Polos Opuestos || Jenna Ortega x Fem.

Chapter 10 - Un paso delante de tí.

Intento sacudir esos pensamientos, pero la imagen de Jenna en ese vestido negro con blanco seguía apareciendo en su mente. Era confuso, desconcertante. ¿Desde cuándo a Charlie comenzó a parecerle linda su rival?

Charlie decidió que iría por tragos, se dirigió al barra, encontrándose con Jade y Lily.

Jenna la estuvo siguiendo, ya que para ella fue muy confuso. Cuando la vio a los lejos, solo la encontró besándose con Jade, así que fue una pérdida de tiempo seguirla. De alguna forma se decepcionó.

— ¿Jenna? — Rodrigo se acercó tomándola del brazo. — ¿Qué haces acá?

— Creí ver a una vieja amiga. — mintió de nuevo.

Al girar de nuevo su mirada hacia las chicas, para su suerte había personas tapándolas, así que Olivia no se dio cuenta.

— Ven, te conseguí a alguien. — dijo emocionada.

— ¿Qué? — preguntó confundida.

Rodrigo la guió entre la multitud, llevando a Jenna hacia una zona más tranquila del lugar. Jenna intentaba calmarse y recomponer su expresión, todavía sintiéndose afectada por lo que había visto.

— ¿Quién? — preguntó finalmente, tratando de sonar interesada.

— ¡Te va a encantar! — dijo Rodrigo con una sonrisa mientras llegaban a una mesa donde había una chica un poco más alta que Jenna, de ojos cafés y con aspecto amigable las esperaba. — Jenna, ella es Nora, Nora ella es Jenna.

Jenna forzó una sonrisa y saludó a Nora, aunque su mente seguida divagando.Mientras tanto, en el barra, Charlie bromeaba con Jade y Lily, tratando de ahogar sus pensamientos en el ruido y la compañía.

— Bien, chicas. — Pattinson levantó un shot.

Lily y Jade la siguieron.

— Por nosotras. — sonrió la rubia.

— Por nosotras. — siguió Jade.

— Por nosotras. — terminó Lily, juntaron los shot y los bebieron de una.

La amistad entre ellas, era realmente buena, forjada a lo largo de años compartiendo risas, secretos y desafíos. Las tres se conocían desde la primaria, y habían pasado por muchas etapas juntas, desde las tardes de estudio, hasta las fiestas y los viajes de vacaciones. Los padre de Charlie nunca habían conocido a Jade formalmente, hasta hace poco. 

En la barra, Charlie se sentía cómoda y relajada con sus amigas, a pesar de todos los problemas que tenía, ellas la amaban así. Jade y Lily siempre sabían cómo hacerla reír y olvidar sus preocupaciones, aún que fuera por un momento.

— ¿Recuerdan esa vez en la playa cuando casi perdimos a Charlie en el mar? — dijo Lily, riendo mientras tomaba otro sorbo de alcohol.

— ¡Oh, por favor? — Charlie respondió, riendo también. — Solo me aleje un poco, ustedes fueron las que entraron en pánico.

— Bueno, no queríamos que te convirtieras en comida de tiburón. — bromeó Jade, dándole un ligero empujón a Charlie. — Aunque, siendo sincera, probablemente los tiburones se asustarían contigo.

Charlie río más fuerte, sintiéndose un poco más ligera. Agradecía tener a Jade y Lily a su lado; su amistad era un refugio en medio del caos de su vida. No había secretos entre ellas.