Deseando dejar atrás las peleas constantes, Gohan quiere retomar sus estudios y sueña con convertirse en un gran científico, siguiendo la pasión por el conocimiento que siempre ha tenido. Sin embargo, su sangre Saiyajin lo impulsa a seguir entrenand...
Gohan llegó a la U.A. temprano, encontrando el salón vacío. Al entrar al aula 1-A, notó un saco amarillo para dormir detrás del escritorio del profesor. Pudo sentir la presencia de Aizawa, por lo que decidió no molestarlo.
En lugar de eso, Gohan se acomodó en uno de los tantos asientos libres que había en el salón, eligiendo uno cerca de una ventana. Desde allí, observó el entorno, preparándose mentalmente para el día que tenía por delante. Los recuerdos de las pruebas de ingreso aún estaban frescos en su mente, pero intentó enfocarse en el presente y en lo que estaba por venir.
Mientras esperaba, su mente vagaba hacia Kaina y Toga. A pesar de las circunstancias complejas de su vida, Gohan sabía que debía concentrarse en su educación y entrenamiento en la U.A. Era un nuevo comienzo y una oportunidad para demostrar su verdadero potencial.
Los estudiantes comenzaron a llegar al salón, llenándolo poco a poco con el bullicio de nuevas voces y amistades. Entre ellos, Gohan notó a la chica que había salvado durante las pruebas de ingreso. Con una sonrisa amigable, ella se acercó a él.
Uraraka: Hola, Gohan, ¿verdad? -Dijo con una sonrisa cálida- Quería agradecerte de nuevo por salvarme durante las pruebas.
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Gohan: Claro, Uraraka. Me alegra verte aquí *Respondió devolviendo la sonrisa*
Mientras conversaban, otros estudiantes también se presentaban y formaban pequeños grupos. Fue entonces cuando un chico alto, con gafas y una postura rígida, se acercó a ellos. Gohan reconoció al chico que había cuestionado sobre el robot de cero puntos durante la orientación.
Chico: Hola, soy Tenya Iida -Presentandose con una reverencia formal- Quería felicitarte, Son Gohan. Lograste algo increíble en las pruebas de ingreso. Descubriste un nuevo objetivo al enfocarte en rescatar a otros aspirantes, algo que no había considerado.
El Híbrido se rascó la nuca, un poco avergonzado por el cumplido.
Gohan: Gracias, Lida. Solo hice lo que alguien con la capacidad de hacerlo lo haría.
Lida: Eso demuestra un verdadero espíritu de héroe. Estoy seguro de que aprenderé mucho de ti en este tiempo en la U.A.
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