Capítulo 17

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-Minaeva, la esperan en dirección. -Informó nuestro tutor en cuanto entré al salón de clases.

Sin decir nada di media vuelta y salí hacia el pasillo. -¡Perla!

Maya se acercó corriendo hacia mí.

-¿Que sucede?

-¿Estas bien? -Noté que tenía los ojos como un panda. Yo debía de estar igual. Secuelas de pasar toda una noche despierta.

-Por lo que veo tu no estar mejor que yo. -Le arreglé un poco el cuello de la camisa de uniforme. -¿Por qué no te maquillaste para esconder esas ojeras?

-No tenía ganas ni de salir del cuarto. ¿A que hora te fuiste?

-A las seis, estuve casi dos horas en la biblioteca. -Confesé. -¿Y tú? ¿Cómo estás?

-Bien, o eso creo. -Le di un pequeño abrazo.

Ayer después de llorar como magdalena en los brazos de Eric, este me acompañó a mi dormitorio sin decir nada. Cuando llegué a nuestro cuarto encontré a Maya esperándome, acostada en mi cama.

-No todos lo días descubres que tienes una media hermana. -Ambas nos separamos del abrazo.

-Debo ir a la dirección pero no tardaré. -Asintió.

-Creo que me saltaré las clases de Literatura por un tiempo. -La observé con lastima.

-No lo hagas. -La aconsejé. -Sé que la situación no es cómoda pero no dejes que esto afecte tu rendimiento académico.

-Tú como siempre, dándome el ejemplo. -Logré sacarle una sonrisa. -No me saltaré ninguna clase, tranquila.

-Bien, entra ya. -Comencé a alejarme. -Te veo después.

Después de encontrar a Maya en mi cuarto ambas tuvimos una larga conversación. Le conté lo que sucedió con mi madre y ella hizo lo mismo.

Me sorprendió muchísimo lo que dijo: -Resulta que mi padre tiene otra hija. Es mayor que yo. ¡Y adivina quién es la madre!

-¿Quién?

-¡Amanda Márquez!

-¿Nuestra profesora de literatura?

-Como oyes querida. Márquez fue mujer de mi papá y recién confesó que tuvo una hija suya. Con razón la mujer nos odiaba tanto.

-¿Por qué escondió algo tan importante?

-Rabia, irá, despecho... Verás, es que mi padre no es un santo. Dejo plantada a Márquez en el altar para casarse con mi madre, que también estaba embarazada.

-Tú padre es un...

-¿Gilipollas? ¡Joder sí! Si yo hubiese sido Amanda le arrancó los huevos.

-Y ¿La conoces?

-No, y aún no quiero hacerlo, talvez más adelante. Solo sé que Márquez tiene dos hijas.

-Vaya... ¿Tu madre sabía?

-Se enteró hace poco... Está muy enojada. Mi madre es una mujer con principios Perla. Si hubiese sabido que mi padre tenía pareja jamás habría comenzado una relación con él.

-¿Y cómo se enteraron?

-La chica comenzó a buscar a su verdadero padre, y el que mucho busca...

-Algo encuentra. ¡Dios Maya! Espera... ¿Crees que mi madre sabía?

-¿Por qué lo dices?

P.D. No me odies. Posdata # IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora