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La lista de ex-novios de Hongjoong no era extensa, de hecho ni siquiera contaba con una, pero la de amores fallidos si existe, había tenido en total 3 hombres con los que no habia dado ese paso tan importante, que era considerarlos una buena futura pareja.

El sexo nunca fue algo que le costara conseguir y obviamente tenía cuidado con eso, usaba protección y no lo hacía si no se sentía sumamente seguro y cómodo, incluso un par de veces al solo querer sexo sin querer, y sin saber cómo, había engatusado y enamorado totalmente a su amante en ese entonces, y no lo juzguen u otra cosa, era joven y tenía necesidades, además de que es una gran ayuda para deshacerse del estrés, por eso el sexo que habia tenido con Mingi además de liberarlo de su prisión de tensión, y al mayor también claramente, había sido el mejor en su corta vida. Luego de ese suceso sus hormonas estaban exaltadas en un 100%, hubo días en los que tuvo que saltar sobre un juguete sexual para poder tranquilizarse, gemía en su habitación el nombre de Song mientras se tocaba y brincaba tratando de buscar el placer que este le había dado, lo cual no conseguía, incluso lloriqueaba como si el mayor fuera a aparecer y a hacerse cargo de ese desastroso y exitado Hongjoong.

Pero dejando de lado el tema sexual, el albino se sentía genuinamente enamorado de aquel hombre, aún estaba temeroso de tener otro fracaso o decepción amorosa, no le gustaba pensar en ello, solo quería quedarse en su burbuja de felicidad con Mingi.

Por eso ahí se encontraba hablando en el living de su hogar con su mayor confidente, amigo y hermano de otra madre, Felix. Desahogandose sobre aquel tema porque su confianza sobrepasaba los límites y Lix no tenía problema en escucharlo como Hong lo escuchaba a él.

— Fefi, juro que en otros tiempos no me habría importado hacerme la idea de que podría fracasar con un amor actual, pero tengo miedo de que Mingi no me elija. — abrazó su peluche del Going Merry, evidentemente un apasionado fan de One Piece.— Todavía no formalizamos y ya me da miedo la posibilidad de perderlo, incluso lo extraño horrible, comencé a ir al gym desde hace dos semanas solo para mantenerme más ocupado y dejar de extrañarlo solo por un rato de lo contrario me la pasaría pensando en él y me pondría triste.

— No lo creo, Hongie. Él está tan colado por ti como tú de él ¿No es así? — vió asentir a Hongjoong.— Tampoco te ha hecho dudar, creo que esto se está convirtiendo en un auto sabotaje. — tomó las manos de Hongjoong para que lo mirara directo a los ojos.— Disfrútalo y si no funciona bueno, hay más penes que estrellas creo yo.

Hongjoong rió y empujó ligeramente a Felix ante su declaración.— Ninguno sería el de Mingi. — suspiró atontado.— Pero tienes razón, voy a disfrutarlo, dudo que no suceda algo. — jugó con los cuernitos de su barco de peluche.

— ¡Por supuesto! — abrazó uno de los peluches de Hong, esta vez era del Sunny.— Las veces que crees que un hombre no podía fijarse en tí y amarte por toda su vida, esas veces son las que me hacen enfadarme contigo.

— Es una posibilidad, el tiene muchísimas cualidades, además de ser condenadamente caliente y guapo, también es inteligente y hábil. — con sus deditos enumeró cada una de sus virtudes poco a poco.— Hay muchas mujeres y hombres que lo tienen en la mira.

Felix negó con su cabeza, conocía tanto a Hongjoong que sabía que solo se sentía inseguro cuando estaba genuinamente enamorado de alguien, tendía a menospreciar todos sus talentos y su belleza, lo cual le parecía fatal al pelirrubio porque había enamorado a Mingi echándole su bebida encima, y aunque fuera algo cliché no sucedía a menudo.

— Y tú eres el primero que logra llamar su atención sobre ese montón de personas carentes de personalidad y estilo, Mingi no va a mirar a los costados si te tiene en frente, no desesperes. — abrazó a su amigo, motivandole.— Además... Tienes un culo que ufff, a veces hasta yo quiero darte una nalgada.

Ante tus pies ★ MinjoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora