Capítulo 40

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Juan Cruz, Camilo y Thiago habían comenzado a ser una familia. Federico y Micaela, aunque eran algo así como hijos de ese hombre también, no lograban sentirse parte, por lo que decidieron comenzar su vida por su cuenta, en otro lado.
Mar: Muchas gracias por todo - los abrazó -. Gracias por cuidar a mi hija - le dijo a Micaela -. Gracias por protegernos - le dijo a Federico.
Rama: Gracias, sin ustedes no hubiéramos podido - les decía mientras se despedía con un abrazo.
Federico: Y sin ustedes nosotros seguiríamos ahí... Gracias.
Micaela: Gracias por darnos la mejor oportunidad de nuestras vidas.
La pareja se retiró para que ellos pudieran irse, pero cuando estaban por hacerlo, se acercó Luca.
Luca: ¿No se van a quedar con nosotros un poco más?
Federico: No creo que sea buena idea...
Micaela: Estuvimos muchos años ahí encerrados. Necesitamos viajar, encontrar nuestro lugar.
Luca: Quiero que sepan que siempre que quieran, acá van a estar las puertas abiertas para ustedes.
Micaela: Me encantaría volver algún día...
Luca sonrió cuando dijo eso, y ella sonrió también.
Federico: Nos vemos, Luca. Gracias por no matarme - lo saludó y se subió a un taxi que los esperaba.
Luca: Nos vamos a volver a ver, entonces.
Micaela: Sí, hasta pronto.
Y se despidieron, esperando ese momento.

Habiéndose librado de las amenazas y las preocupaciones, sólo quedaba vivir el momento y disfrutar cada segundo. Thiago estaba en casa de nuevo, y no dejó pasar mucho tiempo sin cantar con sus amigos. Los TeenAngels estaban juntos otra vez y ya nada los podía volver a separar. Además, rápidamente activaron y comenzaron a escribir nuevas canciones, más motivados que nunca. Y planeaban presentarlas a sus seres queridos en el siguiente evento importante, que ocurrió en marzo del 2016. Luego del nacimiento de los mellizos, Mar y Rama hablaron de su casamiento pendiente y decidieron hacerlo. Entonces, con ayuda de todos, lo organizaron, deseando que significara mucho más que su amor, sino que era la excusa perfecta para celebrar que finalmente podían ser felices, todos juntos.

Jazmín fue la primera en entrar para ayudar a Mar, quien aún estaba en bata, a prepararse. Al verla y al caer en que su mejor amiga estaba por casarse, no pudo evitar sentirse afortunada de tener en su vida a la persona que había estado para ella siempre.
Jazmín: No sabés lo feliz que me hace estar acá, acompañándote - le decía a Mar, emocionada hasta las lágrimas -. Me acuerdo cuando te casaste a escondidas y vos me hiciste parte - mencionó y ambas rieron.
Mar: Fuiste mi dama de honor, mi madrina de bodas. Y sos mi mejor amiga. Vos sos mi hermana... - La abrazó.
Todas las chicas entraron juntas a prepararse, ya que habían acordado vestirse del color que eligiera la novia, como si fueran damas de honor. A partir del color que quiso Mar, el violeta, sus amigas se pusieron de acuerdo para llevar el mismo vestido, aunque cada una le daría su propio toque. Y además, adaptaron ese color en la decoración y en las flores.

Rama la estaba esperando en el altar, nervioso como aquel día en que se dieron su primer beso. Paz y Hope avanzaron arrojando pétalos por el camino y detrás de ellas venía Bruno, con los anillos de sus padres. Ahí, apareció la novia, que estaba siendo acompañada por sus dos padres: Nico y Terremoto. Apenas se vieron, quisieron llorar de la felicidad. Todos esos años y las cosas que habían vivido juntos venía a su mente y no podían creer que finalmente había llegado el momento, se iban a casar.
Mar: Antes de conocerte yo no sabía lo que era que alguien me quisiera, ni sabía lo que era querer. Vos me cuidaste cuando nadie más se preocupó por mí, me enseñaste que había algo más que lo que teníamos. Y yo no sabía lo que estaba sintiendo, esas mariposas en la panza que revoloteaban cuando vos me sonreías. Siempre fue amor. Y después de tantos años, es eso y mucho más. Y siempre lo va a ser. Te amo... Y con este anillo, yo te elijo como mi marido y mi compañero para toda la vida.
Ella le puso el anillo y él no dudó en ser sincero sobre lo que ella significaba para él.
Rama: Yo te amo desde que llegaste a mi vida, Mar. Lo único que quise desde ese momento siempre fue hacerte feliz. Y eso es lo que voy a seguir haciendo, porque vos me haces feliz a mí. Por vos yo fui fuerte en los peores momentos, por vos yo fui valiente y aprendí a luchar por un mundo mejor. El mundo que te quería dar a vos, a mi hermanita, y ahora, a nuestros hijos. Toda mi vida te voy a elegir a vos, como mi compañera, como mi amor, - le tomó la mano y le puso el anillo - y ahora como mi mujer.
Luego de esas tiernas palabras, el juez de paz los declaró marido y mujer. Ellos se besaron y todos festejaron. La pareja fue pasando mientras sus seres queridos les tiraban más pétalos y se volvieron a besar.

Después de la parte romántica, los novios hablaron un rato con sus invitados antes de que comenzara la fiesta. Ahí, ellos volvieron a ver a Micaela y Federico, quienes habían aceptado la invitación y habían asistido a la boda.
Micaela: ¡Felicidades! Se merecen lo mejor - los abrazó.
Federico: Estoy muy feliz por ustedes y por su familia, felicidades.
Rama: Muchas gracias, y gracias por venir.
Mar: Sí, para nosotros era muy importante que estuvieran acá. Queremos decirles algo...
Federico: ¿Qué pasó?
Mar: Cuando se fueron, pensamos en ustedes y en cuánto nos ayudaron. Y consideramos que nuestros hijos debían llevar sus nombres.
Rama: Me gustaría que saluden a Federico y a Micaela... - les dijo, acercándose a los bebés.
Los hermanos se emocionaron y lloraron, agradeciéndoles el honor de formar parte de sus vidas de esa manera. Aunque siguieran viajando, de alguna manera siempre estarían con ellos.

Ya estaban todos listos para escuchar a los TeenAngels después de más de 5 años de silencio por la ausencia de Thiago. Pero ese día los cinco subieron al escenario y comenzaron su show con "Llega en forma de amor", que decia:

Hoy quiero escuchar al corazón
Hoy quiero pintar al mundo de otro color
Ese mundo que me espera
Y al que mi sueño me lleva
Y que tiene lo que quiero yo

Durante toda su vida sus deseos fueron cambiando, pero siempre apuntaban ese mundo mejor, a esa vida llena de amor. Y a pesar de todo lo malo por lo que tuvieron que pasar, desde que se conocieron supieron que, estando junto a sus amigos y a las personas que amaban, siempre lo tendrían.

Hoy creo que todo puede ser mejor
Hay un camino donde brilla el sol
En otro lugar
Hoy yo le hago caso a mi imaginación
Creo que todo tiene solución
Hoy vuelvo a empezar

Micaela y Federico (los adultos) se sintieron identificados con esa parte. Ellos se habían ido a buscar su lugar lejos de todo lo que habían vivido. Y disfrutaron del viaje, pero no se sentía como un hogar. Entonces entendieron que no necesitaban ir a otro lugar, sino estar juntos. Y mientras escuchaban lo que seguía de la canción, se abrazaron.

Todo lo que quieras, lo que pidas, lo que esperas
Llega en forma de amor
Todo lo que quieras, lo que sueñes, lo que ruegas
Llega en forma de amor
Hoy llega en forma de amor
Hoy llega en forma de amor

Y esa era la clave: el amor. Esa era la fuerza más poderosa, capaz de librarte de las penas y de lograr que las personas tuvieran por qué luchar, por qué mejorar cada día. Juan Cruz había entendido eso y por el amor que sus hijos le brindaron pudo mejorar, teniendo un mejor futuro él, ellos y todos.

Todos tenían amor de alguna manera: por su pareja, por su familia, por sus amigos. Mar y Rama estaban celebrando ese amor con su casamiento y, con ellos, todos también lo hacían. Bailaron, cantaron y aprovecharon ese momento para expresarle a las personas que las querían. En especial aquellos que aún no habían avanzado: Paz estaba con Camilo y en un momento ella le tomó la mano, haciéndolo sonreír.
Por otro lado estaban Micaela y Luca, quienes habían cruzado miradas todo el día. Él la sacó a bailar y, al terminar, se besaron.

Mar y Rama se habían sacado cientos de fotos y en su nueva casa junto a la playa, fueron colocándolas. Fotos de su adolescencia, recordando los mejores momentos junto a sus amigos. De ellos enamorados siendo novios y siendo esposos en su casamiento. Fotos de sus hijos, de la familia que habían formado. Y de la familia que les había dado la vida en el Hogar Mágico. Colgaron una foto donde estaban absolutamente todos, que habían sacado en su casamiento y se sintieron orgullosos de lo que habían logrado.

Casi 10 años pasaron desde que la historia había comenzado. Pasó de todo. Hubieron momentos buenos y momentos malos. Pero saben que todas esas experiencias fueron necesarias en su vida para convertirse en quienes son y lograr enfrentar los obstáculos. Lo mejor del presente era que no habían más amenazas, por primera vez no estaban preocupados. Y ese era el comienzo de una vida mejor para todos. Una vida donde la felicidad llega en forma de amor.

Fin

Casi Ángeles: La Nueva Generación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora