Narra Samantha
Esa noche, me costó conciliar el sueño. Las palabras de Julieta, tan bien intencionadas, solo me hicieron tener más confusión. Sabía que ella quería lo mejor para su hermano y para mí, pero sus mensajes no podían acallar las voces en mi cabeza que repetían las advertencias y las dudas.
A la mañana siguiente, me desperté sintiéndome agotada. Los rayos del sol se filtraban a través de las cortinas de mi habitación. Sentía un peso en el pecho, y cada movimiento parecía un esfuerzo.
Estaba en la cocina preparando un café cuando recibí otro mensaje, esta vez de Félix:
"Podemos hablar? Es importante."
Se me hizo raro ya que después de la pelea, el ya no me había hablado ni yo a él, ni se juntaba con nosotros.
"Hola, si está bien"
"Nos vemos en media hora, en esta ubicación"
Después de prepararme, salí rumbo al parque. El aire fresco me ayudó a despejarme un poco, pero la ansiedad seguía ahí. Al llegar, vi a Félix sentado en una mesa lejana.
Félix: Gracias por venir -dijo él mientras me miraba.
Samy: De nada -respondi, tratando de sonar tranquila, aunque en el fondo estaba igual de nerviosa.
Tomó un sorbo de su café antes de continuar.
Felix: Sé que la última vez que hablamos... las cosas no terminaron bien. Quiero pedirte disculpas por eso. -Su mirada se mantenía fija en la taza-. No debería haberme metido en tu relación con el.
Samy: No te preocupes... -dije suavemente-. Supongo que lo hiciste porque no quieres que me haga daño.
Él asintió. Respiró hondo y hablo.
Félix: Hay algo más que quiero que sepas -comenzó, sin levantar la vista-. Sé que tú estás con él, y respeto eso... pero no puedo seguir adelante sin ser honesto contigo.
Frunci el ceño ligeramente, sin entender a dónde quería llegar. Él continuó, su voz ahora más baja, como si temiera que alguien más pudiera escucharlo.
Felix: La verdad de la que porque me enoje al verte con el es que... me
gustas...desde hace tiempo. Pero nunca dije nada porque sé que estás con el...-Narrador Omnicente
El día siguiente llegó con una calma inesperada. Adrián se despertó temprano, aunque no había dormido mucho. El sol se filtraba a través de las cortinas, inundando la habitación con una luz cálida. A pesar del cansancio, sentía una extraña sensación de claridad, como si las horas de insomnio hubieran despejado sus pensamientos.
Se levantó lentamente, sin prisa, y se dirigió hacia la cocina. Julieta aún dormía, así que decidió preparar café para ambos. El sonido del café goteando en la cafetera y el aroma que comenzaba a llenar la cocina lo relajaron, aunque solo fuera un poco.
Mientras esperaba, revisó su teléfono por enésima vez, buscando algún mensaje de Samy. Nada. Sabía que no podía seguir así, obsesionándose con cada minuto de silencio, pero era difícil no hacerlo cuando tanto estaba en juego.
Después de servir las tazas de café, se sentó en la mesa, mirando por la ventana mientras sorbía su café. Intentaba concentrarse en el presente, en no dejar que la ansiedad lo consumiera.
El sonido de pasos ligeros detrás de él lo sacó de sus pensamientos. Julieta entró en la cocina, despeinada pero con una sonrisa suave en los labios.
Julieta: Buenos días -dijo ella, estirándose antes de tomar la taza de café que Adrián le había dejado preparada.
Adrián: Buenos días -respondió él, devolviéndole la sonrisa.
Se sentaron juntos en la mesa, disfrutando de un momento de tranquilidad. No había necesidad de palabras en ese instante; ambos sabían que el silencio podía ser reconfortante a veces. Sin embargo, Julieta no pudo evitar mirarlo con curiosidad, notando que su hermano parecía más relajado, aunque no del todo en paz.
Julieta: ¿Cómo te sientes hoy? -preguntó finalmente, rompiendo el silencio.
Adrián se encogió de hombros y tomó un sorbo de café antes de responder.
Adrián: Un poco mejor, creo. Intento no pensar demasiado en las cosas... -dijo, mirando hacia la ventana-. Pero es difícil. Solo quiero que todo esto se resuelva de una vez.
Julieta asintió, comprendiendo su frustración.
Julieta: Lo hará, Adrián. Solo tienes que mantener la calma. Lo peor que podrías hacer ahora es precipitarte -dijo ella con suavidad, recordándole la conversación de la noche anterior.
Outfit
Cap listo, mañana nos vemos o al ratito nose, depende si alcanzo, con "El último anillo" 🫶🏻
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Amor Prohibido- Rivers gg
De TodoAdrián Ramírez Castillo y Samantha Rivera Treviño. Adolescentes en su primer año de Universidad, formarán una amistad que durará años, y posiblemente, formar una relación, pero no sera tan fácil ya que el padre de Samantha y el padre de Adrian estar...