Capitulo 10: Punto de vista de Gally

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Mientras trabajaba en cortar la madera, una sensación de incomodidad comenzó a crecer en mí. Había algo en el comportamiento de ______ que no podía ignorar, una curiosa familiaridad que me inquietaba. Cuando se acercó a mí, me preparé para lo peor, pero no esperaba que su toque fuera tan... íntimo.

Cuando ______ extendió su mano y acarició mi rostro, me quedé momentáneamente paralizado. El contacto era suave y sorprendentemente reconfortante, como si una parte de mí, que había estado dormida durante mucho tiempo, se despertara. Fue como si su toque evocara recuerdos lejanos, recuerdos que no lograba recordar con claridad.

Pero esa sensación de conexión duró poco. La realidad de la situación y la necesidad de mantener la distancia se hicieron presentes. Sentí cómo mi corazón aceleraba y una incomodidad creciente invadía mi pecho. Con un movimiento rápido, retiré mi mano y me alejé de ella. No podía permitirme perder el enfoque, no aquí, no ahora.

"Lo siento," dije con rapidez, intentando restablecer las barreras que había puesto entre nosotros. "No debería... no podemos hacer esto."

El dolor en sus ojos y la sorpresa en su rostro me afectaron más de lo que esperaba. A pesar de mis esfuerzos por mantener la distancia, no pude evitar notar la vulnerabilidad que se reflejaba en su expresión. Me preguntaba si ella también sentía lo mismo que yo, esa extraña sensación de familiaridad que no podía explicar.

"¿Por qué no?" preguntó, y sus palabras me hicieron cuestionar mis propias razones. Mi mente luchaba por encontrar una respuesta que fuera coherente con la situación.

"Tenemos que mantenernos enfocados," respondí, aunque sabía que mi excusa era débil. Había algo más que no quería admitir, algo que tenía que ver con mi propio miedo a enfrentar lo desconocido.

Mientras la veía alejarse, me sentí aliviado pero también perturbado. Había algo en _____ que me atraía, algo que me hacía cuestionar todo lo que sabía sobre mí mismo y sobre este lugar. A pesar de mi esfuerzo por mantener la distancia, sabía que nuestras interacciones estaban comenzando a desentrañar secretos que no estaba listo para enfrentar.

Observé cómo se alejaba, con la esperanza de que ella también entendiera la necesidad de mantener cierta distancia. Pero en el fondo, sabía que la conexión que había sentido era real, y que, inevitablemente, tendríamos que enfrentarnos a lo que significaba.

Hasta que te vuelva a verDonde viven las historias. Descúbrelo ahora