𝐂𝐀𝐏¹¹ ━━━ Un gesto de amor

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𝐂𝐀𝐏𝐈́𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐎𝐍𝐂𝐄
(UN GESTO DE AMOR)

Lanier llevaba sus libros en la mano, con la mente sumergida en la presión de la operación que se avecinaba

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Lanier llevaba sus libros en la mano, con la mente sumergida en la presión de la operación que se avecinaba. Aunque intentaba mantenerse concentrado, no podía sacudirse la sensación de inquietud. Abrió su libro y comenzó a leer, buscando calma en las palabras, mientras sentía la mirada atenta de Belle sobre él, como si ella también captara la tensión en el aire.

──"Un trombo grande que se desarrolla..."

Antes de que pudiera terminar, Jack lo interrumpió con una voz calmada pero firme.

──"...en proximidad a su hilo y obstruye la arteria". Lo sé. ──dijo el rubio, preparando con precisión a la paciente dormida y lista para la operación.

Lanier continuó, queriendo mantenerse útil ──"El cuerpo carotídeo..."──cerró el libro, esperando que su memoria fuera suficiente para asistir a Jack.

──¿Puedes parar, por favor? ──pidió Jack, su concentración inquebrantable.──"La ligadura impedirá la propagación del coágulo y reducirá el vasoespasmo".──concluyó Jack, apenas alzando la vista hacia Lanier.──¿Esta es la arteria? ──preguntó, sus ojos serios clavados en el pelinegro.

Lanier sintió cómo la frialdad en la actitud de Jack lo atravesaba. Había algo diferente, un vacío en los pequeños gestos que antes lo habían reconfortado. El aire parecía más denso, y la incomodidad que sentía se expandió hacia Belle, quien observaba desde un rincón, inquieta.

──Eso creo ──respondió Lanier, su voz temblando mientras volvía a consultar el libro. No podía evitar sentir que, con cada página que hojeaba, la distancia entre ellos se hacía más grande.

──¿Eso crees? Si te equivocas, se muere ──Jack lo miró con una intensidad que le hizo tragar saliva. Era una sentencia que caló hondo.

──Sí ──replicó Lanier, esta vez con más firmeza. Pero incluso esa afirmación lo hizo sentir vulnerable.

──Pinzas ──ordenó Jack, extendiendo la mano sin dudar, mientras seguía concentrado en el procedimiento.

Lanier, nervioso, se apresuró a entregarle las pinzas. Mientras lo observaba trabajar, no podía evitar sentirse pequeño, como si el peso de la vida que sostenían entre manos estuviera más allá de sus capacidades. Y aun así, sabía que debía mantener la compostura.

──Tienes tiempo... ──intentó, deseando ofrecerle algo de seguridad.

──Ya lo tengo ──respondió Jack con rapidez, su confianza inquebrantable.──Ya está. Ligadura final. Bisturí.

Hetty le entregó el bisturí, y Jack continuó, moviéndose con la precisión de alguien que había repetido esos pasos en su mente miles de veces. Lanier, aún inseguro, le pasó las pinzas cuando se lo pidieron.

𝐓𝐎𝐎 𝐒𝐖𝐄𝐄𝐓 ; 𝐉𝐀𝐂𝐊 𝐃𝐀𝐖𝐊𝐈𝐍𝐒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora