Paranoias - SportaRobbie

Mejor otro día o nunca

Sportacus llegó al parque, había quedado antes con Stephanie porque quería contarle sobre su deseo hacia ella y a Rotten. El joven necesitaba confesárselo a la chica del cabello rosa.

Espero que Stephanie no me mande a la mierda -  pensaba el héroe -, tampoco quiero perder su amistad. ¿Acaso seré un vicioso que al gustarle ambos sexos es peor que ser gay o hetero? Espero que se lo tome bien esto

Al llegar al lugar, la chica estaba sentada en el banco haciendo fotos a las flores que todavía estaban cubiertas de nieve. El hombre se acercó detrás de ella acariciando su hermoso pelo.

- ¿Sportacus?

- ¿Sí?

La chica se giró y empezó a reír.

- ¿Por qué me has llamado? ¿Te viene mal quedar el sábado?

- Demos una vuelta mejor.

Stephanie supo que algo iba mal con la última frase que había dicho su amigo. Sportacus tragó saliva y empezó a hablar sobre si ella sentía algo por él. La chica le confesó que desde hace tres años su mente no paraba de pensar en él, le era imposible quitárselo de su cabeza.

- ¿Me aceptarías si te digo que...?

- ¿Qué eres bisexual?

- ¿Cómo lo has sabido? - Sportacus se sorprendió - ¿Se me nota mucho o tengo algo qué me delate?

- Eres muy masculino, Sportacus - contestó la chica -, pero de hacia uno tiempo que observaba tú gran interés por un tercero. Me parece bien que te guste ambos sexos solo que no seas infiel.

- Estoy enamorado de ti y de Robbie - la chica dejó de andar. Ella pensaba que Sportacus se sentía atraído por hombres deportistas y no por el vago de Lazytown -. Seguramente te estés cuestionando el por qué me atrae Robbie y ni yo sé responder a esa pregunta. Me gustáis los dos, pero...

-Pensaba que te gustaban los chicos deportistas - comentó Stephanie -, me da igual que te guste Robbie y a la vez te sientas atraído por mí. Yo solo me siento atraída por ti, Sportacus.

- ¿Y entonces por qué quiero desvirgarte? - Sportacus se frotaba la cabeza desesperado - ¿Por qué? No es normal que quiera irme a la cama contigo sabiendo que con Robbie va a ser muy diferente. Con un sexo opuesto y, luego, con otro de mi propio aparato reproductor. Esto es una jodida locura.

Stephanie quería ayudar a Sportacus, pero la idea de intentar resolver sus dudas le hacían ir a ciegas por un tema que no comprendía en absoluto.

- Puede que sea por instinto, ¿tal vez? - respondió la chica sin saber que decir realmente -. Sportacus, soy una chica hetero que le encantan los hombres muy masculinos, pero en este caso no sé que contestarte. Eres muy masculino al igual que Rotten, pero si eres bisexual puede que sientes más atracción con hombres que con mujeres. Si lo de quitarme la virginidad te gusta demasiado será por un instinto primitivo que tenéis los varones.

- ¿Cómo si fuera un violador?

- No lo sé - contestó la chica apenada -, besa a Robbie y descubres qué es lo que te gusta.

- ¡Me gustáis los dos! ¡Eso es lo que pasa!

Stephanie desconocía el mundo homosexual y todo aquello que estuviera relacionado con él. La charla entre ambos fue quedar igualmente el sábado. Sportacus debía averiguar con quién tenía mayor sentimiento.