— ¿Entonces...?
— Sólo me gustaría que me contará una historia de algún suceso extraño que le haya pasado.
— Bueno... déjame recordar Char-char, bueno tengo algo, pero no se si es buena idea contarlo.
— Usted no se preocupe, si no quiere no habrá ningún problema
— ... Bien, pero les advierto que tal vez después de esto me vuelvan a ver con los mismos ojos.
>Como sabrán chicos yo gano dinero haciendo pequeños trabajitos a todo tipo de gente, seguro que más de alguna vez ustedes habrán visto mi numero de teléfono en el centro del pueblo. Pues bien recuerdo que hace ya mucho tiempo, quizás hace veinte años yo recibí una extraña llamada de un extraño tipo que parecía estar muy ansioso a juzgar por su respiración, el cual quería que dejará una serie de paquetes en un específico orden, a cambio el me daría una buena suma de dinero y como era de esperarse yo no me negué, algo que hasta el día de hoy me arrepiento.
>El primer paquete debía de ser entregado directamente a la casa de la familia Abbey que en esos tiempos aún existía...
— ¿De verdad?
— O claro que sí Char-char, solamente que ya para ese momento la familia se había vuelto muy... como decirlo... apartada de la sociedad, al principio pensé que se debía a que como hacía ya como tres meses los Dankworth habían muerto en ese terrible incendio ellos se había desanimado pues ellos se llevaban muy bien con estos, pero al ver la cara del señor Abbey me di cuenta que más que más que desánimo era temor lo que reflejaba en sus ojos y tan rápido como salió fue como entró de nuevo a la casa con un paquete que parecía contener alguna extraña pieza de metal.
>El segundo paquete fue entregado cerca de una tumba... si así como lo escuchan la nota decía que lo dejará en una tumba, pero no era cualquier tumba, era específicamente la tumba del señor Dankworth al principio estaba confundido y muy tentado a abrir el paquete pero entre las indicaciones que me dio ese tipo estaban las de no abrir ningún paquete bajo ninguna circunstancia, ademas ya se estaba haciendo de noche y no quería estar en el cementerio durante la noche.
>Ya el tercero y último paquete fue el peor para mi, en la nota decía que ha cierta hora de la tarde debía de ir a punto en especifico del bosque y dejar un paquete junto al pozo de los deseos. Me imagino que debes de conocer ese lugar Char-char.
— Sip, es uno de los puntos turísticos más famosos de Newtown, si no me equivoco fue de ese lugar de donde sacaron el agua la primera vez que la necesitaron.
— Exacto, pues bien para este paquete fui hasta el pozo de los deseos y de acuerdo a las instrucciones de la nota decía que a cambio de hacer una cosa más ganaria un dinero extra, la cual era abrir el paquete y dejar ir lo que había dentro hacía el pozo.
>Te seré sincero al principio pensé que era una petición extraña pero dinero era dinero y estaba más que dispuesto a cumplir con esta, pero al sacar de la caja un frasco con un extraño líquido negro me detuve y reaccione sobre lo que estaba haciendo en ese momento, en ningún momento me detuve a pensar en los extraños pedidos a las ubicaciones que me habían dado en los últimos dos, ni tampoco en sobre lo que había entregado en cada una de las cajas, en ese momento caí en cuenta de que posiblemente estaba lastimado a alguien, así que decidí irme y entregar ese extraño líquido a la comisaría.
— Bien sólo tengo dos preguntas.
— Te escucho.
— La primera ¿De dónde sacaba los paquetes?
— De la oficina de correos, y cuando le preguntaba al empleado por estos siempre me decía lo mismo sobre un hombre encapuchado el cual no dejaba ver su rostro. Un mes más tarde el tipo simplemente desapareció.
— Ok, eso es... muy... bueno digamos con la siguiente pregunta ¿Qué pasó con el líquido negro que llevaste a la comisaría? Porque yo jamás había escuchado sobre eso
— Y no me sorprende, ese líquido se quemó junto a toda la comisaría, se calculan que murieron al menos seis personas en ese lugar, entre esas estaban el tipo que me atendió cuando le di el líquido negro.
— ¿De verdad paso eso?
— Si, fue conocida como el Gran Incendio de la comisaría, aún no se sabe que pasó específicamente, pero te diré una cosa Char-char, este pueblo oculta más de lo que parece, se que es más que obvio que este lugar es extraño, pero déjame decirte que lo que vemos aquí no es más que la punta de un profundo iceberg rodeado por un mar de misterio, como por ejemplo mis ojos grises.
— ¿Sus... ojos...?
— Yo... yo ya he dicho suficiente Char-char quizás algún día sepas la verdad sobre mis ojos, pero por ahora esto ya ha terminado.
ESTÁS LEYENDO
Newtown: Un pueblo sombrío
Horror"Bienvenidos a Newtown un gran pueblo que se encuentra en un lugar perdido en el tiempo, pero muy famoso, un lugar que durante el día se respira confianza, alegría, esperanza y diversión, un lugar amigable... sin embargo durante la noche todo cambia...