Rain
Estocolmo, 02 de enero del 2023
Me incorporo del escritorio y camino hacia la ventana absorta en el reflejo de la luna que me ha acompañado una infinidad de veces. La soledad ya no es algo que me molesta. A decir verdad, ahora es una forma escapar de la realidad. Me permite tener espacio para poder reflexionar lo que estoy a punto de hacer.
Desvío la mirada hacia la habitación dónde se encuentra la cama cubierta por sábanas de seda blanca y las paredes se tiñen de un gris suave que contrasta con el amaderado del piso. También está repleta de un sinfín de muebles que no he tocado. Ya que, aún la conservo tal y como me la entregaron hace ocho años.
Es increíble como el tiempo no le da tregua a nadie y con cada segundo que pasa nos encamina más a la tumba. Lo sé, porque mi cabeza no ha parado de repetírmelo estos días.
Paseo a su alrededor hasta llegar al vestidor dónde sigo empacando la ropa en las maletas. La tarea me toma más tiempo del que debería y me tienta la idea de dejarlo todo y marcharme solo con lo que llevo puesto.
La urgencia de abandonar este sitio es tan grande que no me importa nada, ni siquiera el sonido de la puerta que desvía los pensamientos que rondan dentro de mí.
¡Mierda!
Desearía que fueran capaces de dejarme en paz.
Dejo tirada la ropa y apresuro mis pies hacia la entrada, hago girar la cerradura y... Solo con verla parada bajo el umbral, luciendo tan pulcra y perfecta como siempre, me provoca una mueca de asco.
El vestido largo color negro ciñe sus caderas haciendo su figura más esbelta a pesar de los años y el labial rojo, le da un toque seductor; además de resaltar la palidez de su piel.
Sin duda, Lilian Fors es una mujer hermosa de ojos color acero.
Es una pena, que ni toda la belleza del mundo, le quite la oscuridad que carga sobre sus hombros.
Verla es un claro recordatorio de todo lo que quiero dejar atrás.
—Rain —dice arrugando la nariz al ver el desorden a mi espalda— sabes bien que ellos no tardarán en enterarse de tu partida y tu padre no va a permitir que...
—¿Otra vez con lo mismo?—la enfrento.
—Simplemente, no logro comprender de dónde se te ocurren tantas estupideces, Rain —me reprocha —estás siendo impulsiva y no te das cuenta de que tus malditos actos pueden afectarnos a todos.
—Me importa muy poco lo que les ocurra, fui clara al decir que no quiero intromisiones ni trabas en este asunto —aprieto los puños y repito lo que les dije hace unos días cuando cometí el gran error de comprar el vuelo con la tarjeta de crédito que hasta el momento no había utilizado.
No puedo contener el desprecio que le tengo, me jode que vaya por el mundo desparramando hipocresía.
Me pregunto si antes era diferente. Antes dónde yo no era su paciente y ella no era mi médico. Antes donde necesitaba a mi madre y no a una esposa patética y sumisa.
—Sabes que solo bus... —frunce el entrecejo.
—¡¿No?! —la corto y la ira se puede reflejar en mis ojos— lo único que tú buscas es mantener esta farsa a la que tanto estás acostumbrada.
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Bucle [+21]
Teen FictionTras las paredes de un hospital, Rain ha sido prisionera de un bucle de dolor y manipulación que se repite sin fin. Nacida para ser un experimento, criada para ser un objeto, su existencia ha sido una lucha constante por la supervivencia. Pero cuand...