TP1 - Capítulo 6: Efímero

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Gojo se despertó temprano, algo inusual para él. El sol apenas despuntaba sobre las colinas, y un resplandor suave iluminaba su habitación en la escuela de hechicería. A pesar de su fama por su arrogancia y su tendencia a hacer las cosas a su propio ritmo, aquella mañana se sintió extrañamente disciplinado. Estiró los brazos sobre su cabeza, sintiendo una ligera molestia en su cuerpo, recordatorio del intenso combate con Goku del día anterior.

"Vaya... ese chico sí que me dejó magullado," pensó con una sonrisa perezosa, disfrutando del suave tirón de los músculos. Aunque había usado la técnica de energía maldita inversa para curarse, su cuerpo aún conservaba una ligera tensión, como si quisiera recordarle la pelea.

Se levantó lentamente de la cama, con los pies descalzos sobre el suelo de madera pulida. La luz se filtraba por la ventana, proyectando sombras largas y suaves en su habitación. Gojo se tomó un momento para respirar profundamente, cerrando los ojos, antes de caminar hacia la cocina de la escuela. En su camino, sus pensamientos volvían una y otra vez a Goku y al sorprendente poder que había demostrado.

"Qué chico más raro... resistir todo eso," pensó, mientras servía una taza de té verde caliente y se acomodaba para su desayuno. No era mucho, solo un plato de arroz con algunas verduras encurtidas y un huevo hervido, pero le bastaba para comenzar el día.

El suave aroma del té llenaba el aire, mientras Gojo saboreaba cada sorbo lentamente. El momento de tranquilidad le permitió reflexionar. A pesar de su actitud relajada, el peso de la conversación con Nao de la noche anterior aún rondaba en su mente. La conversación sobre Geto... sobre Goku y el futuro de ambos. Se preguntaba si estaba tomando la decisión correcta al llevarse a Goku a la escuela de hechicería. Sin embargo, sabía que el joven tenía potencial, y el hecho de que los altos mandos comenzaran a interesarse en él significaba que era solo cuestión de tiempo antes de que las cosas se complicaran.

Después de terminar su desayuno, decidió salir a dar una caminata. El aire fresco de la mañana lo ayudaba a despejar la mente. Caminó por los terrenos de la escuela, pasando por los jardines, donde las primeras flores de la temporada comenzaban a brotar. Las hojas de los árboles brillaban bajo la luz del sol, y el ambiente estaba cargado de una serenidad que rara vez podía disfrutar en su ajetreada vida como el mas fuerte.

Mientras caminaba, su mente vagaba hacia el pasado, recordando sus días más jóvenes junto a Suguru y Shoko. Caminando por senderos similares, riendo y hablando sobre lo que pensaban que sería el futuro. Aquella sensación de melancolía siempre lo golpeaba en estos momentos tranquilos, pero como siempre, lo escondió detrás de su sonrisa habitual.

"Supongo que esos días ya no volverán... pero hay que seguir adelante," pensó, antes de detenerse en un claro del bosque que rodeaba la escuela. Alzó una mano frente a él y, con un chasquido de sus dedos, una distorsión en el espacio comenzó a formarse. Gojo no era del tipo que hacía las cosas al azar. Tenía un propósito, y esa mañana, sabía exactamente dónde necesitaba estar.

Con su técnica, se teletransportó desde los terrenos de la escuela hacia el Clan Zenin. El entorno cambió en un parpadeo, y Gojo apareció a las afueras de los terrenos del clan. La diferencia en la atmósfera era inmediata. El aire aquí era más tenso, y las miradas curiosas de los miembros del clan Zenin comenzaban a girar hacia él, como si su mera presencia fuera una señal de que algo importante estaba a punto de ocurrir.

Se ajustó la venda y caminó con paso tranquilo hacia la casa donde Goku estaba descansando. Ya no quedaba más tiempo para perderse en pensamientos. Era el momento de comenzar el siguiente capítulo.

Gojo llegó a la casa de Nao y, con su típico aire despreocupado, tocó la puerta suavemente. Al abrirla, Nao lo saludó con una sonrisa amable, como siempre.

Enlace maldito (Goku en Jujutsu Kaisen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora