Ambas salimos del lugar, la noche ya invadía la ciudad, el frío golpeo mi cuerpo, ese estilo de frío solo significaba que sería una noche complicada, eso era mejor acompañarlo con una buena tasa de chocolate caliente. Mire a Diana esta asintió, ella sabía lo que pensaba, este estilo de frío hacía que nos encerráramos en nuestro viejo apartamento y acurrucáramos para contrarrestar el efecto que nos provocaba este tipo de clima.
Diana: será mejor subir e irnos al nuevo departamento si quieres ese chocolate - me sonrió.
Elisa: eso suena perfecto - le sonreí con satisfacción, no me vendría nada mal relajarme un rato y despejar mis pensamientos sobre Brenda.
Subimos al auto, que de inmediato nos llevó al nuevo departamento que aún no conocía, Diana me explicaba que mientras estábamos en ese lugar algunos ayudantes contratados por Marcela fueron por algunas cosas de nosotras, principalmente ropa, los demás lo dejaron, ya que según Marcela, este departamento estaba "equipado con lo necesario".
El auto se detuvo, bajamos de este escuchando un "buenas noches" de parte del chofer que claro no respondí, el auto desapareció de inmediato, observe el edificio que tenía frente a mis ojos, era claro que este lugar no era para cualquiera, ahora me siento una "infiltrada".
Diana se encaminó hacia la gran puerta de vidrio, pasando una tarjeta blanca sobre la tabla tecnológica que tenía la puerta, observe como la puerta se abrió, seguí sus pasos, ella parecía segura de lo que estaba haciendo, escuche detrás de mí como de a poco la puerta volvía a cerrarse, mire alrededor disimulando un poco mi fascinación por el lugar, me detuve y observe los detalles que tenían las paredes, igual que el techo, parecía una obra de arte plasmada en la estructura.
Diana: disimula un poco - susurro arruinando mi momento, voltee para verla, pero ella ya se estaba alejando de a poco de mí, tome pasos apresurados poniendo a su lado y entrando ambas en el ascensor - ¿qué es lo que te atormenta esta vez?
Elisa: lo arruiné, ella salió corriendo.
Diana: no pienses en eso, si ella se fue, no es porque lo arruinaste sino porque moviste su mundo.
Elisa: ¿cómo lo sabes?
Diana: por como la besaste, deduje muchas cosas.
Elisa: ¿cómo qué?
Diana: como que te gusta esa chica, la vas a lastimar, ¿quieres mi consejo? - sentía su mirada, de alguna manera quería su consejo, horas antes hubiera dicho que no me gustaba Bren, pero ese beso me dejaba en la duda ahora mismo.
Elisa: por favor - salimos del ascensor, seguí sus pasos que nos dirigieron a una puerta, con la misma tarjeta abrió aquella, ambas al entrar miramos el lugar, era el triple de tamaño de nuestro viejo apartamento.
Diana: disfruta Eli, si no hubieras tenido esta oportunidad no la hubieras conocido y tampoco saboreado sus labios, esto puede ser obra del destino, debes elegir deshacerte de todo esto y hacer como que nunca paso o seguir adelante y averiguar qué es lo que en realidad te pasa con ella - el silencio se hizo presente, no sabía que responder - haré chocolate caliente tardaré un poco en encontrar la cocina - sonrió divertida - mejor conoce el nuevo departamento además de pensar en lo que dije.
Elisa: está bien.
Después de esa charla, hicimos como que nunca la tuvimos, tan solo disfrutamos aquella bebida que preparo mientras recorríamos el departamento, nos quedamos hasta tarde preguntándonos ¿cómo consiguieron este lugar tan rápido? Luego de eso cada una fue a su habitación, al principio me costó dormir, en un momento era por Brenda, pero luego recordé que hace mucho no dormía sola, ya que tan solo hace dos días dormía junto a Diana, no me di cuenta cuando me quedé dormida, al despertarnos hicimos nuestra nueva rutina que de ahora en adelante sería de a poco normal en nuestras vidas.
Mi oficina estaba vacía, esto me hacía sentir tan solitaria, intentaba distraerme con cada fotografía que me mandaban por email para ver cuáles elegir para que se las llevaran a Anna, además de algunas preguntas que empezaban a hacerme algunos fotógrafos que aparecían frente a mi vista, que me costaron responder, agradecí que la laptop de mi oficina contenía mucha información que en este momento me ayuda demasiado.
De pronto el intercomunicador se activó, dando un sonido demasiado molesto para mí, observe este y como una luz titilaba, mire a los lados, así que solo seguí mi intuición, presione aquel botón que titilaba, después de todo ver películas servía de algo, algunas de ellas mostraban como usaban estos aparatos.
Diana: tiene visita señorita Wintour, ¿hago que pase?
Elisa: sí - susurré.
¿Quién podría ser?
Mire hacia la puerta, esta se abrió con algo de rapidez y de esa misma forma fue cerrada, no podía emitir ningún tipo de sonido, no podía creer que ella estuviera ahora mismo frente a mí. Ella no decía nada, solo miraba a los lados, como si buscara algo.
Elisa: buen día, Brenda, ¿qué se te ofrece? - ella me dio una mirada rápida, esos ojos que me encantaban parecían apagados, sin brillo, debajo de ellos había unas ojeras demasiado notables.
Brenda: ¿por qué lo hiciste? - empezó a caminar por toda la oficina, sabía a qué se refería.
Elisa: me gano el impulso - me levante de mi asiento, pase alrededor de mi escritorio, intentando acercarme a ella.
Brenda: no te acerques, no me toques - extendió su mano, haciendo distancia entre ambas, verla así me ponía mal, ella está así porque nunca quiso el beso, es mi culpa, debí esperar más.
Elisa: lo siento, si quieres podemos hacer como que nunca paso - retrocedí unos pasos, chocando con mi escritorio, apoye mis manos en este y solo observe a Brenda.
Brenda: no puedo fingir que nunca paso.
Elisa: te olvidarás de aquello, un mal beso se olvida rápido - le di una media sonrisa.
Brenda: ¿para ti fue un mal beso? - quede en silencio, ella paró de caminar y me miro - dime la verdad, ¿fue malo el beso para ti? - negué.
Elisa: me gusto, demasiado, pero por ti haré como que nunca paso - ella sonrió, parece que ella quería eso.
Brenda: me costará olvidarlo, porque a mí me encanto ese beso, fue.....
Elisa: ¿especial? - ella asintió.
Brenda: ¿tú también lo sentiste así?
Elisa: diferente y especial - afirme, ella sonrió, pero más tarde me dio la espalda.
Brenda: esto está mal, pero llegaste tú siendo amable, me coqueteabas y luego me besas asiendo que me sienta tan confundida, en tan solo días - da una risa nerviosa - todo esto es muy extraño - paso su mano por su rostro como si quisiera entender todo.
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30 DÍAS PARA ENAMORARLA
FanfictionEstoy para sobrevivir en este mundo, como todas las personas y obtener ese empleo me ayudaría, solo necesito hacer ese artículo que me habían pedido, tengo 30 días para terminarlo. Esta historia no me pertenece, todos los créditos correspondientes a...