En el piso de arriba Vaggie acomodaba una cama improvisada mientras derramaba algunas lágrimas y estaba impaciente y ansiosa pues tenía el presentimiento de que Charlie comenzaba a tener sentimientos por Alastor, no quería dejarla en sus manos pero tenía que atender ese misterioso asunto así que aprovechó el quedarse sola para preparar una pequeña maleta pues le esperaba un improvisado y misterioso viaje.
-Bien, tendré que tomar el tren a primera hora...Mierda, espero en verdad que vuelva a funcionar, no contaba con que aparecería el idiota de Alastor, y si eso interfiere en algo?... Pero lo debo de intentar.
Llegó la mañana, era fresca y nublada, se había pronosticado una tormenta que llegaría por la noche y mientras tanto el petricor comenzaba a percibirce, eran al rededor de las 6:00 a.m. y Vaggie estaba a punto de salir, solo esperaba el momento en que Charlie despertara para despedirse de ella, con una mentira claro.
Vaggie tocó la puerta de la habitación de Charlie con dos pequeños golpes casi inaudibles pero no obtuvo respuesta así que decidió girar el cerrojo de la puerta para ver si de alguna casualidad podría estar abierta, y sí, de nuevo la distraída Charlie no había puesto llave como era su costumbre. Vaggie entró, observó a Charlie dormida y la contempló un par de minutos antes de despertarla con un pequeño susurro, se notaba que Charlie no quería despertar pues dormía plácidamente, al parecer el dormir sola le había sentado bien pero finalmente abrió los ojos.-Vagg? Que haces aquí, digo, buenos días... Pasa algo?
Charlie notó la maleta al costado de la cama?
-Y esa Maleta Vagg? Oye, no tienes que irte, solo quería que nos tranquilizaramos es todo.
-No Charlie, se que no quieres que me vaya, no me iré, es decir sí, pero no me mudaré.
-Que quieres decir.
-Escucha ayer Carmilla, mi jefa me pidió que fuera a Italia, recuerdas la cata de vinos a la que fui hace unos meses? No pude decírtelo por que, ya sabes, la discusión.
-Ah sí, tendrán otra? Tan rápido?
-Sí, si lo sé es muy pronto pero Carmilla tiene otros compromisos y es importante que vaya, hay productos nuevos que tal vez le interese exportar y me pidió que fuera yo sola esta vez.
-Entiendo... Vaggie, ve sin problemas, en verdad haz tu viaje sin preocupaciones quieres? Todo está bien.
-Charlie en serio no quiero dejarte pero es importante, no quería irme sin antes quedarnos tranquilas, saber que estarás bien y que aunque esté lejos unos días...
-Vaggie en serio, ve tranquila, no quiero que te distraigas de tus asuntos o te preocupes por cosas que no tienen caso, en verdad todo esta bien, solo necesitabamos estar un rato con nosotras mismas, es todo.
-Gracias cielo, eres tan comprensiva...
A Vaggie se le quebró la voz por un momento, se sentía mal por mentirle a una chica tan tierna como Charlie pero aguantó las ganas de llorar y trató de mostrarse segura y tranquila.
-Entonces todo está bien no? Ninguna de las dos tiene que preocuparse, aunque esté lejos estaremos unidas cierto?
-Si Vagg, cierto.
En realidad Charlie seguía molesta, no le iba a ser tan fácil perdonar a Vaggie esta vez pero bien era cierto que no quería que Vaggie se fuera sintiéndose mal e intranquila a su destino pues a pesar de todo Charlie siempre se había preocupado por ella.
-Quieres que te lleve a la estación? Aún tengo tiempo antes de salir.
-En serio?
-Si, quiero cerciorarme de que te vayas tranquila y en paz.
-Gracias Charlie, me encantaría que me fueras a despedir.
Charlie le dio a Vaggie una dulce sonrisa mientras ponía su mano sobre la de Vaggie.
-Vagg, se que no quieres que hable de Alastor pero también sé que te preocupa que me quede aquí sola con él, no es mi intención molestarte mencionandolo pero solo quiero que sepas que puedes estar tranquila, no hay nada de que preocuparse respecto a Alastor, estoy contigo de acuerdo?.
Vaggie asintió con la cabeza y recordó las palabras que le dijo Alastor: "Deberías saber que si está contigo es porque ella así lo desea no? O la crees capaz de engañarte" Esas palabras habían causado inquietud en Vaggie, justo lo que Alastor quería...
-Gracias cielo, nos vamos?
-Claro, esperame abajo, ve subiendo tus maletas.
Charlie se alistó rápido y llevó a Vaggie a la estación Lafayette donde abordaría el tren que la llevaría al aeropuerto, la estación estaba casi vacía pues al acercarse la tormenta muchos trenes habían sido cancelados y los vuelos igual pero para suerte de Vaggie el vuelo a su destino seguía en pie.
-Llegamos Vagg, estás segura que debes ir? Se acerca la tormenta, me preocupa que irás en avión, es peligroso.
-Estaré bien cielo, además debo hacer ese viaje a como de lugar.
-Me sentiría más segura si Carmilla fuera contigo, al menos estarías acompañada, ya sabes cual es el hotel en el que te hospedarás?
-Hotel? Ah... No aún no, Carmilla lo apartó y cuando llegue ella me dará indicaciones.
-A que hora se supone que llegarás?
-No sé exactamente pero para la noche ya debo estar ahí
-En cuanto estés instalada trata de llamarme quieres?
-Claro cielo, cuídate mucho, no tienes idea de cuanto te extrañaré.
-Te extrañaré también Vagg, nos vemos pronto.
Vaggie tomó a Charlie por las mejillas y le dio un pequeño y tierno beso al cual Charlie respondió y eso hizo sentir más segura a Vaggie, se dieron un abrazo y finalmente el tren llegó.
-Hora de abordar, hasta luego cielo. Te amo.
-Adiós Vaggie, no olvides llamarme, cuídate, te extrañare.
Finalmente Vaggie abordó el tren y comenzó así ese misterioso viaje improvisado, ella iba acompañada de miedo y nervios, tenía un nudo en la garganta el cual le producía una horrible ansiedad y ganas de llorar pero no había marcha atrás, su destino la esperaba.
La luna ya se asomaba y después de un largo día de deberes Charlie llegó a casa, la tormenta comenzaba a manifestarse y la temperatura era fresca y húmeda y Charlie decidió que era momento de relajarse con un chocolate caliente y mientras se lo preparaba cantaba llenando la cocina y sus alrededores con su dulce voz, estaba tan metida en sus asuntos que no notó que Alastor había llegado, él no planeaba cruzar palabra con ella pero no podía evitar quedarse prendado al canto de Charlie, sin siquiera notarlo él mismo se detuvo en la puerta de la cocina y se puso a observar a Charlie cantar, ella sonreía y sus lindos y enormes ojos deslumbraban con su brillo, Alastor a diferencia de otras veces no llevaba dibujada en su rostro esa sonrisa sarcástica y maliciosa de siempre, esta vez se notaba maravillado con lo que veía, la belleza y el canto de Charlie habían hecho que Alastor se sintiera suspendido en el tiempo, varado en un lugar donde nada existía excepto Charlie y su cantar pero estos cánticos divinos fueron apagados de golpe por un enorme y sonoro trueno que pudo escucharse por cada centímetro de la Abadía e hizo que toda luz encendida se esfumara en ese instante.
Charlie dejó salir un grito pues el estruendo fue demasiado fuerte y la asustó y eso ocasionó que su taza con chocolate hirviendo se cayera y la pobre chica inevitablemente se quemó, el dolor ocasionó que unas cuantas lágrimas salieran y Alastor al presenciar todo fue a auxiliarla sin pensarlo un segundo.-Charlie!
-Ahhh - Charlie gritó pero esta vez el motivo era que Alastor la había asustado pues no se había percatado que estaba ahí antes - Al? Al de donde saliste.
-De las sombras linda, pero... Estás bien? Que ocurrió mi bella princesa.
La oscuridad no dejaba ver lo mucho que Charlie se había sonrojado, solo la luna bañaba uno que otro detalle y silueta con su luz, cualquier otra cosa que no fuera tocada por su brillo era como si no existiera.
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RAZORBLADE ROMANCE (Charlastor +18)
General FictionInspirada en los personajes de Hazbin Hotel y la banda HIM