Vaggie tiene un gran chisme, y
entre tanto, una revelación pone
en vergüenza a Lute.
así es como empieza, pero es
más que eso a medida que sigue.
──────────𝐚𝐮.
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Sera regresó a casa sintiéndose diferente a como lo había hecho al salir. ella pasó de estar arrepentida y sin camino a sentirse una mezcla de ansiedad y nervios en cuestión de horas. Lilith no era precisamente alguien santa y de su devoción, pero además de ser hermosa, la rubia podía llegar a ser sabia si se lo proponía. escucharla señalar sus fallas y faltas hacia su hermana menor fue lo que le faltaba a Sera para entender completamente lo que había terminado haciendo a causa de su trauma en la adolescencia.
dicho esto, a ella le quedaba hablar con Emily. confesar su verdad y buscar un perdón que definitivamente no merecía, pero que calmaría su adolorido corazón.
Sera no se permitió pensar demasiado en lo sucedido durante los primeros veinte minutos que estuvo en la residencia Morningstar. Lucifer siempre le había parecido un tonto con poder, pero nunca pensó que le daría igual tener en su hogar a la mujer que llevaba un buen tiempo follando con su esposa y no mostrar ni el mínimo indicio de molestia por ello.
¡le ofreció pancakes! por el amor de dios.
el rubio, desde sus inicios en la iglesia, había sido señalado por su orgullo, así que aquello era extraño. definitivamente Sera habría esperado algo más. solo lo dejó de lado al considerar que quizá no lo sabía. además, Lilith actuó demasiado despreocupada y parecía incluso divertida al respecto.
así que debía ser eso.
¿verdad?
no fue nada nuevo cuando al cruzar la puerta el silencio volvió a recibirla.
suspirando, sus hombros se pusieron rígidos mientras caminaba hacia las escaleras. ella comenzó a preparar lo que diría, sus disculpas y demás, mientras subía cada escalón (spoiler alert: no sirvió de nada) cualquier palabra que Sera hubiera tenido se fue en el momento en que su mano tocó el frío picaporte de la puerta de su hermana.
no tenía seguro.
la imagen fue la misma que las veces anteriores en que había tenido que subir solo para encontrarse con que Emily no estaba comiendo; ella hecha una bolita en su cama y dándole la espalda, la habitación silenciosa, apenas oyéndose la respiración de su hermana.
Sera estaba tensa frente al marco de la puerta, pero la más joven no podría saberlo al haber permanecido en su posición, sin siquiera moverse ni un poco para indicar que había escuchado entrar a la mayor.
ーEmily. ー llamó Sera.
nada.
apretando una mano, ella empujó la madera con la otra. el ruido fue bajo, seguido por el que su calzado hacía al caminar.
