||En dónde la jóven Leona se convirtió en la pieza más importante del juego de tronos.
Está historia transcurre años antes de la rebelión de Robert y juego de tronos
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El viento soplaba fresco en el aire, llevando consigo los ecos de la celebración que había envuelto a Desembarco del Rey. Sin embargo, para Tyla, el mundo exterior era solo un fondo distante, un recordatorio de lo que había perdido y de la prisión en la que se hallaba. La inminente sombra del Rey Aerys se cernía sobre ella, y cada mirada de los súbditos la llenaba de un miedo helado.
A medida que el Rey Aerys y Tyla se presentaban ante la multitud, el pueblo alzó sus voces en una mezcla de asombro y temor.
—¡Gente de Westeros! — exclamó el Rey —Hoy, ante los Siete, he tomado como segunda esposa a la hermosa Tyla Lannister. No solo es la hija de Tywin Lannister, sino que ahora, bajo este manto, es parte de la casa Targaryen. ¡Celebremos esta unión!
Los aplausos se mezclaron con murmullos de preocupación entre los nobles y plebeyos. Tyla, aun con la sonrisa forzada en su rostro, sentía el peso de cada mirada. En su interior, una tormenta de desesperación y rabia luchaba por salir.
—No soy más que un peón en tu locura, Aerys.—susurró tyla
El Rey, sintiendo su desdén, se inclinó hacia ella, su aliento cálido como el fuego.
—No te preocupes, querida. Pronto verás que esta es una nueva era.— El Rey la obligó a tomar su mano— Serás adorada, como la reina que eres. Y aquellos que se opongan a nosotros...—sus ojos mostraron crueldad—serán cenizas.
Mientras el pueblo vitoreaba, Tyla se esforzó por mantener la compostura. En su mente, el deseo escapar.Sabía que su padre, Tywin, no se quedaría de brazos cruzados, y que el conflicto estaba inevitablemente a la vuelta de la esquina.
Mientras tanto, en el torreón, Rhaella Targaryen, la primera esposa del rey, miraba por la ventana, sintiendo la sangre helarse en sus venas y sabía que el ciclo de locura de Aerys estaba a punto de repetirse.
—Pobre niña... —exclamó Rhaella con su pequeño hijo en brazos—¿qué destino le espera en manos de este monstruo?
Al mismo tiempo, en el salón del trono, el Rey Aerys planeaba su próximo movimiento. Su mente estaba llena de oscuras intenciones, y Tyla se convertía en el centro de su estrategia.
—Debo asegurar mi trono. — exclamó el rey—No solo necesito a la Lannister a mi lado, sino a su familia en mis manos. Con ellos, podré aplastar cualquier rebelión antes de que comience.
Mientras tanto, Tyla se retiró a sus aposentos, sintiendo que el peso de la corona era más pesado de lo que jamás había imaginado. Pero había una chispa de determinación en su interior. Sabía que, aunque estaba atrapada, debía encontrar una forma de utilizar su posición para proteger a su familia y, quizás, incluso a sí misma.
En ese instante, un golpe a la puerta interrumpió sus pensamientos. Era una de las damas de compañía, que traía un mensaje.
—Mi lady, el rey ha convocado a los nobles para una reunión en el salón del trono. Dice que es de vital importancia.
Tyla sintió un escalofrío recorrer su espalda. Sabía que esa reunión podría ser el comienzo de algo terrible. Pero también podía ser su oportunidad.
Con la determinación de una leona, se vistió con su mejor atuendo y se preparó para enfrentar al Rey Aerys y a los nobles. Era el momento de demostrar que, aunque estaba atrapada, no carecía de valor ni de inteligencia. Su historia apenas comenzaba a escribirse, y estaba decidida a tomar las riendas de su destino.
Mientras se dirigía hacia el salón del trono, el eco de sus pasos resonaba en los pasillos, como un preludio a la tormenta que se avecinaba. El juego de poder estaba en marcha, y Tyla Lannister estaba lista para jugar.
Mientras tanto en Roca Dragón el principe dragón se encontraba devastado,no pudo anticipar lo que su padre había planeado,su furia ante su padre creció, sabía en tormento por el cual sometió a su madre, no podía ni imaginar a tyla ante esa situación. Su esposa Elia, lo había encontrado es el aposento que compartía con ella con una nota en mano con sus ojos llenos de furia .
— ¿que sucede mi príncipe?— Elia llegó hasta el principe acariciando su suave cabello plateado
—mi padre a tomado como segunda esposa a Tyla Lannister — el dolor del príncipe se hacía notar en su voz, y Elia sintió pena por el y por tyla.
Así como para el principe Rhaegar fue difícil de aceptar,lo fue para los siente reinos, aquel acto había sido visto como acto de guerra, y se esperaba que Tywin lannister tomara represalias contra la corona.
En desembarco había caído la noche , y Tyla se encontraba ya en el palco real, se encontraba en camisón, nerviosa por lo que sucedería, sabía que debía consultar su matrimonio,estaba asustada. Por lo tanto el rey entraba al palco real, el rey ya se encontraba con ropa de cama listo para consumar su matrimonio.
Su joven esposa le recordaba tanto a Joanna que era irreal, el rey ante su demencia creía que estaba frente a ella , que su amada no murió al dar a luz , que su amada correspondio sus sentimientos y se casó con el. La mirada del rey se volvió más pesada y eso alarmó a tyla.
—levantate—ordeno el rey, y con las piernas temblando, tyla obedecio. El Rey amaba el control sobre los demás y estaba amando la reacción de su ahora esposa.
Al encontrarse frente a el el rey la observo detenidamente, observando ese fino rostro tan característico de Joanna y ese cuerpo que no recordaba que su amada tenía, tyla tenía miedo pero no oe demostraria al rey esto.
Aquella noche el acto fue consumado , mostrando el verdadero rostro del rey, repitiendo este mismo , el nombre de Joanna. Tyla sabía el poder que había tenido su madre sobre el rey, y ella se aprovecharia de esto
