𝜗 𝒄hapter 𝒏𝒊𝒏𝒆 𝜚

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✩ˑ ━━ ❛ 𝓒𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝓝𝐈𝐍𝐄 ❜ ┊ೃ
¡ 𝒕𝒉𝒆 𝒌𝒊𝒔𝒔  !

























Fue muy difícil lograr que Ben se me despegara de encima y que se fuera a su partido de tourney. Jay se lo llevó arrastrando hasta al campo pero Ben quería seguir pegado a mí. Cuando dije que fue difícil, fue difícil. Intenso besarme varias veces y nunca soltó mi cintura ni mi mano cuando nos encaminábamos al vestuario con Jay para el partido.

—Suéltala. —le dijo Jay como por quinta vez, ya esta vez irritado al ver como Ben se negaba rotundamente a soltarme.

—No. —negó apretándome contra él—. Es mía.

—La verás después. Tenemos que irnos. —insistió el hijo de Jafar, jalándolo con todas sus fuerzas, pero parecía que Ben tenía más—. ¡Dile algo!

Suspiré tomando a Ben de los hombros para separarlo de mí. Este se resistió pero en cuanto lo llame suavemente, alzó su mirada hacia mi. Sus ojos estaban resplandecientes en un intenso brillo que se hizo presente en cuanto volteó a verme.

—Volveré a verte, ¿verdad?

—Ey, tu Julieta no se va a morir ni nada. Ya vámonos, Romeo. —habló Jay mientras lo tomaba de la camisa y se lo llevaba arrastrando.

—¡Te amo! —gritó Ben como pudo siendo arrastrado por Jay fuera de los vestuarios.

En cuanto ambos oímos eso, nos paralizamos. Pero quisimos convencernos de que era la poción que le dimos temprano. Aún así, no pude evitar emocionarme al oír lo que dijo. Mi corazón saltó contento de la felicidad. Y no evité sonreír.


El partido ya había comenzado

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El partido ya había comenzado. Ben ya estaba jugando pero de vez en cuando se detenían para buscarme entre la multitud. En cuanto me encontró, sonrió en grande y sacudió su mano hacia mi como saludo. Mis mejillas ardieron en un color carmesí y al segundo levanté mi mano para corresponderle al saludo. Él saltó de alegría y continuó con su juego, en el cual metieron a Jay y a Carlos también, logrando que nuestro equipo ganara.

Todo el mundo empezó a celebrar y las chicas a nuestro alrededor comenzaron a gritar de emoción, provocando que mis oídos dolieran por la aturdida que estaba consiguiendo por sus gritos tan intensos. Tuve hasta que cubrirme los oídos porque ya no aguantaba más.

Pero por nada del mundo le quite los ojos encime. Y vi como atravesaba la multitud para llegar frente al narrador del juego y quitarle el micrófono.

—Disculpen. Su atención, por favor. —en cuanto su voz sonó por el altavoz pidiendo atención, Ben recibió la mirada de todos—. Hoy me gustaría decir algo. —hizo una pausa—. ¡Denme una G! —dijo formando la letra con sus manos.

black roses   𖦹   ben bestia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora