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Mientras Rhaemma y Jacaerys intentaban controlar el pequeño consejo de Rhaenyra. Daemon intentaba consolar a su esposa he hija.

Baela era una persona leal, y tanto Jace como Rhae no dudaban que cambiara de bando, pero sabían que estaban entrando en un juego peligroso, y aún teniendo un dragón, no podría salvarlos.

-Quisiéramos tratar otro asunto, hoy.- Jacaerys anuncia al pequeño consejo.

-Por supuesto, príncipe. Lo escuchamos.

-He cancelado mi compromiso con la princesa Baela Targaryen.- Jacaerys dice y todo el consejo se percata de el error por un segundo.- Y he propuesto uno nuevo. Su príncipe heredero desea comprometerse con la princesa Rhaemma de la casa Velaryon.

-Usted desea seguir los pasos de Aegon el conquistador.- Dice un lord sonriendo.- Mi casa y yo estaremos sumamente feliz de apoyar su compromiso con la princesa, mi príncipe.

-Mi casa también, príncipe.- Todo el consejo había aceptado tal propuesta y Rhaemma y Jacaerys estaban felices por eso, ya tenían al consejo de su lado, solo faltaba la reina y su familia.

-Príncipe, quisiera proponer...- El hombre no termina de hablar, pues la reina Rhaenyra, Daemon, Baela y Rhaenys se hacían presentes en la sala.

-La reina Rhaenyra Targaryen, primera con el nombre, reina de los Andals, Roynars y los primeros hombres, señora de los siete reinos y protectora del reino.- Rhaenyra camina hasta el lado de sus hijos y estos se reverencian ante ella.

-Mi reina.- Todos hablan.

-Quiero saber el estado de mi reino, ahora. Y quiero informes completos, sin ningún detalle menos.

-El príncipe Aegon ha estado reclutando casas, y las que se rehúsan.. Temo decir que sus lord son amenazados a muerte.- Lord Gorgon Massey informa y la reina asiente.

-¿Tenemos un plan?

-Enviar cuervos, mi reina.

-Majestad, los cuervos no los convencerán, los dragones sí. Usted tiene aquí a 6 dragones y la mayoría de jinetes son príncipes, ningún lord y ser de este reino, se negará ante un dragón.- Dice Jace y Rhaenyra niega.

-Podrían estar en peligro.

-Temo decirle, mi reina que el príncipe Jacaerys tiene razón, ningún lord se negaría a ellos.- Lord Ban Emmon respalda al príncipe.

-Estoy seguro, que los cuervos hablan menos que los príncipes y dragones.

-Está bien, Jacaerys, Lucerys, Rhaemma y Baela volarán a las casas vecinas. Los lord hicieron un juramento hacia mí hace 20 años, es hora de cumplirlo.- Rhaenyra acepta la propuesta y empiezan a repartir casas.

-Iras a Bastión de tormentas, lord Borros Baratheon estará feliz de tener un dragón en su castillo, te tratarán bien mi pequeño.- Rhaenyra decía a luke mientras lo abrazaba.

-Yo no soy como tú mamá..

-¿A qué te refieres?

-Yo no soy igual de perfecto que tú.

-Mi dulce niño... Algún día, serás el señor de Driftmark, y serás mi mano, te lo puedo prometer con los dioses de testigos, tú eres perfecto, Luke. Eres dulce y te amo.

Mientras Luke volaba hacia Bastión de tormenta, Rhaemma y Jace volaban juntos hacia el norte, en busca de Cregan Stark.

Ninguno sabía lo que pasaría en su ausencia, ninguno sabía que en esos viajes perderían a uno de los suyos, ambos perderían a su hermanito, el que debían proteger, y ahora serían 3 Velaryon.

Ambos hermanos se culparían hasta su muerte por dejar solo a su hermano pequeño. La muerte los perseguiría.