Satoru no tuvo más remedio que llamar a Suguru, Nanami había mandado señales de que algo malo pasaba con su misión, todos sabían que nadie podría llegar a ayudarlos.
《Necesito que Toji vaya a donde Nanami. 》
《Yo...
《No, ni loco dejó que vayas, el idiota de Sukuna trataría de matarlo a ser tu pareja destinada, mejor que Toji se encarge. 》
《Bien.》
Satoru colgó, él tenía problemas mucho mayores ahí, la maldición llamada Mahito estaba causando problemas, pero no tantos como las mujer decía ser la esposa del chico que secuestraron.
-Es sencillo, me dan a Sukuna y yo los dejo en paz. - la mujer sonrió con burla.
-¿Y si no que?. - Satoru se acercó lo suficiente como para ser escuchado por las maldiciones y hechiceros.
-¿Cómo?.
-Si, digo si Sukuna no te es entregado que nos pasara, por lo que veo has armado un batallón contra nosotros y no solo eso, liberaste a una persona que recibiría uncastigó. - la mujer rió.
-Es una niña, ¿le harías algo a una niña?, Satoru Gojo, ¿serías como tu novio?. - Satoru ahora fue el que se carcajeo, miro a la mujer y a la niña que se escondía detrás de ella.
Sonrió ante ellas y habló firme.
-Si, si esa persona fue la causante de que mis seres queridos estén condenados, lo haría con gusto. - vio como la niña temblaba de miedo, sus ojos soltaban lágrimas pero eso no le ablandó el corazón, la niña hizo cosas terribles, no merece su compasión.
-Oh, eso me recuerda, tu novio no te habló de su hija. - Satoru frunció su ceño.
-Vaya, veo que no, se llama Tsumiki, lindo nombre , ¿no crees?. - la pelinegra sonrió con malicia.
-Bueno, no es perfecto. - Satoru levantó sus hombros, dándole la menor importancia.
No dejaría ver sus emociones, sabía lo que la mujer trataba de hacer, si hubo decepción o enojo no lo mostró, sería peligroso para él dejarse al descubierto.
Mejor hacia lo que mejor sabía hacer, burlarse de las cosas.
-Que aburrido. - Mahito movió su pie de desesperación.
-Tranquilo. - el cabeza de volcán miró al chico.
-¡Danos a Sukuna!. - el grito de Mahito asustó a los presentes.
Satoru lo miró con desagrado, el chico corría alrededor de las demás maldiciones.
La cosa se ponía más tensa, los minutos avanzaban y nadie hacía un movimiento.
-¿De qué serviría?. - el rey de Roma apareció, el porqué todo un batallón se estaba armando.
-¡Sukuna!, ¿qué haces aquí?. - Satoru susurró, no le agradaba que el idiota estuviera ahí.
-Soy él porqué de todo esto. - las maldición sonrieron, su plan estaba cerca de que se cumpliese.
-Tengo una condición, si el tipo de un ojo me deriva, me uniré a ustedes y si no, los mataré a cada uno por arruinar mi momento con mi pareja. -la mujer asintió, si hubiera sabido que el tipo con el que se casó era un recipiente apto para Sukuna, no tendría al niño que la espera en casa.
-Bien, de todos modos no durarás mucho antes de que Jin tome el poder de su cuerpo. - si la mujer supiera que Jin se dio por vencido y entregó su cuerpo a Sukuna, pero eso no tiene por qué saberlo.
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EL SEXY PROMETIDO DE GOJO-SAMA.
FanfictionSatoru es el Omega más deseado de toda la preparatoria, con 17 años él ya se siente la reina de Inglaterra, pero lo que más le subió su ego fue su futuro esposo, un hombre demasiado sexy y guapo, que hará que Satoru pase por muchas situaciones y em...