¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Richard me miraba desafiante, cómo esperando a que yo ofendiera a su amiguita, y de verdad hubiese querido hacerlo, pero tenía una reunión, y ponerme a pelear con ellos era una perdedera de tiempo.
—No tengo tiempo para perderlo con ustedes, tengo una reunión, adiós— vi que Richard abrió sus ojos , sorprendido, pero no le presté atención, y seguí por su lado.
Esperen.
También estarán presentes algunos promotores clave, incluyendo... un equipo de fútbol, creo que es el... eh, no recuerdo el nombre ahora, pero estarán allí.
Ay no. Equipo de futbol, y Richard está aquí.
Eso solo significa una cosa: voy a tener que trabajar con él.
Volteé mi cabeza instantáneamente, él ya me estaba mirando. Así que por eso se sorprendió. Él tampoco se lo esperaba.
Aproveché la oportunidad para mirarlo feo, y seguí mi camino hacía el ascensor. Cuando llegué a la oficina ya habían algunos inversores y promotores sentados. Los saludé amablemente, y esperé a que me dijeran dónde iba a sentarme durante la reunión. Al rato llegaron Richard, con quién supuse que era el representante legal del equipo, y para mí alegría, asignaron el puesto de Richard a mí lado.
La sala de conferencias estaba llena, y aunque todos los presentes parecían relajados, yo estaba nerviosa, sentía mucha responsabilidad. Después de todo, esta era la reunión en la que el futuro de mi causa benéfica podía tomar forma definitiva. GlobalInvest ya había mostrado un interés considerable, pero hoy se trataba de asegurar su compromiso y el de otros importantes inversores y patrocinadores.
—Gracias a todos por estar aquí hoy—dije, tomando un respiro profundo antes de continuar—. Este proyecto es más que una simple iniciativa benéfica para mí; es un sueño que he tenido durante años, y el hecho de que todos ustedes estén aquí, apoyando esta causa, me llena de esperanza y gratitud.
Marcos Almeida, el representante de GlobalInvest, asintió con una sonrisa.
—Gabriela, gracias a ti por invitarnos a ser parte de este proyecto. Hemos revisado los planes y estamos impresionados por el impacto que podrías tener en las comunidades de Brasil. Queremos asegurarte nuestro compromiso como inversores principales.
Sentí un alivio inmediato al escuchar esas palabras, pero sabía que aún había más por discutir.
—Eso significa mucho para nosotros, Marcos—respondí—. GlobalInvest tiene una reputación increíble, y su apoyo no solo nos ayudará a alcanzar nuestros objetivos, sino que también le dará legitimidad al proyecto desde el inicio.
Antes de que pudiera continuar, Abel Ferreira, el representante del Palmeiras, intervino.
—Gabriela, disculpa, pero me gustaría saber un poco más sobre cómo planeas integrar las actividades deportivas en el proyecto. Entendemos que nuestra inversión tiene un componente de responsabilidad social, pero también estamos interesados en cómo esto puede dar más visibilidad al equipo, especialmente entre los jóvenes.
