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No podía ser cierto, quizás había demasiadas similitudes pero no podía ser verdad.

¿Cuáles motivos tendría Bill para hacer algo así?

El menor ni siquiera mostraba ser de ese tipo de personas, el era tranquilo, amable y respetuoso.

Sin embargo...

Tom pagó por ver el vídeo y se suscribió a la cuenta.

Podía ver qué ya casi tenía cien personas, por lo que casi cien personas habían pagado por dicho vídeo.

Sin más presiono el video.

El joven saludaba silenciosamente a la cámara, tenía unos boxers de encaje negros y una máscara blanca en su rostro.

No se podían apreciar sus facciones más que sus labios y un poco su nariz.

El joven camino moviendo sus caderas hacia la cama, dónde con coqueteo se subió dando un mejor ángulo de su cuerpo.

Notó que a un lado de su costilla, tenía algunos tatuajes de los cuales no sabía diferenciar.

Tom no había visto a Bill sin camisa, no había visto su cuerpo sin ropa pero estaba seguro que no era el tipo de chico que tenía tatuajes en..

¡Bingo!

Una cosa para creer que el chico no era él.

Siguió viendo el vídeo, el chico jugaba con su cuerpo, exhibiendolo como el mejor tesoro y no iba a mentir, el chico tenia curvas y una linda piel blanca.

Cómo la de Bill...

Tom nunca había entrado a la habitación de Bill, por lo tanto no la conocía, así que lo del peluche simplemente había sido una mera casualidad.

Eso quería creer...

Sus ojos se abrieron de par en par cuando vio al chico chupar sus dedos para empezar a pellizcar sus peones erectos, su cabeza se echo hacia atrás soltando uno que otro gemido bajo.

El miembro de Tom vibró ante lo que sus ojos estaban viendo.

Y más aún cuando el joven cambio de posición quitándose la ropa interior, se puso en cuatro frente a la camara, su cara apenas era visible, tanto por la máscara como por la posición en la que estaba, sus dedos empezaron a jugar con su entrada al mismo tiempo que su mano se movía de arriba a abajo sobre su miembro.

Los gemidos no se hicieron esperar y las manos de Tom fueron involuntariamente a la erección que tenía, presionandola por encima de la ropa.

El joven volvió a chupar sus dedos con esos labios carnosos y brillosos que tenía, para luego dirigir sus dígitos a su entrada.

Dando la mejor vista, cuando un dedo se introdujo en su entrada visiblemente apretada y su boca se abrió en demasía, soltando gemidos dulces y melodiosos.

Tom saco su erección y empezó a tocarla a la misma velocidad que aquel chico se autopenetraba con su dedo.

La idea de que fuese Bill solo lo prendió aún más, derramandose por completo en su mano, mientras el vídeo no paraba de reproducirse.

El pecho de Tom subía y bajaba con dificultad por la descarga de adrenalina que había tenido.

Limpio el semen de su mano junto a los restos qué corrían por el tronco de su miembro para luego guardarlo en sus pantalones, tomar el teléfono y mirar aquellos comentarios.

"Quisiera follarte"

"Te pagare por más contenido"

"Que rico culito tienes"

"Quisiera partirle esa entrada"

Entonces la idea de que fuese Bill ya no le agradaba.

Sin duda tenía algo que descubrir y por supuesto que lo descubriría, de ser así el menor tendría que explicarle muchas cosas, a no ser que quisiera explicárselas a su madre y Tom estaba seguro que Bill preferiría explicarle a él que a su madre.

Con esa idea, salió de aplicacion y se levantó tomando las llaves de su motocicleta para dirigirse a casa.

Ahí lo esperaría.

[...]

Dereck era molesto, si lo era, pero Bill lo soportaba, porque era su amigo desde hace años, aún que le cargara unas ganas al menor.

Bill no le daba importancia, porque cualquier persona podría proponer hacerle lo que quisiera pero era él realmente quien disponía si hacerlo o no.

Y por supuesto que con Dereck era un rotundo No.

No quería mandar todo a la mierda por la calentura de su amigo.

Por eso se bajó del auto ignorando por completo las peticiones de Dereck de que le diera un beso en la boca, estaba loco...

Sin embargo Bill ya era experto en rechazarlo e ignorarlo.

Sin voltear hacia atrás se dirigió a su casa, dándose cuenta que la motocicleta de Tom estaba estacionada afuera.

Era extraño, sin embargo no le daba importancia.

Entro, sintiendo de repente nervios, Tom y él no quedaban solos en casa por más de algunos minutos, que él estuviera ahí lo ponia nervioso.

Y es que para él, Tom era bastante atractivo, cuando lo vio por primera vez había quedado cautivado por esos ojos y su perfil, era bastante salvaje, atractivo, como la imagen de un fuckboy.

¿Dónde su madre había conseguido un hombre así? Él necesitaba uno igual.

Sin embargo se reservo sus emociones por el mayor, porque era el novio de su madre, la única verdad en todo esto era que Bill se sentía atraído por él, pero lo reprimía, por supuesto que lo hacía.

Estaba a punto de subir las escaleras cuando vio al mayor quedarse quieto cuando se encontraron cara a cara a unos cuantos escalones.

Tom se veía serio, su ceño estaba fruncido y sus manos se apretaron en puños.

¿Que sucedía?

-¿Tom? ¿Estás bien?

El mayor suspiro al escuchar aquella dulce voz...

-Si... ¿Tienes hambre? ¿Comiste?

Bill asintió atónito.

-Ve a darte un baño te haré algo de comer.

-S-si gracias...

Rápidamente cada uno fue a su destino pasando por el lado del otro en la escalera.

El corazón de Bill latía rápido mientras Tom se sentía perdido por todo.

El menor entro en su habitación recostandose de la puerta para aliviar su respiración hasta que noto la cámara en la cama.

¿Que no la había dejado en la peinadora?

Se encogió de hombros y la puso en la peinadora para ir al baño en su habitación y darse un baño.

No iba a perder la oportunidad de comer una buena comida hecha por Tom.

OnlyFans| ᵗᵒˡˡDonde viven las historias. Descúbrelo ahora