COMO ANTES

30

Ese beso le provocó a ambos algo que nada les provocaba hacía tiempo, ese cosquilleo en la panza inexplicable, mientras el corazón les latía tan rápido que parecía que se les salía del pecho.

Nicole se separó con una leve sonrisa, la cual Mateo correspondió, no por mucho tiempo, ya que la tomo de las mejillas y volvió a besarla.

Pareciera como que ese beso era la clave para que se dejen de sentir incompletos, bastó solo ese beso, para que se dejen de sentir vacíos.

- p-perdón - habló Nicole entre los labios del chico separándose porque su teléfono estaba sonando - es Camila - agregó después de mirar la pantalla - te jode si...

- *chista la lengua* atendela

Nicki le volvió a regalar una sonrisa, la cual el correspondió.

- que queres???? - habló la protagonista apenas atendió

- me parece que tome un poco mucho - respondió su amiga del otro lado del teléfono con la lengua que se le cruzaba

- *suelta una carcajada* no te puedo dejar sola ni 5 minutos

- no, aprendí de vos

- para que me llamas? para que te busque?

- no, para ver si me dejas volverme con Braian

- vos sos pelotuda?

- puede ser, eso también lo aprendí de vos

- ahora voy para allá

- pero no estás durmiendo?

- como voy a estar dormida si estoy hablando con vos

- *se ríe* es verdad

- quédate ahí, ya voy

- oka, te amo

La protagonista cortó la llamada soltando un suspiro, por fin se le había dado volver a cruzarse con Mateo y su amiga lo arruinó.

- te tenes que ir? - preguntó el chico

- *asiente con la cabeza* eso o que Camila se vuelva con Braian

- ah no, anda a buscarla entonces - ambos se rieron

Se miraron por unos segundos, ninguno podía creer que se habían vuelto a besar, que se habían vuelto a hablar sin pelear, ninguno podía creer que estén tan bien.

La bocina desesperada de un auto los sacó de sus pensamientos para que ambos giren a verlo, era Camilo, bajando la ventanilla, mirando totalmente confundido.

- que hacen ustedes dos???? - elevó un poco la voz para que lo escuchen

- nos llevas a buscar a tu novia??? - preguntó Mateo