𝚅𝙾𝙻𝚅𝙴𝚁𝙸𝙰 𝙰 𝙼𝙴𝙽𝚃𝙸𝚁 |𝙺𝙾𝙾𝙺𝙼𝙸𝙽

𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 4

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𝙈𝙀𝙓𝙄𝘾𝙊

Me encontraba sentado en la cama del hotel, mirando por la ventana hacia la vibrante ciudad de México. Desde que llegué, todo había sido una serie de conferencias y reuniones, pero había algo, o mejor dicho, alguien, que había cambiado mi perspectiva de este viaje.

Jimin.

Desde el momento en que nuestras miradas se cruzaron en aquella conferencia, algo en mi interior se encendió.

Era como si todas las piezas del rompecabezas de mi vida finalmente encajaran. Pero había un problema, uno grande: estaba casado con Taehyung, aunque esa relación se sentía cada vez más distante y rota.

No le había contado a Jimin sobre mi matrimonio. Cada vez que estábamos juntos, el peso de ese secreto crecía, pero también lo hacía mi deseo por él.

Mi lobo interior, susurraba constantemente que Jimin era mi destinado, mi omega. Cada vez que lo veía, sentía una atracción gigantesca, un vínculo que iba más allá de lo físico. Era como si mi lobo supiera algo que yo aún no podía aceptar del todo.

Hoy, después de la conferencia, habíamos salido a explorar la ciudad. Caminábamos por las calles adoquinadas, riendo y disfrutando de la compañía del otro. Era fácil perderse en su sonrisa, en la calidez de su presencia.

Jm: Jungkook, ¿estás bien?- preguntó, mirándome con esos ojos que parecían ver directamente a mi alma.

Jk:Sí, solo pensaba en lo afortunado que soy de haberte conocido- respondí, tratando de mantener la calma.

Jm:Yo también- dijo Jimin, sonriendo- Hay algo en ti que me hace sentir... Diferente

Esas palabras resonaron profundamente en mí. Quería decirle la verdad, contarle sobre Taehyung y nuestra complicada relación. Pero el miedo de perder lo que estábamos construyendo me detenía.

Esa noche, mientras la música sonaba de fondo, me acerqué a Jimin. Lo miré a los ojos y sentí esa conexión intensa que solo había leído en libros o visto en películas.

Jk: Jimin- susurré, mi voz apenas audible por encima de la música. -Eres más importante para mí de lo que puedas imaginar. Siento como si estuviera destinado a encontrarte.

Él me miró con una mezcla de sorpresa y comprensión.

Jm: Jungkook, yo también siento lo mismo.

Tomé aire, preparándome para decir algo, pero las palabras no salieron. En lugar de eso, me acerqué más y lo besé, dejando que el momento hablara por sí mismo.

Sabía que eventualmente tendría que enfrentar la verdad, pero por ahora, quería disfrutar de este amor que florecía entre nosotros.

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𝘾𝙤𝙧𝙚𝙖

El estudio estaba en silencio, apenas iluminado por la luz tenue de las lámparas. Hoseok y yo estábamos solos, una situación que se había vuelto más común desde que Jungkook se fue a México. Mi relación con Hoseok había sido un refugio, una válvula de escape para la tormenta emocional que vivía.

Esta noche, la tensión entre nosotros era palpable. Hoseok, mi alfa mi destinado, estaba más celoso que nunca, y eso despertaba algo en mí que no podía ignorar. Sentía su mirada fija en mí, un fuego que se encendía con cada segundo que pasaba.

Nos encontramos en el centro del estudio, nuestras respiraciones pesadas y entrecortadas. Hoseok se acercó, sus manos firmes en mi cintura mientras me miraba con una intensidad que hacía temblar mis rodillas.