado, pero con los demás solo habían interactuado por videollamada.

El estaba nervioso, ella feliz, no veía la hora de comer la comida de su abuela y reírse en familia.

Aterrizó el avión, su padre los fue a buscar, al llegar a casa saludaron a todos re contentos y charlaron tomando mates con ellos durante toda la tarde, mientras terminaban de organizar la cena de esa noche, estaban transitando el ultimo día del año.

Aprovechó obvio a ir a visitar a Camila, tenía pensado ir al día siguiente más tranquila, pero su amiga le había hecho los suficientes reclamos como para que vaya ese día.

Obvio Hassan la acompañó, cosa que a Cami no le gustó mucho, pero trató de poner su mejor cara.

La presencia de él hacia que no puedan hablar de TODO, pero la amiga de la protagonista aprovechó una oportunidad en la que el se fue al baño.





- terminan las fiestas y lo dejas? - se acercó susurrándole a su amiga

- shhh callate - la retó empujándola, también susurrando

- confirmé que me cae mal conociéndolo

- porque? ni habló

- *alza los hombros* por eso - respondió Cami

- *se muerde el labio conteniéndose la carcajada* no lo voy a dejar, fue un desliz lo del otro día

- un desliz fuiste vos y tus viejos te tuvieron igual - respondió ya enojada después de chistar la lengua

- *se ríe* córtala

- cortale





Se tuvieron que callar de inmediato porque el susodicho ya volvía del baño, así que hicieron como que no pasó nada y siguieron charlando normal.

No se quedaron por mucho tiempo más, ya que tenían que volver a casa para alistarse para la noche, y eso hicieron.

Llegó el momento de la cena, fue divertida, ambos la pasaron muy bien.

Por otro lado, a un par de kilómetros, estaba Mateo, en el barrio de La Boca, comiendo un asado con su familia y sus ñeris, despidiéndose del peor año de su vida.





- daaaaaaale, pásame otro vino - gritó pateando la jarra ya vacía

- para loco no son ni las diez de la noche - dijo uno de sus amigos

- pero que diez de la noche, pásale un vino al pibeeee - se metió otro siguiéndole la corriente




Y así fue básicamente toda la noche, vino tras vino, festejando con su gente, pudiendo experimentar toda esa felicidad que ese año le había arrebatado.

Su año empezó cuando se recuperó de la resaca con la que se levantó al día siguiente, la cual lo dejó todo el día derrotado en la cama.

Al recuperarse emprendió viaje con su gente, a pasar el verano recorriendo playas de otros países, seguir disfrutando que todas las desgracias se habían ido con el año.

En uno de esos viajes conoció a Malu, una artista Cubana, quien había escuchado hablar ya varias veces, pero nunca había tenido la oportunidad de verla en persona, y resulta que conectaron muy bien.




- disculpa - dijo el protagonista agarrando la pelota, que jugando con sus amigos en la playa, se le había ido directo a molestar a una chica

- Trueno? - preguntó con el ceño fruncido tratando de taparse el reflejo del sol para verlo mejor

- yo te conozco a vos - respondió también frunciendo el ceño

- *suelta una carcajada* Malu Trevejo - dándole un beso en el cachete - un gusto

- aaaah si, amiga del Biza no?

- algo así - respondió en otra carcajada

- un gustazo wacha - poniendo su mano en su hombro - disculpa lo de la pelota, los pibes son de palo

- *se ríe* tranqui, no pasa nada

- nos vemos

- nos vemosss - saludó ella también





El chico dió media vuelta para empezar a caminar hacia sus amigos, pero frenó dudoso al hacer tan solo unos pasos, y se giró nuevamente a ver a la chica.




- no quieren sumarse? - le preguntó refiriéndose al "partidito" que se habían armado




La chica sonrió y alzó las cejas un poco sorprendida, y miró a sus amigas como para consultarles, pero estas ya estaban accediendo parándose enseguida.




- dale - respondió después de soltar una leve carcajada, volviéndolo a mirar alzando los hombros




El protagonista sonrió y ahora si, continuó camino hacia sus ñeris, pero acompañado.

Jugaron por un buen rato, todos se divirtieron mucho, entre muchas risas fueron pegando buena onda entre todos.

Así fue como organizaron hacer previa para el boliche esa misma noche, las chicas conocían mucho mas el lugar que ellos, así que les venía bien la compañía.

Fue con un par de tragos encima que Mateo empezó a hablar con Malu, a hablar bastante cerca, apoyados en la barra, como si los demás del boliche no existieran.





- vos no tenías novia? - preguntó la chica después de hablar un rato

- *se ríe* te quedaste con el diario de ayer

- si, vivo en un tupper

- me di cuenta

- *se muerde el labio* no estoy pendiente a la vida de los demás, me interesa la mía nomás, mi carrera, mis cosas

- *asiente con la cabeza* como tiene que ser - mirándola con una leve sonrisa de lado

- pero eso no quiere decir que no te quiera preguntar que pasó

- *se ríe* de chusma nomás

- claro - también se rió

- *alza los hombros* cortamos porque nos cansamos - respondió desinteresado

- mmmmm seguro le fuiste infiel y no lo estás queriendo decir

- *chista la lengua* na esas pelotudeces conmigo no

- ah no? - preguntó sonriéndole - eso dicen todos




Estaban ambos muy enganchados el uno con el otro, se notaba en la forma que se miraban, que se hablaban y se reían.




- yo no soy como todos - alzando los hombros

- ah no se, para eso te tengo que conocer más

- conóceme - sonriéndole - te juro que soy un buen pibe




Malu se quedó mirándolo un poco enternecida mientras se mordía el labio.




- eso se nota - respondió con una leve sonrisa

- y se nota que te quiero comer la boca? - acercándose un poco más

- *alza las cejas y asiente con la cabeza* vos notas que yo quiero lo mismo? - preguntó ella también mandándose

COMO ANTESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora