CAPITULO 7.

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Con la gran erección, tendría que pararme a ponerle pestillo a la puerta para regresar a mi silla y arreglar el vergonzoso problema entre mis piernas, en eso estaba cuando la puerta se abrió dejando entrar a un tranquilo Daniel. Mordí mi labio y cubrí mi pelvis con ambas manos dándome la vuelta para regresar a mi sitio.

- Buenas tardes hyung - me abrazó por la espalda suspirando en mi cuello.

Demonios Niel, no sabes lo que provocas en mi.

Me separé de él y le saludé con una sonrisa cuadrada por los nervios.

- Hoy tampoco hay trabajo Daniel, puedes - dudé. - puedes retirarte.

- ¿Qué sucede contigo Byung Hun? - preguntó con enfado, no le vería el rostro, sonará enfermo pero había descubierto que verlo enojado comenzaba a exitarme aún más. - ¡Evadiste mi abrazo! ¡No me saludaste como siempre y ahora me corres!

Tallé mi sien un poco frustrado, Niel había comenzado a gritar y mi erección comenzaba a doler demasiado.

- Mierda Ahn Daniel, pasa que tengo una erección dolorosa producto de un sueño húmedo en cual estabas tú, justo ahora iba a hacerme una paja pero llegaste tú... Y es vergonzoso - terminé por decir en tono muy bajo.

Daniel expresó un "Oh" seguido de un "Lo siento, te compensaré". Me arrastró hasta el sillón y me empujó haciéndome caer sentado, se hincó entre mis piernas y acarició mis rodillas, subió sus manos por mis muslos haciendo que un suspiro saliera inconscientemente de mis labios. Sus largos dedos se deshicieron de mi cinturón y desabrochó el botón, levanté la pelvis para que el pudiera liberarme de los pantalones y el bóxer. Di un suspiro largo al sentir afuera mi miembro, lo tomó entre su mano y comenzó a subir y a bajar lentamente, reposé mi cabeza en el respaldo del sillón mientras dejaba que Niel hiciera conmigo lo que quisiera.

Solté un gruñido cuando mi chico pasó su caliente lengua por el glande y su mano no paraba de moverse, cerré los ojos extasiado. Daniel sabia lo que hacía, ¡Y vaya que lo hacía bien!

Mis dedos entre sus cabellos, jalando un poco, intentado marcar un nuevo ritmo. La punta de mi miembro tocó la campanilla de su boca y vibró, haciendo que un espasmo de placer llegara a mi cuerpo. Repitió la acción varias veces hasta que tuvo una arcada, infló las mejillas para que mi miembro entre su boca se acomodara.

- Daniel, eres estupendo - le dije con dificultad pues la respiración se me cortaba.

Abrí los ojos para ver que Niel, tenía los pantalones abajo y se masturbaba mientras lamía mi miembro. Fue una imagen exquisita. Le hice levantarse para que se sentará sobre mis muslos, tomé su miembro junto con el mio y comencé a bombearlos.

- Ah, Hunnie, sigue - me pedía entre gemidos.

Incremente los movimientos de mi mano, mientras comenzaba a sentir los números espasmos de placer en mi cuerpo. Dos sacudidas más, y nuestras esencias se habían combinado, Nielu bajo de mis muslos y limpió con su lengua el líquido que corría de mi miembro. Lo tomé de los hombros y lo tiré al sillón, me posicioné entre sus piernas y devoré sus labios. Bajé mi rostro hasta su pecho y me acosté sobre él.

- En serio Nielu, eres el mejor - le dije comenzando a dormirme.

- ¿Qué harías sin mi Lee Byung Hun? - acarició mi cabello.

- Moriría...

•••

Me levanté muy rápido para taparme con uno de los cojines del sillón, con mis pantalones cubrí la parte baja de Daniel, quien comenzaba a despertar muy aturdido por la manera en la que me levanté.

No More Perfume On You. NIELJOE/L.NIELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora