Capítulo 18

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POV FREEN

Esta semana me iré a Nueva York con Becky y estoy muy nerviosa. Desde la noche en su casa no hemos vuelto a compartir ningún momento a solas, siempre intento evitarlo, pero el jueves en cuanto subamos al avión no voy a tener mucha forma de escapar.

En realidad me siento culpable. Llevo meses pensando que estoy en el momento ideal para tener una relación seria, conocer a alguien de verdad con quien conectar, con quien compartirlo todo... y termino atontada con mi ayudante ultra sexy y ultra rompecorazones. No es lo que quiero. Quizás hace un año estaría encantada de cruzarme con Becky y seguro que pasaríamos momentos... pues muy buenos. Pero ahora no quiero eso. Quiero algo como lo que tengo con Charlotte pero de verdad.

¿Por qué es tan difícil? El problema es que siempre que intento un acercamiento con ella, que le propongo que nos conozcamos o nos veamos en persona, me da largas, me pone excusas... empiezo a pensar que no le gusto, que solo está pasando el rato (y yo perdiendo el tiempo) o incluso que a lo mejor ni siquiera existe. Y aún así sigo escribiéndome con ella todos los días y haciéndome ilusiones. Quiero conocerla.

Incluso me daría igual que en persona fuera diferente o no tan guapa como en las fotos, su personalidad le hace ganar muchísimos puntos, es justo lo que busco.

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El jueves ya estamos listas para subir al avión. Becky acaba de llegar con dos maletas.

FREEN: Becky, nos vamos 4 días, ¿recuerdas?

Me mira confusa.

BECKY: Sí, ¿por qué?

FREEN: Porque llevas dos maletas.

Las señalo como si fuera obvio.

BECKY: Es que no podía decidirme, además, así tengo más sitio para guardar lo que compremos.

¿Por qué lo ha dicho en plural? Ya está otra vez con esa maldita sonrisa. Tengo que dejar de mirarla de esta forma, tengo que quitarme esta especie de crush estúpido con ella. Becky es mi ayudante, mi amiga y una completa cabeza hueca. A mí me gustan las chicas interesantes como Charlotte, no las cabezas huecas.

FREEN: Vale.

POV BECKY

Cuatro días en Nueva York con Freen, ahora mismo podría recorrer el aeropuerto entero dando saltos y bailando de felicidad. Pero no lo hago porque soy una persona seria, adulta y profesional que también está de viaje de negocios.

Pero lo estoy deseando. Freen está guapísima con su maleta.

Cuando subimos al avión la azafata me agarra del brazo.

AZAFATA: ¿Becky?

Cuando me fijo en ella me doy cuenta de que es Jane.

BECKY: Jane, qué haces aquí.

Nos damos un abrazo y se ríe.

JANE: Trabajar.

BECKY: Ya lo sé, era una pregunta estúpida, quería decir que qué es de tu vida, cuánto tiempo.

Freen nos mira y carraspea.

FREEN: ¿Podemos seguir?

Jane la mira.

JANE: Disculpe señorita, continúen. –Me mira y me susurra- Luego hablamos.

Yo sonrío.

Jane fue mi primera novia en el instituto, cuando teníamos 14 años. Estuvimos juntas un año y fue la mejor primera novia del mundo. Después me hice más mayor y con la adolescencia me volví un poco idiota y la terminé dejando porque quería liarme con casi todas las chicas que conocía y así no tenía sentido tener novia, pero hasta ese momento fue genial. Llevaba años sin verla, no sabía que fuera azafata.

Tinder (FreenBecky) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora