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.El ambiente en el reino era abrumador el dolor de la pérdida de la Reina, fue inesperado para los demás, pero traumatico para Arrakis, quien solo pudo mirar con odio a cada persona que hablaba del tema.
Y como dijo en ese maldito cuarto en donde su amada Aemma murió, mataría al maestre, no importa si fue orden o no.
Justo esa misma noche, no había nadie en los pasadillos de la fortaleza, fue hacia donde estaba aquel maestre.
No le importaba si no veían o no, hiba a matarlo si o si, al llegar a la puerta, curiosamente de había nadie cuidándola, este solo pudo sonreír.
Entro sin preocupaciones por los ruidos, miro la habitación, frascos y más medicinas, miro al maestre qué estaba dormido boca arriba.
Arrakis agarro una navaja, la misma con la que acabo con la vida de Aemma.
Se acercó a paso lento y miro por un segundo su estúpido rostro, dormido con calma, como si no había matado a la Reina en su cara.
Alzó la daja y con fuerza lo encajo en la boca, ocasionando qué este no gritaba. La sangre salió a chorros manchando su cara, ni lo importo.
Una o otra vez, pero el maestrd seguía vivo, Arrakis río y despato al maestre, ancajo la navaja en su vientre una o otra vez.
Al final corto el vientre, de la misma forma el que lo hizo con Aemma.
Saco todos sus tripas, estas todavía calientes por estar dentro del cuerpo.
Corto la parte que lo seguía uniendo y lo hizo un bola de carne, le dio forma a un feto.Satisfecho de aquí acto, se fue tirando la navaja por alguna parte del cuarto.
El maestre estaba con la boca llena de sangre y su vientre abierto, en sus manos tenían la forma como abrazar a un bebé, entre ella estaba sus tripas.
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.-Sabes que en los libros, los dioses tienen los ojos azules, como los tuyos Arrakis.
-Esas son solos hipótesis, Aemma.
-Yo digo que tu eres uno de ellos. Yo lo creo.
-Como digas, mi reina.
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.Se podían escuchar la disputa en el consejo del Rey, una conversación muy aburrida, pero no lo escuchaba Rhaenyra, esta solo tenía la mirada perdída.
-Sir Ryam fue un buen comandante de la Guardia Real. Al igual que el gran Maestre
Rhaenyra le estaba sirviendo vino a su padre, mientras este hablaba.
-llevaban tiempo enfermos. Pero el maestre no pudo morir así. Espero.
-Si majestad, Ryam falleció tranquilo mientras dormía, pero no sucedió así con el gran Maestre, majestad.
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𝐁𝐄𝐍𝐃𝐈𝐂𝐈𝐎𝐍 - Aemond x Male
Fiksi PenggemarArrakis un hombre bendecido por los Dioses, dando la capacidad de engrendrar bebés ocupando un lugar importante en la historia.