Enemies To Lovers ; Elmax

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Ya Enero se estaba aproximando y nuestras protagonistas debían volver al colegio. Ya habían pasado unos cuantos meses y las vacaciones de navidad se fueron corriendo.

Y bueno, ahora estamos con Max quién un Martes por la mañana se esta levantando para ir a la escuela.

La alarma empezó a sonar a las 6:30, la pelirroja rápidamente se levantó asustada y con el cabello en la cara, suspiro al ver la alarma y se tiró a la cama con frustración.

La alarma paró y Max decidió seguir durmiendo aprovechando el ruido de las hojas pero rápidamente el sonido empezó de nuevo, a las 6:35, había olvidado completamente que había puesto 20 alarmas seguidas la noche anterior.

Finalmente decidió levantarse de la cama a las 6:45 debido a que el sonido de la alarma ya la irritaba, con pesadez en su cuerpo fue rápidamente al baño y casi entra a la ducha con la ropa puesta, sino fuera por su mamá que entro ya estuviera empapada.

— ¿Max, que haces? — exclamó su madre viendo como su hija estaba en la tina casi dormida y con la mano en el grifo.

— me voy a bañar — respondió dejando caer su cabeza en sus rodillas, su madre cerró los ojos un momento y sino quisiera mucho a su hija probablemente ya le hubiese roto un palo en la cabeza.

— Max, por favor, es el primer día de tu último año... Disfrútalo — comentó su madre entrando al baño para levantar a su hija y sacudirla de pies a cabeza, la ojiazul pareció reaccionar y se quedó estática mirando a su madre.

— ¿Que hago aquí? — preguntó viendo como sus pies estaban en la tina, rápidamente puso una cara de temor y miró a su mamá que la miraba con frustración.

— ¡Por favor Max! Necesito que te bañes y bajes a comer, hazlo. — ordenó para soltar a su hija y salir del baño, Max se quedo pensando un momento y sino fuera por un grito de su madre no se estaria bañando.

A las 7:05 salio del baño con una toalla cubriendo su cuerpo, rápidamente se dirigió a su closet y se puso un pantalón como siempre y un top negro que decia "Nirvana" junto a un sueter azul encima, sus tenis blancos, y su coleta alta mal hecha.

Tomo su mochila y puso todos sus cuadernos allí, un lápiz y un color, y dejando así cerro su mochila y bajo a donde estaba su mamá.

En la mesa ya estaba servido un jugo de fresa junto a unas tostadas, huevos fritos y tocino. El olor a café recién hecho inundo sus fosas nasales deleitandola de pies a cabeza.

— Buenos días ma. — saludo con un beso en la mejilla a su mamá para sentarse. Rápidamente devoró todo lo que había en el plato viendo la mirada de desaprobación de su madre.

— buenas tardes dirás, ya son las 7:20 y entras a las 7:30 — anuncio mirándola en forma de reto.

Max al ver la hora se levantó y con un beso en la mejilla despidió a su mamá para salir literalmente corriendo de su casa, agradecía que su casa no estuviera tan lejos de la escuela porque sino le hubiesen cerrado y no hubiera podido entrar.

En menos de 5 minutos de estar corriendo hasta la escuela, llegó, afuera ya no había mucha gente y el conserje ya estaba fijándose que no llegara nadie. Max retomo nuevamente la caminata para llegar antes que el conserje cerrará las puertas de la secundaria, el sonido de la campana resonaba en sus oidos alentando a seguir corriendo a su primera clase.

El ruido ceso avisándole que los salones estaban por cerrar, con el cansancio del mundo empezó a correr por todos los pasillos buscando el salón que dijera Matemática 5to "A" pero solamente se estaba perdiendo en lo grande que era la escuela y los anchos que eran los pasillos. Max nunca fué buena en buscar su salón y estaba apunto de rendirse hasta que vio a una de sus compañeras entrar rápido al aula de clases, rápidamente sus sentidos se activaron y empezó a correr hacia donde entro aquella chica y sin aviso alguno entro sin tocar.