Wash away | Yeonjun

CAPITULO 34: el pasado

Hyeji

Desperté, y otra vez era una casa que no era mía.

Debería dejar de hacer esto.

—Buenos días Hyeji-ssi.

—¡Oh! —la miré sorprendida.—¡Tu! ¡Y estás—

—Embarazada—completó sonriente.

—Pero, ¿qué—

—Buenos días Hyeji-ssi—Huening Kai apareció por detrás de Minhye y besó dulcemente su mejilla.

No podía creer lo que estaba viendo, Minhye, la pasante en pasarela de hace varios veranos y Huening Kai, uno de Los mejores amigos de Yeonjun, juntos.

Definitivamente el mundo es demasiado pequeño.

—¡Woah! ¡Es demasiada coincidencia!

—¡Ni que lo digas!—respondió ella.—Yo estaba igual cuando te vi llegar en la madrugada.

—¿Madrugada?

Asintió.

—Cuando llegaste con Yeonjun... —me miró confundida—¿No recuerdas lo qué pasó anoche?

Si recuerdo, ese es el problema.

Rápido miré a Kai ignorando por completo el hecho de que quería hacerles un montón de preguntas sobre su relación.

Tal vez sea para después.

—¿Y Yeonjun?

Kai rascó levemente su cabeza y miró a su esposa con una sonrisa apenada en el rostro.

—Si bueno... Yeonjun-noona salió temprano esta mañana.

—Oh... entiendo —asentí lento—Probablemente algo surgió en la empresa.

Ambos sonrieron entre sí.

—Bueno... no en la empresa sino más bien con Soobin-hyung.

Lo miré perpleja.

—¿Qué tiene Soobin?

—Soobin... bueno, Soobin está por casarse.

—...¡Woah! ¡Eso es maravilloso!—los miré a ambos e inevitablemente me dieron ganas de llorar.

—Hyeji, ¿estás bien?

Asentí.

—Disculpen, es solo que en mi mente todos ustedes aún son unos adolescentes y la idea de que están casados y con familia hace que la nostalgia me pegue a todo lo que da.

Minhye y Huening Kai sonrieron tiernos.

—El tiempo ha pasado, Hyeji-ssi. Ya todos dieron en siguiente paso y formaron su familia—dijo ella.

—Todos, a excepción de Taehyun.

—¡Hey!— su esposa le dio un ligero golpe en el vientre y él solo rió.

—Lo siento.

—¿Taehyun aún no se casa?—pregunté.—¿Por qué?

—Si, bueno...

—El tema es...

—Complicado.

—Si, bastante.—entre los dos completaban lo que quería decir el otro y se me hizo tan lindo que no pude evitarlo más así que los abracé.