DECISIÓN.
Día 51
Frío.
Hace mucho frío.
Pero no como ese frío que llevo en las venas; no se parece en nada a ese frío con el que me crearon. Ese con el que me crié.
Este es diferente.
Se siente perturbador, turbio, pesado, insoportable...
Letal.
Como un veneno.
La neblina es tan espesa que no me permite ver mis alrededores, sé que estoy en un bosque, pero no sé en cuál...
No debería haber neblina. En Reino Azul no hay neblina.
Mi cuerpo tiembla y se estremece ante lo helado del ambiente. Nunca había sentido algo como esto.
Doy un paso, balanceándome, y siento que mis pies tocan un líquido espeso, de olor metálico y caliente.
Miro hacia abajo. Un líquido rojo. Es lo único colorido que hay en este lugar.
Es sangre.
—Edelweiss...
Levanto la cabeza y miro todo lo que me rodea.
—...algo malo va a pasar...
Me abrazo, aún temblando. ¿Quién está hablándome?
—...y debes estar preparada...
Quiero hablar. Gritar. Pedir ayuda. Pero por alguna razón no puedo. Creo que hasta mis labios se congelaron.
—...para tomar una decisión que cambiará tu vida...
Escucho pasos acercándose.
Mi corazón late con tanta fuerza que casi puedo sentirlo resonar en mis oídos.
—...y para que no cometas...
Escucho como alguien rasguña un árbol, lo cual podría ser doloroso. Doy media vuelta y la veo.
Justo detrás de un árbol cuyo tronco tiene marcas.
Solo puedo ver uno de sus ojos grises.
—...el mismo error que yo.
Siento mi corazón frenarse ante sus palabras. Seguidamente, extiende su mano y una criatura que yo ya había visto antes despliega sus alas para emprender el vuelo con brusquedad, acercándose a mi.
Un búho de nieve.
Despierto, acelerada, con los ojos abiertos hasta el límite.
Tomo varias bocanadas de aire para recuperarme. Observo mis manos y están sudadas.
Estoy sudando.
Me froto la cara con las manos, desconcertada.
¿Qué pesadilla acabo de tener?
Toco mi pecho para sentir la velocidad de mi corazón.
Necesito analizar.
—Estaba en un bosque cuya ubicación desconozco —Empiezo, ayudándome a asimilar—. Hacía frío, pero uno extraño, descomunal. También había neblina y eso no tiene sentido...Además vi a alguien, yo...Yo la vi a ella —Aclaro para mí misma, provocando un nudo en mi garganta—. Era ella. Y me...advertía sobre algo así como...—Contengo la respiración, recordando algo importante—...Los búhos de nieve.
ESTÁS LEYENDO
THE BLUE KINGDOM
FantasyTodos en el Reino Azul creen que La Realeza es el sinónimo de lo que es bueno. Pero por ahí dicen que las apariencias engañan. Todos tenemos secretos. Hasta las más "benévolas" personas. Pero ¿Qué tan grandes pueden ser esos secretos? Quizás el...