Angel |Elsabela|

23. Encuentros inesperados.

Elsa.

—Mira lo positivo, se verá lindo —mencioné sentada a un lado de Isabela.

—¡No creí que dolería bastante! —dijo en alto sujetando con fuerza su bolso y mi mano.

—Es obvio que iba a dolerte, es tu primer tatuaje —escuché a Shank burlarse de Isabela.

—Aquí nadie fue obligado —mencioné.

—Cállate —dijo apretando los dientes.

—Ya casi acabamos, no te desesperes —anunció Shank tomando un poco más de tinta.

Isabela echó su cabeza atrás bufando con fuerza. Llevábamos casi tres horas en su tatuaje, Shank por fortuna pudo conseguirnos un espacio regresando de viaje por lo que ella tendría su tatuaje más rápido de lo pensado.

Regresamos del viaje hace un par de días, además del revuelo de Anna con la foto que Isabela subió que era de esperarse, el resto transcurrió tranquilo.

—Debo admitir, que me llevó de sorpresa no verte con Tadashi. Cómo ninguno anunció que se separaron yo suponía que aún seguían juntos —Shank miró de momento a Isabela—. No lo tomes a mal, me encanta verlas a ustedes, solo me sorprendí.

—Está bien, Shank. Era de esperarse cuando yo casi no contesto en redes y él se la vive en el laboratorio.

—Hay que aceptar que lo tuyo con Tadashi ya no tenía arreglo desde hace meses. Me alegra que después de eso te hayas dado la oportunidad de conocer a alguien más —Shank siguió trabajando en el muslo de Isabela— y me encanta la forma de cómo iniciaron esto.

—Habría sido una historia más interesante si cierta persona no hubiera descubierto mi "identidad secreta" —arrugué mi nariz observando a Isabela que se reía cubriéndose la boca.

—Aceptemos que ese juego iba a durar muy poco —Isabela comentó.

—Sí, pero quería divertirme más tiempo —apreté mis labios desviando mi vista.

Logré ver la mirada de Shank llega de admiración y diversión, ella es parte de mi círculo pequeño de amigos y aunque nunca pensé que ella se opusiera a mi relación o que hablara mal, me tranquiliza que su reacción sea positiva.

—Acabamos —Shank se retiró estirando su cuerpo—. Puedes verlo.

—Al fin —Isabela bajó de la camilla y caminó al espejo de cuerpo completo del estudio.

—Una de mis mejores obras —Shank se quitó los guantes y miré desde lejos a Isabela—. Tu novia es excelente dibujante, mejor que tú si soy sincera, debería pensar en ser una diseñadora en el local —siguió Shank y se detuvo levantándose y caminar hacia mí—. Sin duda eres una enamorada empedernida.

—Silencio —la miré amenazante.

—Iré al maldito inodoro, tienes unos minutos para tener tu momento meloso con tu novia —movió sus cejas alejándose.

Rodeé mis ojos y caminé hacia Isabela.

—Quisiera preguntarte si era lo que esperabas, pero si tu respuesta es no temo decirte que no hay vuelta atrás —me detuve atrás de ella.

—Lo sé —sonrió aún mirando el tatuaje—. No me arrepiento, de hecho, es justo como lo imaginaba.

—¿Entonces por qué te ves como si no lo fuera?

—No es eso... ¿Sabes lo que ha tenido que pasar para que yo llegara a esto? —incliné mi cabeza confundida—. ¿Cuándo llegué a pensar que tendría un tatuaje?