Niel se asomó debajo de las sabanas y sonrío sensualmente.
— ¿Qué más? Sólo estoy dándote los buenos días.
Volvió a meterse debajo de las sabanas y sentí como sostenía mi miembro entre sus manos. Levanté la sabana y la hice a un lado justo cuando Niel pasaba su lengua por toda la extensión de mi pene.
— Mierda Daniel, que buena forma de despertarme — Tomé sus cabellos y le ayude a que su boca tocara la base de mi miembro.
Recorrió con sus delgadas manos mis muslos mientras yo marcaba el ritmo que deseaba; sacó mi miembro de su boca y se rió un poco, contagiado con su hermosa sonrisa golpeé su mejilla con mi erecto pene.
— ¡Byung Hun! — gritó y se levantó de la cama apartándose de mi.
Riéndo me levanté junto con él, sólo para regresarlo a la cama y acostarme sobre su cuerpo. Piqué sus costillas haciendo que se carcajeara intentando huir de mis brazos para poder respirar pero en una distracción suya le besé, mi lengua exploró su boca y robé su aliento. Nos separamos, miré los ojos de Niel, eran muy hermosos, completamente él, era hermoso. Empujé sus rodillas hacia arriba, coloqué mi dedo índice en sus labios y él lo ensalivó. Bajé la mano para prepararlo sin apartar la mirada de su rostro. Separé sus nalgas y me enterré en él. Enredo sus piernas en mi cintura y comenzamos un vaivén lento; disfrutamos del choque de nuestra piel, besé su abdomen perlado y sus manos recorrieron mis brazos, mordió mi hombro cuando apreté su trasero dando una fuerte estocada. Unas penetraciones más fuertes en su punto débil y manchó nuestros abdómenes sin siquiera tocar su miembro, yo le seguí después.
Me acosté a su lado y lo abracé pegándolo a mi pecho, besé su frente y cerré mis ojos.
— Esto ha sido lo mejor, dentro de toda esta tempestad — dijo Daniel y se acomodó mejor entre mis brazos.
— De ahora en adelante, todo irá mejor.
...
Las juntas, los trámites y las contrataciones habían aumentado desde la separación de Lee-Anh; el día de la junta donde se trató el tema con los representantes de Anh, el padre de In Na enfureció y amenazó con hundir mi empresa pero Jonghyun, que se presentaba como mi abogado mostró que si Anh hacia un movimiento su empresa se vería totalmente afectada y se presentaría una pérdida de egresos e ingresos en su corporación. Hasta el momento todo estaba saliendo de maravilla, ya podía tocar el cielo con la punta de mis dedos.
El teléfono de la oficina sonó, levanté el teléfono y la voz de la secretaria se oyó, "la señorita Anh ha llegado"
La puerta se abrió e In Na entró con aquella sonrisa cínica que antes no había notado en ella.
— Cariño, yo también tengo algo que hablar contigo — se sentó frente a mi escritorio y cruzó sus piernas. — Es sobre Daniel, he pensado mucho sobre él. Y en serio, debes mantenerlo lejos de ti. Deberías despedirlo, no tiene la capacidad para trabajar en nuestra empresa.
— ¿Qué le guste un hombre quiere decir que no esté capacitado? — le miré con el ceño fruncido. — In Na, no te metas en estos asuntos. Anh Daniel, es totalmente capaz de desempeñar su área como es debido, gustándole los hombres o no. ¡Por Dios! Es tu hermano, ¿Podrías dejar de juzgarlo?
— ¡No lo entiendo! — gritó levantándose de la silla y pataleó un poco.
— ¿Qué no entiendes In Na? — pregunté con tranquilidad retirándome las gafas de lectura.
— ¿Por qué lo defiendes tanto? ¡Es asqueroso! ¡No es normal! Las personas como él no deberían existir.
— ¡Basta, In Na! Me tiene harto tu actitud de mierda. Son personas como tú las que no deberían existir — levanté la voz haciendo que ella temblara y comenzara a llorar.
— ¿Por qué? ¿Por qué estamos discutiendo a causa de Daniel? ¿En qué momento nuestra perfecta relación se vino a bajo?
Me acerqué a ella, empujé su cuerpo contra la pared y ella casi chilló del miedo, pero no contó con que la besaría. Cerré los ojos e intenté imaginar que era Daniel; nos separamos, respire sobre su mejilla y bajé para besar su cuello.
— ¿Quieres saber por qué le defiendo tanto? — susurré sobre su oreja haciendo que su piel se erizara. — No puedo creer que no me hayas reconocido ese día en el departamento de Daniel, cuando descubriste que él era gay.
— ¿Qué intentas decir? — preguntó cuando me separé de ella y regresé al escritorio donde mi celular sonaba. Su ceño se frunció y me miró aterrorizada. — Tú...
— Oh, hola Daniel — contesté la llamada sin quitar la mirada de In Na. — Esta bien, espérame en casa. Sí cariño, también te quiero.
Oí un débil "no" de los labios de In Na, comenzó a llorar más fuerte y comenzó a tirarme lo que estuviera a su alcance. Gritaba cosas como: eres repugnante, tú y Daniel se arrepentirán de esto. Tomó su bolso y abrió la puerta.
— In Na — le llamé antes de que saliera. — Lo que quería decirte es que, terminamos, no vuelvas a aparecerte por aquí.
Me miró con el rostro completamente rojo y salió de la oficina sonando sus tacones por los pasillos. Suspiré más tranquilo. Era un paso grande, ahora no habría nadie quien me separará de Daniel.
*** Hola ❤️casi se acerca el desenlace. 👏🏽👏🏽hace poco leí un artículo donde en Corea le preguntaban a la comunidad gay, que idols podrían ser homosexuales, y adivinen quien salió en la lista: xDxDxDxD
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