La Bruja Nomi Alexiou

23 de agosto 2686

Nomi deambula por el pueblo Notre, conocido por su gran mercado de pociones, los procesos de alquimia y el templo de los chamanes Wataski. Estos chamanes tienen especial comunicación con los demonios malvados que amenazan los aquelarres y el mundo de los humanos.

Después de pasar por el mercado en búsqueda de ingredientes para sus pociones, pudo notar almas recién llegadas al inframundo, posiblemente de almas que dejaron el limbo o eran personas recién fallecidas. No le tomó importancia, hasta que se percató que estas dos almas comenzaron a seguirla por el pueblo.

Cansada de ignorarlas, Nomi las confronta, le pregunta  que quieren. Una de ellas proveniente del Limbo queria atacarla debido a todo el tiempo que permaneció en el Limbo, la rabia y desesperación se apoderaron de esta alma volviéndola oscura. Esta oscuridad era distinta a las que había conocido antes, se parecía mucho a la oscuridad de Zyrrath.

Debido a que se trataba a un poder y una oscuridad más poderosa que de la de Nomi, no pudo controlar a esta alma ni atacarla, sus ataques y hechizos no surtían efecto, solo podía defenderse. Al crear un campo de fuerza protector, el alma no podía atacarla más, por lo que Nomi aprovechó la situación para preguntarle que quería.

El alma oscura respondió, con voz rasgada y llena de odio: Quiero vengarme de las brujas...

Nomi, con tono desafiante pero curiosa: ¿Qué te he hecho yo?

El alma oscura se detiene bruscamente, sorprendida al darse cuenta de que Nomi puede interactuar con ella y exclama, con incredulidad y rabia: ¿Cómo es posible que puedas verme y hablarme? ¡ESO ES IMPOSIBLE! Solo puedes sentir las maldiciones que he lanzado sobre ti, ¡bruja estúpida!

Nomi (con una sonrisa fría): Sabes que tengo los poderes de Kype, por eso puedo verte y hablarte.

El alma oscura abre los ojos con asombro, pero luego una sonrisa malévola cruza su rostro: Yo sigo la voluntad de Zyrrath. Su voluntad es unirse a Kype e iniciar la guerra.

Nomi, (frunciendo el ceño, con una mezcla de duda e interés): ¿De qué guerra estás hablando?

El alma oscura se ríe siniestramente antes de desvanecerse: Ya lo sabrás.

Nomi intenta desesperadamente localizarla, pero falla. La otra alma, con una expresión igualmente siniestra, tenía malas intenciones, pero Nomi logró controlarla y preguntarle qué quería.

El alma (con una voz seca y cruel): Solo quiero matar a todas las brujas.

Nomi (frustrada pero insistente): ¿Qué me dices de la guerra que mencionó la otra alma oscura?

El alma (burlándose): No sé de qué guerra estás hablando, y aunque lo supiera, no te lo diría, ¡bruja estúpida!

De repente, Kype le habla a Nomi telepáticamente. Su voz es profunda y dominante.

Kype: ¿Qué está sucediendo, Nomi?

Nomi, (con una mezcla de temor y desafío): No lo sé... ¿Acaso iniciarás una guerra en el inframundo?

Kype (bruscamente): Cállate y absorbe esta alma. Necesito más poder...

Nomi suspira con resignación y absorbe esa alma. Kype desaparece.

Nomi, hablando para sí misma, con una expresión de preocupación: Qué horror, cada vez se vuelve más codicioso...

Nomi siguió su camino hacia el templo de los chamanes Wataski.

Al entrar pudo percatarse que llegó en medio de un ritual satánico, por lo que espero afuera a que terminara, no quería socializar con otro demonio, todos son testarudos y odiosos para Nomi.

Cuando terminó el ritual, Nomi entró al templo. Pudo notar que las vibras del templo estaban más agitadas que de costumbre, sentía el aire espeso, con mucha niebla a su alrededor y una oscuridad profunda. Al llegar al centro del templo encontró el punto clave del ritual satánico y su símbolo en el suelo.

Nomi se acercó al chamán con el peso de sus dudas y temores. El chamán, con su túnica negra adornada con símbolos satánicos en rojo vibrante, emanaba una presencia imponente, como si la oscuridad misma lo rodeara y protegiera. Cada símbolo en su vestimenta parecía contar una historia, una historia de pactos oscuros y poder ancestral. Sus sandalias de cuero gastado también llevaban grabadas runas protectoras, no solo complementando su atuendo, sino cargando un poder que lo conectaba a fuerzas más allá del mundo terrenal. Su mirada, sin embargo, era serena, como si llevara consigo la sabiduría de siglos de experiencia.

Alrededor de su cuello colgaba un amuleto hecho de hueso y metal, un artefacto que parecía pesar más que su tamaño, cargado con magia oscura y secretos ocultos. Su presencia irradiaba poder, pero también una sabiduría que Nomi sabía que necesitaba desesperadamente.

Nomi (con voz suplicante): Oh, chamán, necesito de tus conocimientos. Por favor, ayúdame.

El chamán la miró con calma y una leve sonrisa, como si hubiera visto a muchas almas desesperadas antes que ella. Con un gesto suave, la invitó a hablar.

Chamán (con voz tranquila): Tranquila, mi niña. Te brindaré mis conocimientos. ¿Qué es lo que te preocupa?

Nomi (con una mezcla de temor y esperanza): Tengo los poderes de Kype... Soy capaz de interactuar y controlar almas del inframundo. ¿Qué significa esto? ¿Cómo puedo usarlo a mi favor?

El chamán la observó con una mirada que parecía atravesar su alma. Sus palabras resonaron con una gravedad profunda.

Chamán: Mi niña, has sido bendecida y maldecida con los poderes del demonio Kype. Posees una habilidad que ninguna otra bruja tiene. Usa tu poder para proteger a las brujas, y no permitas que la guerra del inframundo se desate sobre este mundo.

De repente, el chamán comenzó a convulsionar, su cuerpo sacudido por visiones oscuras. Nomi retrocedió sorprendida, pero luego, con determinación, utilizó su hechizo para leer la mente del chamán. Lo que vio en su mente la llenó de horror: un futuro devastado, controlado por demonios, con muerte y destrucción extendiéndose por todo el mundo.

Nomi sintió una ola de desesperación. ¿Cómo iba ella, una simple bruja, a detener la guerra del inframundo? Incluso con los poderes de los demonios, la tarea parecía imposible. ¿Cómo podría enfrentarse a Kype, a Zyrrath, y a otros seres más allá de su comprensión?

Nomi (con desesperación): Oh, chamán, ¿cómo puedo evitar la guerra?

El chamán, aún convulsionando, logró murmurar unas palabras entrecortadas, pero claras.

Chamán: Debes superar a Kype. Debes vencerlo y convertirte en la bruja más poderosa. No será fácil, mi niña... Librarte de su influencia te costará caro.

Las palabras del chamán resonaron en la mente de Nomi. ¿Cómo podría superar a Kype? Aunque había logrado liberarse parcialmente de su control, la influencia del demonio aún pesaba sobre ella. Sin embargo, las palabras del chamán encendieron una chispa de esperanza en su interior.

Nomi (susurrando para sí misma): Me has iluminado... pero ¿cómo?

Sabía que el camino para librarse de Kype y evitar la guerra del inframundo sería el desafío más grande de su vida. Pero, ¿cómo podría enfrentarse a una fuerza tan poderosa?