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Dante.

Me demoro una hora en llegar nuevamente a la casa. Le compré todo lo necesario.

Toallas sanitarias, copa menstrual, de todos los tamaños para estar seguro, chocolate, que por lo que investigue, ayuda a reducir dolores menstruales. También compré pastillas para los dolores y hierbas naturales que sirvan para eso.

Estuve seguro al salir porque tengo toda mi casa vigilada, mi casa no la habitan más personas que yo, lo demás es solamente tecnología, así no me arriesgo a salir traicionado.

Tengo un sistema de seguridad muy avanzado, dónde en caso de que cualquier intruso se meta a la casa, puedo hacer que se bloqueen las puertas en general, así que si alguien llegara a entrar, pondré a Salvo a Angelina.

Mi lógica de colocar la seguridad en ese momento fue, que la persona que se meta, la podría dejar encerrada en mi casa. Conmigo, de esta manera yo puedo encargarme de él sin miedo a que se escape.

Haciendo imposible que se escape y filtre información, claro está.

Subo las escaleras y llegó a la habitación. Tocó la puerta antes de entrar y escucho su voz indicándome que pase.

—Toma, esto te ayudará.—Le entrego la bolsa llena de cosas.

Ella las recibe agradeciendo y empieza a observarlas.

No me había dado cuenta. Está con otra camisa mía, su cabello está mojado...

—Esto... Esto es muy grande.—Dice mostrándome una copa menstrual.

—¿Acaso eres mujer? No sabes nada de tu propio periodo.—ruedo los ojos.—Va por tallas, te traje todas las que había disponibles.

—¿Y... Cómo sé que talla soy?—Pregunta con un poco de vergüenza en su voz.

—Se supone que la talla S es para las que no han tenido hijos.—Contesto.—Eso es todo lo que me dijo la señora.

—Bien...

—¿Quieres que te ayude a ponerla?—Pregunto viendo que no tiene ni idea de cómo ocupar la copa.

Yo tampoco, pero soy una persona que aprende rápido.

—¡¿Estás loco?!—Dice alterada.—Vete.

Me encojo de hombros y salgo de la habitación. Salgo de ahí para ir directamente a la cocina, donde preparo las hierbas que tengo en mi bolsillo.

Mi madre siempre me dijo que lo natural es lo único que no nos engaña con componentes extraños. Al ser algo natural y prepararlo uno mismo puede corroborar lo que está consumiendo, evitando así muchos riesgos.

Compré algo llamado Milenrama. Según investigue supe que sirve para aliviar dolores de este tipo, es relajante y antiinflamatoria.

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