HUYE - ATEEZ

Capítulo 20

POV Jang Mi

Un silencio incómodo se instaló en la habitación después de sus palabras, y yo no podía más que mirarlo con preocupación y confusión. Sus heridas eran claras evidencia de que San no se había contenido demasiado en el enfrentamiento, aunque claramente había tenido órdenes de no matarlo.

"Pero él... No se contuvo del todo," dije en un susurro, señalando su brazo izquierdo.

"No," respondió Yunho, mirando hacia abajo y mirando su brazo herido. "No lo hizo."

Suspiró, mirándome con una expresión cansada y derrotada en su rostro.

Podía sentir cómo las preguntas recorrían mi mente, pero sabía que Yunho estaba demasiado débil y adolorido como para responderlas en ese momento. Su rostro era la viva imagen de la fatiga y la frustración, y sabía que necesitaba un momento para descansar y sanar sus heridas.

Mi mirada se posó en Yunho con creciente preocupación.

"Mierda" murmuré, mientras lo observaba preocupada.

Yunho alzó la vista hacia mí, con una expresión de curiosidad ante mi repentina exclamación. "¿Qué pasa?" Preguntó, su voz aún débil pero llena de urgencia.

"La segunda regla..." murmuré preocupada.

La comprensión se reflejó en el rostro de Yunho al escuchar mis palabras. El miedo y la preocupación aparecieron en sus ojos mientras se daba cuenta de lo que había sucedido.

"Las reglas..." Dijo, repitiendo mis palabras en un susurro. "Dios es verdad...se supone que debemos escondernos juntos"

Su rostro palideció ligeramente ante la gravedad de nuestra infracción, y me pregunté qué consecuencias podríamos enfrentar por infringir una de las reglas tan importantes que se nos había impuesto.

"Joder..." murmuró Yunho, con la frustración evidente en su voz. "También rompimos la primera regla. 'Ni una sola palabra...'"

Su rostro se oscureció cuando se dio cuenta de la gravedad de nuestra situación. Ninguno de nosotros había hecho caso de las restricciones que se nos habían impuesto, y ahora podríamos tener que enfrentarnos a las consecuencias por ello.

Suspiró y se llevó una mano a la cabeza, visiblemente preocupado por lo que podría suceder a continuación. Sabía que habíamos cometido un grave error al infringir las reglas y, a cambio, podríamos pagar un precio muy alto.

"No pensemos en eso ahora..." dije en un susurro, intentando calmarme a mí misma y a Yunho. Sabía que no había punto en preocuparse por lo que aún podía suceder, pero era difícil mantener la calma ante el peso de la incertidumbre que se cernía sobre nosotros.

"Tiene que haber una forma de salir de aquí..." murmuré, más para mí misma que para Yunho.

Él asintió, aún con su brazo izquierdo sujeto contra su cuerpo. Estaba claro que necesitaba atención médica y que salir de allí era nuestra prioridad más inmediata.

Comencé a caminar alrededor de la habitación, buscando desesperadamente una salida o algún indicio de cómo salir de allí. Examiné cada rincón, cada grieta en las paredes, cada detalle de la habitación.

Yunho me observaba, aún sentado en el suelo, con expresión cansada y preocupada. Era evidente que él también estaba desesperado por encontrar una forma de escapar de allí.

Me senté a su lado en el piso y suspiré con frustración. "Teníamos la clave para salir, y la teníamos tan cerca..." dije, recordando la pequeña caja que había estado en nuestro poder.