MARÍA
Si lo que estaba pasando en el escenario era caliente, lo que estaba pasando en nuestra cabina era fuego, puro fuego.
Yo le estaba haciendo una paja por encima de sus pantalones.
Él tenía las manos sobre la mesa, impidiendo que yo pudiera ver.
No quitaba los ojos del escenario.
La polla de Bax era jodidamente enorme. Todo en lo que podía pensar era en chuparle la polla.
Dios, lo deseo tanto.
Solo sexo. Sexo sucio, salvaje, delirante.
En el escenario, uno de los chicos se estaba follando a la chica, que ahora tenía las piernas libres, por delante, mientras el otro seguía comiéndole el culo.
Me incliné sobre la oreja de Bax y le susurré
- Es hora de irnos.- Tomé su mano y nos acompañé fuera del club hasta el estacionamiento, donde Drew nos estaba esperando.
Me miró perplejo y abrió la puerta para que entráramos.
- Por favor, sube la ventana de privacidad. -
En cuanto subí la ventanilla, me arrodillé entre sus piernas, le bajé el cierre del pantalón y tomé su polla entre mis manos.
BAX
Esto tenía que ser un sueño. No puede ser verdad.
María se está ahogando literalmente con mi polla. Tengo mis manos agarrando su cabello mientras me chupa la vida.
He tenido sexo con muchas parejas, pero esta adrenalina... nadie me hace sentir así.
Se siente tan bien.
Tiene mi polla en su garganta y mis bolas en su mano.
-Me voy a correr.- Le advertí, y ella cambió la velocidad, yendo más fuerte, más rápido. Estaba perdiendo la cabeza.
Me derramé en su boca, garganta y barbilla. Ella tragó saliva y me dio una sonrisa que decía que estaba orgullosa de sí misma.
Tomó toallitas del respaldo del asiento del conductor y se limpió.
Quise decir algo, pero Drew anunció que estábamos en mi casa.
-Te llamaré.- dijo. Asentí. - Buenas noches.- dijo ella y el auto arrancó.
¿Qué carajo acaba de pasar?
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Amarrada (Tied up)
RomanceDespués de un matrimonio fallido, la pérdida de su bebé y el final de su programa, la actriz Maria Fox tiene la oportunidad de comenzar una nueva vida en Londres. La película es una película independiente de fantasía, pero es un comienzo. Mi divor...
