Después de varios días de emociones y compromisos, Bianca y Jungkook finalmente tenían un tiempo a solas. Con Bianca recuperada y de vuelta en casa, la tensión y el deseo que habían acumulado durante las semanas de hospital y los viajes estaban a punto de desatarse. La intimidad que tanto anhelaban estaba al alcance de la mano, y ambos estaban listos para aprovechar cada momento.
Bianca estaba en el baño, dándose una ducha relajante. El agua caliente corría por su piel, ayudándola a relajarse y a liberar el estrés acumulado. Jungkook, por su parte, preparaba la habitación con velas aromáticas y música suave, creando el ambiente perfecto para una noche inolvidable.
Jungkook (desde la puerta del baño): "¿Necesitas ayuda ahí, amor?"
Bianca (riendo suavemente): "Solo si estás dispuesto a unirte a mí."
Jungkook no necesitó más invitación. Se despojó de su ropa y se unió a Bianca en la ducha. El vapor y el calor envolvieron sus cuerpos mientras se miraban con deseo. Jungkook deslizó sus manos por la espalda de Bianca, disfrutando de la sensación de su piel bajo sus dedos.
Jungkook (con voz ronca): "Te he echado tanto de menos, Bianca. No sabes cuánto he deseado este momento."
Bianca (susurrando cerca de su oído): "Yo también te he extrañado. Cada noche soñaba con este momento, con sentirte cerca de mí."
El agua caía sobre ellos mientras se besaban apasionadamente, sus cuerpos presionados el uno contra el otro. La tensión y el deseo eran palpables, y cada caricia encendía el fuego entre ellos. Salieron de la ducha y se secaron rápidamente, incapaces de esperar más para estar juntos.
Jungkook llevó a Bianca en brazos hasta la cama, donde las velas parpadeaban suavemente, iluminando la habitación con una luz cálida y acogedora. La depositó con cuidado sobre las sábanas y se inclinó para besarla nuevamente, explorando cada rincón de su boca con una pasión desbordante.
Jungkook (mientras besa su cuello): "Eres tan hermosa, Bianca. No puedo creer que seas mía."
Bianca (con un gemido suave): "Soy tuya, completamente tuya. Hazme sentir todo tu amor."
Jungkook comenzó a recorrer el cuerpo de Bianca con sus manos y labios, prestando atención a cada curva, cada suspiro que escapaba de sus labios. Bianca arqueaba su espalda en respuesta a sus caricias, sintiendo cómo su deseo crecía con cada toque.
Bianca (jadeando mientras sus dedos se enredan en el cabello de Jungkook): "No pares, Jungkook. No pares."
Jungkook (mirándola con intensidad): "Nunca lo haría. Quiero darte todo de mí esta noche."
Las palabras de Jungkook resonaron en la habitación mientras sus cuerpos se movían al unísono, explorando y disfrutando de cada momento juntos. Los gemidos y susurros llenaban el aire, una sinfonía de pasión y amor que los envolvía por completo.
La noche avanzaba, y su conexión se hacía más profunda con cada momento compartido. Jungkook y Bianca se perdieron en el placer mutuo, entregándose completamente el uno al otro. Cada caricia, cada beso, era una promesa de amor eterno, una confirmación de que estaban destinados a estar juntos.
Jungkook (con la respiración entrecortada mientras susurra en el oído de Bianca): "Te amo, Bianca. Siempre te amaré."
Bianca (con lágrimas de felicidad en sus ojos mientras responde con voz temblorosa): "Yo también te amo, Jungkook."
Después de un breve descanso bajo las sábanas, Bianca no pudo evitar sentir un deseo renovado. Sus ojos se encontraron con los de Jungkook, y una sonrisa traviesa apareció en sus labios. Sin decir una palabra, se subió sobre él, mirándolo con una mezcla de amor y pasión.
Bianca (acariciando el rostro de Jungkook mientras lo besa suavemente): "¿Sabes qué, amor? No he terminado de mostrarte cuánto te he extrañado."
Jungkook (sonriendo y colocando sus manos en las caderas de Bianca): "Entonces, ¿a qué esperas? Estoy completamente a tu disposición."
Bianca inclinó su cuerpo hacia adelante, capturando los labios de Jungkook en un beso profundo y lleno de deseo. Sus manos exploraban el pecho y los hombros de Jungkook, sintiendo cada músculo bajo sus dedos. El beso se volvió más intenso, y ambos podían sentir el calor creciendo entre ellos.
Jungkook (jadeando mientras sus manos acarician la espalda de Bianca)
Bianca comenzó a mover sus caderas lentamente, aumentando el deseo de Jungkook con cada movimiento. Sus labios se desplazaron por su cuello, dejando besos y pequeñas mordidas que lo hacían gemir de placer. Jungkook la sostuvo firmemente, disfrutando de cada momento, de cada caricia.Los movimientos de Bianca se volvieron más rápidos y más urgentes, y el placer que ambos sentían alcanzó su punto máximo. La habitación se llenó de sus sonidos, una sinfonía de amor y pasión que resonaba en sus corazones.
Finalmente, exhaustos y satisfechos, Bianca se dejó caer sobre el pecho de Jungkook, ambos respirando pesadamente. Sus cuerpos aún temblaban por el intenso momento que habían compartido.
Se quedaron así, abrazados bajo las sábanas, disfrutando de la paz y la felicidad que solo el amor verdadero puede brindar. La noche había sido una celebración de su amor, una promesa de que siempre estarían allí el uno para el otro.
Después de su intenso encuentro, Bianca y Jungkook se recostaron juntos, sus cuerpos enredados bajo las sábanas. Jungkook abrazaba a Bianca con ternura, y le dio un suave beso en la frente.
Bianca (con una sonrisa satisfecha): "No puedo estar más satisfecha. Esto ha sido perfecto."
Se quedaron en silencio, disfrutando de la intimidad y la cercanía. Bianca, agotada pero feliz, se dejó llevar por el sueño. Jungkook la observó mientras dormía, acariciando suavemente su cabello.
Jungkook (susurrando suavemente): "No quiero esperar más para que seas mía para siempre."
Con una última caricia en su cabello, Jungkook cerró los ojos, dejándose llevar también por el sueño, sintiéndose afortunado de tener a Bianca a su lado.
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El Juego del Placer
RomanceBianca ha vivido en Corea desde los 10 años, y trabaja como secretaria en HYBE, una de las empresas de entretenimiento más importantes del país. Habla inglés, español y coreano con fluidez, lo que le ha permitido destacarse en su carrera. A pesar de...