Siguiendo la pista (Bakudeku)

26. Sorpresas y mas sorpresas

Los recién llegados no parecían tan sorprendidos de verlos, como lo estaba Izuku, Denki no sabía quiénes eran, pero los miraba con cierta desconfianza, Izuku estaba ligeramente detrás de Katsuki como buscando protección.

—Parece que no sabias que vendríamos — el primero en hablar fue el rubio de ojos rojos — estoy tan feliz de poderte ver, hermanito — agregó acercándose para abrazar con fuerza a Izuku — no te preocupes papá y mamá vienen en son de paz — murmuro aun en su abrazo

—Yo... te he extrañado mucho Mirio — Izuku logro salir de su estupor y correspondió el abrazo comenzó a sollozar — Mirio ¿Cómo es que estas aquí? ¿Por qué?

Katsuki y Denki veían el intercambio de cerca, aunque de reojo vea a los padres de Izuku, había escuchado lo que había murmurado Mirio por lo que sabia a que se refería, se acercó a los padres de Izuku.

—Señor Yagi, señora Inko es un placer que hayan podido venir

—Entonces ¿es cierto? — preguntó Inko viendo a Katsuki ignorando por completo su saludo

—Si, es cierto, me casaré con Izuku dentro de poco y sé que a mi prometido le gustaría que estuvieran con él, si vinieron aquí quiero pensar que aceptaron que su hijo tiene jurisdicción para tomar sus propias decisiones y decidir con quién quiere pasar su vida —comentó Katsuki sin apartar la vista de la pareja.

Inko y Toshinori intercambiaron miradas, como si quisieran hablar con la mirada, Finalmente, Yagi fue el primero en hablar.

—Bakugo, luego de haberlos corrido en el hospital me di cuenta de que estaba perdiendo a mi hijo por culpa de mi egoísmo, después de como lo defendiste de mi ese día sin importar quién era y donde estabas.

Izuku y Mirio estaban escuchando la conversación se separó de la abrazo y seco las traicioneras lagrimas que salieron sin que él quisiera, su hermano paso su brazo por su hombro.

—Después de como ver como lo defendiste y estabas dispuesto a protegerlo fue cuando me di cuenta de lo exagerado que he sido con él — Yagi se giró para ver a sus hijos — Izuku, cometí un grave error al no permitir que siguieras tus sueños, eres una persona muy inteligente y pensamos que estudiar cardiología y heredar el hospital sería un futuro asegurado para ti.

Izuku vivió sobrellevando las expectativas de sus padres, por eso a pesar de haber elegido ser forense decidió estudiar cardiología para complacer a sus padres, pero aun así ellos no paraban de presionar. Se quedó en silencio un momento, estaba acomodando sus ideas, sintió un suave apretón en su hombro, elevó su mirada para ver a Mirio quien sonreía buscando darle valor.

—Papá... Mamá —comenzó Izuku tomo un respiro para calmarse — siempre he querido que ambos estén orgullosos de mí, pero he sido feliz estudiando y trabajando por lo que yo decidí, amo lo que hago, y amo trabajar con Kacchan en el departamento de investigación, es lo que me apasiona y es algo que no quiero soltar, además — avanzó varios pasos para tomar la mano de Katsuki — Kacchan es la persona que amo y quiero estar con él.

Katsuki le dio un suave apretón en su mano para darle a entender que lo apoyaría con lo que el dijera, sus padres observaron ese intercambio, no podían negar la conexión que ambos tenían.

Inko fue la primera en hablar dando un paso hacia su hijo — Mi hijo, siempre quisimos lo mejor para ti, pero creo que olvidé escucharte, perdónanos por haberte presionado tanto — comentó con su voz afectada estaba a punto de llorar — si este es el camino que elegiste y es Katsuki quien te hace feliz, entonces, lo aceptamos, te doy mi bendición mi niño.

Toshinori asintió estaba totalmente de acuerdo con su esposa, se acercó a su futuro yerno y a su hijo — Siempre fui muy duro contigo, porque queria que tuvieras una vida asegurada y estable, pero olvide por completo tu felicidad y tus deseos, lo único que deseo es verte feliz, hijo mío.