Capítulo 70

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Las prendas se fueron perdiendo poco a poco, las manos del alfa tocaban con deseo y lujuria el cuerpo desnudo de aquel Omega.

Ambos sabían lo que iba a pasar ese fin de semana, y estaban más que de acuerdo, aprovecharían todo lo que pudieran.

...

El cuerpo de JooHeon se encontraba dándolo todo, saltando encima de ChangKyun, en una pelea que sería interminable. Diferentes posiciones, mismo deseo lujurioso.

...

— ¿Por qué de la nada planeaste esto?.

Pregunto el Omega, comiendo del spaghetti que el alfa había preparado. ChangKyun lo miro con algo de seriedad.

— Estaré muy ocupado toda la semana, y casi no tendremos tiempo para vernos... De hecho, no tendremos tiempo para vernos.

JooHeon suspiro, dejando el tenedor al lado del plato.

— ¿Puedo preguntar la razón?.

— Puedes preguntar, pero no creo que te guste la respuesta.

El Omega se puso de pié, acercándose al alfa, al estar al frente de él, se sentó en sus piernas.

— Entonces, dímelo cuando estemos en seúl, no quiero hechar a perder nuestro fin de semana.

Sus labios se juntaron en un beso salvaje. el ruido de platos, copas, tenedores, y velas caer al piso, hizo eco por todo el comedor.

JooHeon yacía en la mesa, desnudo nuevamente, mientras ChangKyun besaba todo su cuerpo.

Las manos del alfa agarraron a puños un pastel de chocolate que había logrado sobrevivir a caer al piso.

Pero no logro sobrevivir a las garras del alfa, quién empezó a embarrarlo por todo el cuerpo del Omega. JooHeon por su parte, solo logró apoyarse en sus codos, mirando al alfa.

Al tener el torso del Omega lleno de pastel, empezó a lamerlo, y comerlo, provocando ahora que JooHeon soltara suspiros, hechando su cabeza hacía atrás.

Solo bastaron un par de segundos, para que aquella guerra de cuerpos empezara, sus labios se atacaban el uno con el otro. El cuerpo de ambos llenándose de pastel.

Las pieles calientes de esos dos amantes rozando sin pena alguna, sintiendo ese amor lujurioso.

Nuevamente se hundieron en su mundo, dónde solo eran ellos dos, y sus besos llenos de pasión, sus caricias que dejaban huellas en sus pieles calientes.

En aquel dónde no existían las consecuencias para sus actos, simplemente eran ellos dos, y su amor sin culpa y ni arrepentimiento.

Las caricias del alfa se quedaban marcadas en el interior de aquel Omega caliente, que había empezado a pedir más, gimiendo contra el oído de su alfa.

El cuerpo del alfa, buscaba más profundidad, más cercanía, y la obtuvo, junto con esa profundidad, un par de espasmos, que consigo traían sus orgasmos.

Nuevas embestidas, y un nuevo calor se apoderaba de sus cuerpos. Miles de estrellitas se empezaban a hacer presentes en la vista de ambos, aquellos que estaban apunto de llegar a esa liberación.

...

Después de un fin de semana, dónde ambos amantes estuvieron demostrándose su amor incondicionalmente.

Se encontraban nuevamente en la realidad, en aquella dónde solo eran hermanos.

— Ahora si me dirás por qué planeaste este viaje... Ya estamos aquí, fuera de la casa de mamá.

ChangKyun suspiro, acariciando el muslo de JooHeon.

— Pues... Estaré ocupado con MinHyuk, me pidió que pasara su celo con él.

JooHeon apartó la mano de ChangKyun de su muslo.

— ¡¿Y aceptaste?!. — pregunto molesto.

— Si, ¿Por qué no iba a hacerlo?... Él nos tiene contra la espada y la pared... Y además, ¿Por qué te enojas?.

Pregunto ahora el alfa con un tono de voz bajo.

— ¡POR QUÉ MINHYUK TE VA A TOCAR!.

— Yo no me quejo cuando WonHo te folla... Además MinHyuk ni siquiera va a ser el primero.

JooHeon abrió su boca sorprendido, aún desprendiendo su olor a enojo.

— ¿YA TE HAS ACOSTADO CON MÁS?... ¿QUIENES?.

— No tengo por qué darte explicaciones.

El Omega abrió la puerta del auto.

— Tienes razón... No tienes por qué darme explicaciones. — JooHeon salió del auto, dejando al alfa solo.

Solo bastaron un par de segundos, para que el alfa siguiera al Omega. Sin problema alguno, entro a la casa, llegando a la sala, dónde se encontraban sus padres, abrazando al omega, con el pequeño KiWoo en los brazos del alfa mayor.

¿Por qué aquella escena le había hecho doler el corazón?.

Los tres miraron al alfa menor, quién sonrió con tristeza, dando un paso hacia atrás.

— L-lo siento... Y-yo... Yo me tengo que ir. — El alfa quería salir de ahí, pero el Omega pelirosa lo detuvo.

— ¿A dónde vas, cariño?... ¿No piensas saludar a tus papás?.

ChangKyun sonrió, haciéndoles una reverencia.

— H-hola... Perdón si no me quedó, es que estoy muy ocupado, solo necesitaba hablar con JooHeon.

El mencionado solo lo ignoro.

— Yo no tengo nada que hablar con él... Si me lo permiten, estoy muy cansado, y necesito irme a dormir.

El Omega se fue, dejando solo al alfa con sus padres.

— ¿Por qué JooHeon venía contigo?. — pregunto el alfa mayor.

— Por qué Jessi me pidió que fuera por él... Bueno, me tengo que ir.

KiHyun detuvo nuevamente al alfa.

— Este fin de semana le haremos una pequeña fiesta a KiWoo, por su primer mes de nacido, ¿Puedes venir?... Toda la familia estará reunida.

ChangKyun trató de liberarse de aquél agarre, pero le fue imposible.

— Uhmm... Trataré de venir.

— Por favor, ven.

ChangKyun asintió ante aquello pedido, no era una simple pedida, le estaba rogando, ¿Estaba volviendo a suceder lo mismo? ¿HyunWoo estaba volviendo a golpear a KiHyun?.

— Esta bien, vendré. — ChangKyun se despidió nuevamente con una reverencia. Ahora sí logrando salir de aquella casa.

...

No supo en qué momento terminó en aquel bar, bebiendo un whisky doble, tratando de olvidarse de aquel dolor abrumador y agonizante que se apoderaba de su pecho.

No entendía que era aquello que le dolía tanto.

El saber que ya era ajeno a aquella familia.

O

El hecho de haber discutido con JooHeon.

Tal vez ambas... Su padre ya no lo veía como la luz de sus ojos, extrañaba tanto ese cariño paterno, extrañaba tanto a su padre. ¿Por qué las cosa habían cambiado tan bruscamente?.

Por qué lo habían hecho de lado. ¿Cuál fue el error que cometió para ahora ser nadie en su propia familia?.

...































𝗢𝗡𝗘 𝗟𝗢𝗩𝗘 {JooKyun-Monsta x}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora