Capítulo 12

1.5K 272 24
                                    

Luego de sobrevivir a la presión alta y la paliza de su esposa, el presidente Go Gun-hee fue dado de alta un día después, siendo arrastrado de la oreja por su esposa, cave decir.

Cómo siempre, la amable abuela saludo a Sung jin-woo y le pidió que la visitará, tampoco se olvidó de saludar a Woo Jin-Chul.

Como un pequeño secreto, Sung Jin-woo fingio no escuchar a la señora amenazando a Woo Jin-Chul con taparle la cabeza si se le ocurra dejarme, se lo guardo para burlarse en su corazón.

Por supuesto, esto no significa que Sung Jin-woo dejara solo a Woo Jin-Chul, un tipo que descaradamente lo habia rastreado por el telefono móvil.

Originalmente, Sung Jin-woo era ignorante de este hecho, pensando que Woo Jung chul no podía mentirle.

Sintiendo su mirada punzante, Woo Jin-Chul sonrió sin mirarlo y comento de buen humor. —¿Estás de buen humor?

Sung Jin-woo soltó un "si" a medias.

Mirando la expresión tranquila en el rostro de Woo Jin-Chul un segundo, pensando en las acciones descaradas de la otra persona, se sintió secretamente complacido.

¿Quien pensaría que alguien tan recio al como Woo Jin-Chul, de hecho, podría actuar de esa manera tan vergonzosa?

Fue solo cuando el soldado sombra, que se encargaba de mantener la seguridad del alfa, le  informo sobre sus acciones que Sung Jin-woo cayó en cuenta de esto.

Era un comportamiento posesivo y tóxico, que la mayoría de los omegas, sienten excesivo incluso para su alfa. Sin embargo, Sung Jin-woo solo se sintió satisfecho ante esto.

El pensó en su corazón: Woo Jin-Chul realmente es como un niño celoso que protege a su favorito de la vista de sus padres.

Realmente lindo.

—Hm, ¿Sung Jin-woo?—El llamo. —Estamos aquí, debemos bajar.

Sung Jin-woo salió de sus pensamientos mientras asentía. —Te seguiré en un momento.

Woo Jin-Chul salió obedientemente del auto, sosteniendo su maletín de trabajo, camino hacia la puerta del apartamento y espero al Omega obstinadamente en la puerta.

No parecía dispuesto a dejar completamente solo a Sung Jin-woo. Poniéndose de cuclillas, Woo Jin-Chul encendía su teléfono y se dispuso a esperar, mirando algunas nos informes en su teléfono para distraerse.

Observando la secuencia de acciones y no pudo evitar sonreír.

En algunos momentos, este alfa puede comportarse tan infantil y lindo, que Sung Jin-woo siente que su corazón se derrite.

¡Woo Jin-Chul es tan adorable cuando intenta ser controlador!

Respirando corazones, susurro:—... Ber.

-Mi Señor.

La sombra de Sung Jin-woo se hizo más grande y, mostrando sus antenas de insecto, Ber respondió al llamado obedientemente mostrando su cabeza.

Sung Jin-woo pensó un momento antes de decir con voz liviana. —¿Que opinas de Woo Jin-Chul?

-¿Kkiuk?

Ber, que había esperando la digna orden de su señor, se sintió confundido por la pregunta.

-Mi poderosisimo señor, ¿Que es lo que intenta preguntar?

Pensándolo un momento, añadió: -Como su humilde sirviente, mientras el rey desee amar a ese humano sin for- digo, guapo a sus ojos, incluso si decide casarse y tener al joven príncipe apresuradamente, sus soldados definitivamente lo seguirán.

Hubo un silencio extendido.

Entonces, Sung Jin-woo pregunto: —¿Cres que fui muy impulsivo?

Los ojos de Ber casi escapan de su cabeza. ¿Cómo se atrevería a pensar eso de su señor? Sintiendo su imprudencia, grito: -¡Cómo podría atreverme a pensar eso de mi señor!

-Mi señor, el general Ber debe estar algo enfermo, no lo tome enserio. -igris cubrio la gran boca de Ber. -Usted No puede estar equivocado.

Ber lucho, enterrado en los frios brazos de Ingrid, se sintió especialmente agraviado.

¡Cómo podría el, la mano derecha de su señor, ser un tipo enfermo! ¡Esa falacia traspaso límites!

Además, también es un insecto muerto...

Sung Jin-woo los miro en silencio y salió del auto, decidio no volver a comentar sus problemas con sus sombras, seres cuyo sentido común y empatía estaban completamente inclinados hacia el como su monarca.

¡Estos tipos no sirven de nada!

Sus piernas, delgas y altas, corrieron escaleras arriba. El viento frío golpeó su tierno rostro, que modificado por el poder de las sombras, lucía indefenso.

La apariencia perfecta de una presa.

Woo Jin-Chul, que estaba a solo unos, inmediatamente noto su acercamiento y se levantó del suelo. Pensó que Sung Jin-woo demoraría un poco, sin embargo, no espero que lo siguiera poco después.

—¿Sucedió algo bueno? —Pregunto. —Te vez de buen humor.

Sung Jin-woo levantó una ceja. —¿Lusco como alguien feliz?

—¿No lo estás?

Negó con la cabeza y sonrió. —Lo estoy, me siento muy complacido.

Woo Jin-Chul sintió curiosidad por la palabras ambiguas del Omega, que luciendo de buen humor, soltada suavemente sus feromonas alegres y tarareaba una melodía desconocida.

Inesperadamente, verlo tan animado también lo hizo sentirse cómodo.

Cuando entraron en el apartamento, Sung Jin-woo vio unas cajas de cartón en la entrada y recordando perezosamente las palabras de su padre, quien insistió en enviar sus cajas de mudanza cuánto antes, se sintió cansado.

... Luego mandaría algunos soldados para que se encarguen de eso.

Se sintió somnoliento y bostezo.

Woo Jin-Chul noto su cansancio, sintiendo que era tarde, hizo una cena ligera y luego llevo a sung Jin-woo hasta su propia cama.

Debido a que tenía muchas cosas que organizar, Woo Jin-Chul planeo dejar descansar a su omega y luego empezar a organizar, sin embargo. Sung Jin-woo tiro de su ropa suavemente.

Woo Jin-Chul pregunto en voz baja. —¿Que pasa? ¿Te sientes incómodo?

Sung Jin-woo lo pensó un momento y negó, sin responder verbalmente.

—¿Quieres ir al baño?—

Sung Jin-woo volvió a negar.

—Tal vez... — Se rascó la cabeza. —¿Te está costando dormir?

Después de un segundo, Sung Jin-woo volvió a negar y Woo Jin-Chul, angustiado, sintió desesperación.

Estaba pensando que quizás, las feromonas fueran un problema para el Omega, siendo que el embarazo volvió sensible a la otra parte.

Sin embargo, Sung Jin-woo dijo palabras inesperadas. —Duerme conmigo.

El leve aroma de las feromonas se esparció en el aire, espeso y dulce, mareo ligeramente al alfa.

Aturdido, pregunto vagamente. —¿Que intentas... Decir?

Existe la posibilidad de que la cera en los oidos de Woo Jin-Chul, acumulada por el estrés del trabajo, estuvieron obstruyendo su audición y terminara oyendo mal.

sin embargo, la realidad le dió dos cachetadas en sus mejillas. —Quiero que duermas conmigo.

_____

Hola 🖐️🙆

Cómo Enamorar A Un Detective Siendo Menor De EdadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora