▪︎ NINE

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Regreso a tierra firme

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Regreso a tierra firme

—¡Hela! —el grito de alegría de Ben se hizo presente cuando la vio en su castillo. Los dos amigos se abrazaron tras tanto tiempo—. No tenía claro si volverías. Me alegra ver que sí.

—No podía perderme vuestra graduación por nada del mundo —sonrió la hija de Hades—. Puede que incluso me quede el resto del verano.

—Mi castillo es tu castillo. Puedes quedarte en tu antiguo cuarto.

—Iré a dejar mis cosas mientras ellos te hacen un resumen de su escapada a la Isla —Hela miró a sus amigos de reojo.

Así pues, Hela subió y entró en aquella habitación donde se quedó la primera vez que vino a Áuradon, en la que soñó con Hera la primera vez. Mientras deshacía sus pocas pertenencias, se preguntó qué sería de ella y del resto de los dioses bajo el mandato de Zeus. Se preguntó si volvería a ver alguno pronto.

Por el momento, se dio una muy merecida ducha y cambió la ropa de cuero de la Isla por unos vaqueros y una camiseta simple, algo grande. Después bajó donde sus amigos estaban sus amigos: esperándola en el comedor para almorzar. Le siguieron contando a Ben todo lo pasado en la Isla (bueno, casi todo).

—Mañana por la tarde es la graduación —recordó Evie—. Y tú tienes que venir conmigo para probarte el vestido —la señaló—. De inmediato.

—Me dejo llevar por ti —puso las manos en alto.

La tarde de la gradúa, Hela estaba con Evie y Mal

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La tarde de la gradúa, Hela estaba con Evie y Mal. La hija de la Reina Malvada había insistido en que tenía que prepararse con ellas, y Hela no pudo llevarle la contraria.

Su vestido era una obra de arte. De un color azul marino metálico, falda lisa y larga, tirantes delgados y escote en V. Evie la maquilló con una sombra de ojos deslumbrante y labios de un malva oscuro. Le dijo que probase a ondular su cabello y aquello fue lo más espectacular.

|| And Ever || Carlos de Vil [3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora