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El ambiente en la casa estaba un poquito pesado, tener un alfa dominante y a un alfa territorial en un solo lugar, encerrados y sin sus omegas hacía que sus alfas se sintieran amenazados.

–Así que…no tienes energía maldita. – Toji frunció su ceño, la maldición no le causaba confianza.

–Si. – Sukuna sonrió, no le alteraba ni lo más mínimo la forma seca de contestar del pelinegro, le era divertido, pero su lobo si que gruñía y liberaba feromonas de desagrado hacia el otro alfa.

No hubo más preguntas, solo miradas de desagrado y diversión.

Satoru vio el pequeño intercambio de palabras, soltó una pequeña risa y siguió con lo suyo, que era “ayudar” en la cocina.

–¡Sal! – el grito de Suguru le recordó que no era bienvenido a dicho lugar.

–Ja, te echaron. – Sukuna como siempre regalando ánimos.

–Cállate, soy demasiado bueno para la cocina por eso me echaron. – Sukuna bufo, no le creía ni papa.

–Si, claro.

–Toji, dice Suguru que si lo ayudas. – Toji asintió y se retiró de la pequeña sala, no sin antes besar a Satoru.

Sukuna vio el intercambio de saliva e hizo una cara de asco.

–No pueden hacer eso en mi casa. – Toji no dijo nada y dejó que su Omega se encargará de adefesio.

–Pues tápate los ojos. – Sukuna rodó los ojos fastidiado.

–Oye-

<Hace unas horas se reportó que tres estudiantes de secundaria fueron encontrados muertos a unas calles de la secundaria Shindo, según los reportes la cabeza de uno de ellos no ha sido localizada, se estima que un presunto asesinó en serie se encuentra en las calles de Japón, se…>

El sonido de un celular asustó a ambos.

–Si, bien. –

–Unas maldiciones fueron robadas de la escuela y aparecer tienen que ver con la muerte de los tres estudiantes. – Sukuna miró raro a Satoru.

–¿Y?

–Sospechan de que tu y Suguru las robaron. – Sukuna soltó una carcajada.

– Y yo para qué quiero a tres inútiles, conmigo basta para destruir todo Japón. – sonrió socarrón.

–Deja de presumir, es mejor que vayas conmigo. – Sukuna negó con su cabeza.

–No lo dejaré, se como son los viejos esos, al ver que estamos separados, lo buscarán y no quieres saber lo demás. – Satoru le dio la razón, él mismo se los dijo pero no hay nadie más fuerte, aparte de él.

–Que Toji se quede con él, comparado a mi, su agilidad y su fuerza los haría papilla. – Sukuna asintió por lo dicho, pero ni estaba del todo seguro.

–¿Qué tal si es una trampa?, piensalo, de la nada tres maldiciones de categoría alta salen a la luz, cuando yo estoy “desaparecido”. – Satoru estaba por  contestar, cuando su celular sonó.

–¿Si?, ¿¡Como!?, ¡Se supone que habría vigilancia!, bien, voy en seguida. –sus gritos hizo que Suguru y Toji salieran de la cocina.

–¿Qué pasa?. – Suguru se acercó a Satoru.

–La niña se ha escapado, se supone que habría vigilancia, iré a ver, no se muevan de aquí . – Suguru y Sukuna lo miraron, más no dijeron nada.

Toji lo acompañó a la puerta.

–¿Estás seguro de esto?. – el Omega suspiró, nada era seguro, más con esa niña fuera.

–si,te quedaras aquí, Sukuna puede ser inofensivo si esta Suguru, pero…

–Está bien, cuidaré de él, el pizarrón rallado no me asusta. – Satoru carcajeo.

–Solo…solo cuídate, quieres. – Satoru abrazo a su alfa, estar lejos de él lo atormentaba.

–Bien. – Satoru se alejó, caminó por el sendero hasta llegar a la entrada de la vivienda.

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Yu vio como su novio se marchitaba, no había pasado mucho desde que su lazo de destinado fue quebrantado.

Sabía que su novio necesitaba tiempo, pero todo esto lo estaba frustrando, él debió dejar a Nanami cuando se enteró de su destino, sin embargo, se aferró a él.

Sabía que no se podía forzar a Nanami a estar con su pareja destinada pero todas las parejas destinadas que se han encontrado han sido felices, ¿verdad?.

Sabía que si su lazo no se rompía el lobo de Nanami jamás lo marcaría a él, si o si, Suguru debía romper con ese lazo y aún así se aferró a estar con el que considera el amor de su vida.

–Nanami. – volteó al oír la voz de Satoru.

–¿Qué pasó exactamente?. – el rubio suspiro resignado.

–Al parecer unas maldiciones fueron robadas al igual que la niña, específicamente a tres. – el rubio y el albino se alejaron del lugar.

–Se supone que habría vigilancia. – Nanami asintió, de acuerdo a lo dicho por los viejos, la niña no significaba un peligro pero a un así le pusieron unos guardias para cuidar que no escapara.

–Los guardias no se encontraban en su lugar de trabajo, los muy ineptos se fueron a beber a un bar cerca de aquí. – Satoru suspiro, todo esto acabaría cuando la niña muriera, pero al parecer esto se alargará más de lo planeado.

–¿Cómo está él?. – Satoru miró al Omega castaño, sabía que la relación de estos dos se vería afectada, más si Nanami preguntaba por Suguru enfrente su actual pareja.

–Él está bien. – Satoru vio a Yu alejarse del lugar.

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Holis, lo dejo hasta aquí, estado batallando con la aplicación donde escribo la historia, me pone mayúsculas donde no debería o se come palabra, no un batallar.

Que la aplicación esté así me frustra y mejor dejo de escribir, ya que estar borrando a cada rato la misma frase o diálogo y eso de verdad cansa.😩😤

Si saben de una app mamalona me la dejan en los comentarios.🏃‍♂️‍➡️

Bueno, bai, tomen agüita y bañense que hasta aquí llega el olor a hobo.
🐍🦕

EL SEXY PROMETIDO DE GOJO-SAMA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora