16 de Abril

Sindrome...

Shion en su conversación con el detective donde intentaba hacerle notar su error y poder pensar en una solución además de la cárcel sobre la situación ocurrida entre el y Saga, mencionó un detalle importante que no solo debía de compartirselo a Ikki sino al resto de policías que habían ayudado y aportado al caso.

Katya había desaparecido aquella noche en que decidieron atacar, se había perdido de vista por un momento cuando salió de la casa por una puerta trasera oculta provocando que los policías que estaban cerca por la oscuridad de la noche y al estar atentos a otra entrada descuidaran otras partes de la casa. Se intuía que la chica se había oculto cerca del lugar y que en la mañana realizó su huida cuando ningún policía se encontraba cerca como para vigilarla pero aunque la situación con Katya era de preocuparse, se mantenía cierta fijación por el caso y proceso penal que enfrentaría Kanon pareciendo que demoraría más de lo esperado a no estar cooperando como se debería.

A pesar de que Hyoga e Hilda habían estado visitando el reclusorio donde se mantenía preso por un cierto límite de tiempo antes de que el juez dictará que se le enviara como tal a la penitenciaría con su sentencia oficial, aquel hombre seguía rehusandose a hablar quedando en absoluto silencio cuando era su momento de responder a las preguntas realizadas por Hyoga.

Shun era pieza fundamental para que aclarara y explicara sus hechos y pudiera testificar y hacer la denuncia pertinente como algunas víctimas ya habían realizado (aunque era un porcentaje menor al que esperaban recibir) pero claro estaba que Ikki no permitía que ni siquiera se mencionara el nombre de su hermano dentro del trabajo aclarando que Shun declararía solo cuando él lo quisiera y se sintiera listo de hacerlo... Aunque el tiempo se estaba acabando y el joven parecía no recuperarse.

Con las luces apagadas, el cuarto en penumbra al mantener la ventana cerrada impidiendo el paso de la luz por la cortina negra que la cubría, la puerta semi abierta y como único objeto de iluminación una pequeña lámpara de noche en una esquina del cuarto que emitía una luz naranja que apenas y podía ser percibida debido a su baja potencia. Shun permanecía recostado en su cama, con sus almohadas mullidas y cubriendo su cuerpo con una frazada a pesar de estar vistiendo una pijama de algodón que lo protegía únicamente del frío de la noche; el muchacho permanecía dormido la mayor parte del tiempo por decisión propia al no querer decir nada o tan siquiera moverse de la cama recibiendo terapia entre semana en sus músculos para no atrofiarlos pero esto solo llevado a cabo poniéndole al chico una máscara de dormir para que no viera que lo estaban tocando y por consiguiente y también resaltando como problema usual, cuando se dormía era el momento ideal que podía tener el médico o Ikki para cambiar la sonda de alimentación debido a que si intentaban hacerlo cuando Shun estuviera despierto el muchacho impedía que se le acercarán mostrando únicamente ahí su voz para gritarles que se fueran.

Ikki vivía una situación difícil y bastante complicada de llevar en su casa a causa de su hermano que aunque no quiera decirlo tan abiertamente el mismo sabía que era demasiado trabajo (por no decir una carga) tener que lidiar con su comportamiento al tener él que supervisarlo a toda hora sacrificando sus horas de sueño y descanso para atender alguna de sus necesidades que aunque fueran mínimas debían de ser supervisadas y aunque de ves en cuando el doctor que había contratado se encargaba de revisar los signos vitales del chico, el detective no buscaba depender completamente de el médico por si ocurría algo que no tuviera previsto.

Pero aunque Shun en su comportamiento se mantenía bastante cerrado al diálogo o la convivencia en sí con alguien más algo raro pasaba cuando veía únicamente a su hermano, cada que Ikki entraba a cambiar sábanas o para hacer limpieza en el cuarto, el menor lo observaba directamente con sus ojos abiertos de par en par, sin despegar su vista temblorosa de él, con sus labios apretados y con una lenta respiración.