10. Viaje

164 16 0
                                    

Pansy se quedó el resto del día con ellos, habían decidido guardar la daga de nuevo sabían que Voldemort tenía gusto por las reliquias de ese tipo y no querían exponerse a que se las quitará.

La habían unido de nuevo al poner una sobre otra, para después meterla en la caja que se cerró con un clic. La ocultaron en el piso, tal como Harry había hecho con el horrocrux, sin embargo, está vez ocuparon la sangre de ambos para sellarlo.

Al otro día, una lechuza les trajo el periódico, Harry la acaricio distraídamente, extrañaba a Hedwig, después de que Draco introdujera una moneda en la diminuta bolsita que tenía en su pata monto en vuelo y ellos pudieron extender el periódico para leer la primera plana.

La foto del ministro Scrimgeur quien apuntaba amenazadoramente a un hombre con la varita ocupaba más de la mitad de la hoja.

"Un paso más para acabar con la guerra" declaraba el titular.

—Es Yaxley —dijo Draco señalando al hombre a quien desafortunadamente Scrimgeur tenía por el cuello —. Está noche y tras varios intentos infructuosos en los meses pasados, el ministro ayudado por ciertos colaboradores que han preferido mantenerse anónimos, han podido desenmascarar a más de treinta mortifagos que se habían infiltrado en el ministerio —leyó Draco —. No todos somos mortifagos, debería haber revisado sus fuentes, además estoy seguro de que la mayoría estaba bajo Imperius.

—Continua —lo insto Harry.

—La tarde de ayer se encontró al mortifago Yaxley tratando de entrar a la oficina del ministro acompañado nada menos que del jefe de la oficina de aurores Pius Thicknesse así como de un puñado de sus cómplices. Se cree habían preparado una emboscada para asesinar al ministro. Sin embargo, gracias a un oportuno aviso y con ayuda de Albus Dumbledore se ha evitado este desagradable hecho... — Draco continúo leyendo en silencio y al terminar volteo a ver a Harry entregándole el periódico.

El último párrafo decía:

"Todos los implicados han sido detenidos y se espera que los interrogatorios terminen el día de hoy. Sin embargo, en vista de que la prisión de Azkaban ya no se considera segura, los criminales serán ejecutados al anochecer en una ubicación desconocida.

Debido a estos hechos, el ministro ha considerado que dicho castigo se aplicara a todos aquellos que se crea tienen relación con El-que-no-debe-ser-nombrado y sus seguidores —el articulo concluía ahí, pero habían anexado un pie de página — Podrán encontrar fotos y nombres de los mortifagos y traidores conocidos hasta el momento en el panfleto anexo. Se pide a toda la comunidad mágica que haga llegar cualquier información al respecto al ministerio de magia."

Harry abrió el periódico por la mitad, su cara y la de Draco lo miraron con ferocidad desde el centro de la página a su alrededor incluyeron algunas otras caras conocidas como las de Bellatrix y Rabastan.

—Nos quieren muertos —dijo Draco, volviendo a cerrar el periódico.

—No es noticia nueva. Solo debemos esperar para ver quién lo intenta primero —contesto Harry con una sonrisa.

...

Las siguientes semanas pasaron en un remolino de actividad, con los mortifagos preparándose para partir a la fortaleza. Gracias al intento inútil de tomar el ministerio debían ser mas cautos que nunca, el número de aurores había incrementado y no faltaban los rumores respecto a que cada mortifago tenía a un puñado de aurores concentrados en su búsqueda y captura.

Harry y Draco se alegraban de haber podido enviar el horrocrux con seguridad antes de que partieran y confiaban en qué Regulus se habría hecho cargo, aunque aún no habían podido confirmarlo.

Traición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora