MI ADORABLE ASISTENTE YESUNG - KYUSUNG/YEHYUN-

Ep 7. Al cementerio.

Kyuhyun no supo por qué aún tenía ese pequeño calendario en su habitación cuando ya habían pasado dos años desde la fecha que este tenía impresa, sin embargo a diferencia de las veces anteriores, esta vez suspiró mirando la fecha marcada con detenimiento... esa fecha se cumplía ese día según podía recordar de la fecha del día anterior a la que generalmente no le ponía mucha atención. Entrecerró sus ojos, no se sabía a ciencia cierta si su expresión denotaba tristeza o alguna extraña molestia pero definitivamente no estaba feliz ni tranquilo.

Desde ese día... había seguido su vida de una forma algo fría, y solo eran pocas las veces en que deseaba visitar ese lugar... aunque el deseo había quedado solo en eso porque jamás lo había llevado a cabo y la tumba... la tumba que pertenecía a su hermano mayor... Ryeowook, no había recibido más que una o dos visitas de su parte...

Pensando en ello tal vez, su noche no fue nada placentera, y el recordar aquello lo hacía aún peor, por lo que se puso de pie y decidió continuar con un día rutinario a la mañana siguiente; la diferencia era que el día era Sábado y tal vez podría descansar de todo ese ajetreo, así que se dirigió al baño y tomó una ducha, luego se vistió con una camisa de mangas cortas casual de botones, mientras portaba pantalones de igual manera color azul. Estaba arreglando un poco su camisa cuando escuchó como alguien llamaba a la puerta, razón por la que se acercó a ella para abrirla no muy feliz.

- Buenos días~ - Kyuhyun se sorprendió al encontrarse con aquel sujeto en su puerta.

- ¿A qué se debe su visita? - preguntó cortante el menor dándose vuelta, dejando la puerta abierta con indiferencia y entrando nuevamente a su apartamento.

- Ahh... ese era el recibimiento que esperaba - exclamó el hombre de avanzada edad sonriendo y entrando mientras miraba alrededor - definitivamente un lugar muy solitario para un joven como tú, hacía mucho tiempo que no entraba aquí y eres un desconsiderado por ello- agrego reclamándole a Kyuhyun.

- ¿entonces ha venido a explorar el lugar y reclamarme?- preguntó el menor con tono sarcástico, mientras el anciano suspiraba resignado.

- Un cálido recibimiento de tu parte como siempre, no sé cómo pude pensar en que serías frío y desagradable - fue la respuesta con una sonrisa como si no le importaran las palabras del menor, mientras tomaba asiento en uno de los cómodos sofás negros del lugar - ¿no has recibido algún llamado de tu familia?- añadió curioso por la respuesta de Kyuhyun.

- Estoy muy ocupado y tal parece que ellos también - respondió Kyuhyun en el mismo tono que el anciano usaba, mientras tomaba de la cocina una taza de café y la bebía tranquilamente.

- ¿Muy ocupado?, utilizas el trabajo como el centro de tu vida, a tu edad ya deberías estar casado o no sé tener una pareja por lo menos, en realidad tu inclinación sexual me da lo mismo y tú sabes que no soy exigente; solo quiero que tengas alguien a tu lado o tu familia empezará a molestarte otra vez - añadió el anciano cerrando sus ojos e inclinándose en el respaldar del sofá.

Kyuhyun se puso de pie, para acercarse a la barra de licores donde puso la taza de café vacía y tomó una copa, donde depositó un poco de licor en él y bebió despacio, pues ya no tenía muchas ganas de un desayuno normal.

-beber tan temprano le hará mal a tu salud... muy mal... tan joven y ya con esos vicios, deberías cuidarte más- añadió el anciano en reproche.

Una sonrisa irónica se dibujo en el rostro de Kyuhyun - ¿vino a preocuparse de mi salud también?, que considerado... y dígame... ¿desean un matrimonio arreglado?, digo mis padres ya están buscándome una linda novia ¿no?, ¿acaso no les bastó lo que sucedió con Zhoumi?... pensé que con eso ya estarían satisfechos y se rendirían con tratar de controlar mi vida - añadió Kyuhyun en tono de reproche y molestia.

El hombre de cabellos blanquecinos y de ojos pequeños borró de su rostro su sonrisa y le miró con seriedad - no tienes por qué decirlo de esa manera tan descortés, ellos y yo sabemos perfectamente que no resultó como queríamos cuando intentamos que tuvieras una relación con Zhoumi shi, pensando que él podría ser un buen prospecto para ti, pero eso ya está en el pasado Kyuhyun-ah - añadió el anciano intentando razonar con el menor.

- Sí, sí bien, lo que usted diga - dijo Kyuhyun mirándole con reproche y tratando de cortar el tema de esa manera.

- No nos hagas responsable solamente a nosotros, después de todo tú... llegaste a doblegarte por él también - añadió el anciano mirando al frente sin ningún lugar en específico más bien solo parecía recordar.

- No diga tonterías - replicó Kyuhyun rápidamente, estaba molesto - ¿qué le hace pensar que sentía algo por él realmente? - desvió su mirada con furia depositando la copa a un lado de la barra.

El anciano le sonrió con calma, sabía que el orgullo del menor frente a él no le dejaría admitir que alguna vez pudo sentir felicidad al lado de esa persona - está bien, no te contradeciré - dijo el anciano cambiando la conversación - solo he venido para ver si deseas acompañarme hoy - añadió relajado, sonriéndole a Kyuhyun.

El menor le miró dubitativo aunque por la fecha presentía a que iba su visita a su casa y esa supuesta invitación.

- Sí... es eso mismo que estás pensando - continuó el anciano al notar la mirada del menor y lo que probablemente estaba pensando - visitaré una tumba - añadió mientras Kyuhyun se tensaba levemente.

- Todos los años viene a hacer la misma pregunta... ¡le he dicho que yo no...!- el anciano no dejó que terminara sus palabras.

- creo que este año puede cambiar la situación - se apresuró a responderle el anciano - además sé que Zhoumi shi ha venido nuevamente y que no has visitado "esa" tumba desde el día de su propio funeral - Kyuhyun lo miró molesto - pienso o no, mejor dicho, te aseguro que se pondría muy feliz si lo visitas, ya te has castigado demasiado a ti mismo si me lo preguntas - añadió el anciano sonriendo.

Kyuhyun por su lado se mostró frió y de igual manera le respondió - los muertos ya no ven, ni sienten nada anciano loco, ¿que en el occidente no les enseñan eso? - luego de decir eso tomó el último sorbo de su copa.

El anciano se echó a reír con un tono estruendoso - jajaja... si es así, entonces no veo lo inusual en que lo visites de vez en cuando, puedes hacerlo por simple costumbre si lo prefieres - agregó el anciano con una sonrisa relajada.

- No haré tal cosa - respondió Kyuhyun rápidamente, dejando la copa en la mesa del bar y caminando hacia la cocina.

- Entonces visítale con entusiasmo y seguro te sentirás mejor contigo mismo, una cosa que necesitas es mejorar ese ánimo depresivo que tienes niño - añadió, respondiendo con diversión.

- ¿Está ebrio nuevamente verdad?, ¿mis padres no han notado que una sociedad con un anciano que ya no está en sus cabales puede provocarnos perdidas comerciales?- agregó Kyuhyun con sarcasmo haciendo reír al anciano - supongo que en tu casa tampoco te soportan y por eso vienes aquí a que yo te de licor ¿no? - terminó diciendo el menor, alzando una ceja.

- ¿Ebrio?, por dios niño... estás cada día más insolente - respondió, mientras se notaba pensativo - pero si piensas eso puedo ir a celebrar después contigo ¿Qué opinas?- añadió sonriéndole divertido.

Kyuhyun lo analizó por un segundo, entonces suspiró cansado y resignado, ese anciano no parecía cambiar pero debía admitir que esta vez necesitaba salir, después de todo... pudo percatarse de la fecha al mirar el calendario mucho antes de que el anciano llegara esa mañana y algo dentro de su corazón le decía que debía ir a visitarlo así que camino hacia la entrada de la casa, tomó su abrigo y las llaves de su auto.

- ¿eh?- dijo el anciano al verlo hacer aquello y caminar hacia la salida.

- No se quede ahí, si no se apresura cambiaré de parecer- dijo Kyuhyun, mirándolo con fastidio.

- Claro - respondió el anciano, sonriendo con diversión - pero déjame llevarte, abajo esta la limusina- añadió feliz por la decisión del joven.

Kyuhyun se mostró algo más fastidiado por eso, pero el anciano abrió la puerta y lo empujó fuera para así evitar que se retractara de su decisión.

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Yesung se levantó temprano ese día, por supuesto tenía planeado hacer varias cosas ese sábado, así que desayuno temprano y luego de unos cuantos minutos se colocó las zapatillas de color blanco mientras en el espejo en la entrada de la casa se miraba un poco para colocarse bien el abrigo y no con el cuello hacia adentro como le pasaba por despiste a veces; entonces miró su atuendo completo... con esos jeans negros ajustados, su camisa de color blanco y el abrigo oscuro que había colocado sobre sí; al notar que no se veía nada mal revolvió un poco más su cabello, pues le había agradado ese nuevo estilo que Heechul había creado para él y ahora lo usaba la mayor parte del tiempo.

- ¡Me voy! - exclamó animado antes de abrir la puerta para salir, no quería desperdiciar ese día y menos ese ánimo que tenía.

- Si - exclamó Heechul que se acercó hasta darle una lista - debes traer esto, sé que es temprano, pero no hay suficientes víveres además tú sabes que muero sin mis frutas y Hae se morirá si no tiene sus dulces - añadió el mayor, haciendo sonreír a Yesung.

- No te preocupes hyung traeré todo - respondió, tomando el trozo de papel para luego salir por la puerta del departamento sonriendo.

Heechul suspiró y miró hacia atrás por la altura del hombro - en esta ocasión era tú turno acompañarlo eres un tramposo pequeño pez - dijo severamente, mirando al pequeño Hae que bostezaba aún con su pijama con dibujos de peces, mientras pasaba sus manos por sus ojitos entreabiertos.

- Lo siento hyung pero no pude dormir bien - exclamó el pequeño sonriendo adorablemente, mientras trataba de no prestarle atención a su hermano mayor y miraba a Yesung - prometo ir contigo mañana hyung - agrego haciéndose el inocente, logrando que Yesung sonriera.

- Está bien Hae, de todas maneras debes entregar lo que hiciste ayer y terminar tu tarea para el lunes - dijo Yesung, sonriéndole con dulzura haciendo sonrojar al pequeño.

-te amo Yesung hyung- respondió Hae saltando feliz de que Yesung no lo obligara a levantarse aún, Heechul suspiró resignado apoyando una mano sobre la cabeza de su hermano antes de darle un pequeño golpe en la cabeza.

-Eres un pequeño aprovechado, se supone que yo soy tu hermano y quien te dice que hacer... ¿pro que rayos le preguntas a él?... me las pagaras... has estado muy distraído pececito, solo te perdono esto porque tienes que terminar tus tareas, o si no la próxima vez irás tu solo, Yesung no te salvará de tus quehaceres por siempre - añadió Heechul, mientras Donghae hacia un pucherito infantil, mirándolo hacia arriba.

- por eso amo a Yesung hyung, más que a ti hyung... Yesung hyung cuando sea grande quiero ser tu novio - dijo Hae sonriendo inocentemente con las mejilla levemente teñidas, provocando que Yesung y Heechul lo miraran curiosos, antes de verlo salir corriendo de regreso a su habitación.

-pero mira nada más este pequeño pez...- empezó a decir Heechul - si no fueras tan adorable te golpearía!!- le gritó haciendo reír a Yesung.

- Volveré pronto hyung y no te estreses solo está jugando porque lo consiento - dijo Yesung despidiéndose.

- Está bien - respondió Heechul despidiéndolo desde la puerta mientras lo veía caminar hacia el elevador.

- Ten cuidado hyung!!! - dijo Donghae apareciendo por la puerta detrás de Heechul, haciendo girar a Yesung que se despidió con la mano de ambos.

-sí serás regresa dentro que tienes que bañarte- dijo Heechul, mientras Donghae corría hacia dentro riendo divertido y el mayor cerraba la puerta del departamento.

Yesung sonreía mirándolos hasta el momento que se cerró la puerta del elevador y una vez abajo se dispuso a seguir su camino, saliendo de la zona de apartamentos. Por supuesto el viaje hacia el supermercado era algo lejos así que decidió caminar un poco hasta tomar el autobús y llegar a su destino. Mientras caminaba, revisaba la lista, la cual era bastante grande.

- Ahora sé por qué Hae se niega a hacer las compras conmigo... - susurró para sí mismo al revisar la cantidad de cosas que había anotado Heechul en aquel papel.

Estaba tan sumido en sus pensamientos al pensar en todo lo que debía comprar que al no mirar al frente inevitablemente choco contra alguien haciéndose retroceder a sí mismo un poco; casi cayendo de no haber sido porque la persona pudo tomarlo del brazo para evitar su caída y regresarlo a su posición.

- Lo- lo siento - dijo Yesung, mirando a la persona que estaba al frente, sintiendo un bobo al chocar a un anciano.

- Debe ser mi día de suerte, hoy estoy siendo rodeado de gente joven y no solo eso, ahora acabo de encontrarme con un chico muy mono - dijo el anciano que le sonreía amablemente; sus ojos no pasaron desapercibidos por Yesung que de inmediato los asoció a cierto encuentro que tuvo unos días atrás, cuando estaba en esa cena de negocios con su jefe.

- Discúlpeme por favor - dijo Yesung antes de hacer una venia rápidamente - fue mi culpa, no iba pendiente del camino - añadió con las mejillas rojas por la vergüenza de ser tan torpe.

- No ha habido daños, así que no veo la razón de tu disculpa - agregó divertido el anciano, Yesung sonrió tranquilizándose dándose cuenta hasta en ese momento que aquel anciano estaba bajándose de aquel auto lujoso color negro.

Estaba a punto de responder cuando su corazón comenzó a palpitar a mayor proporción al notar que del otro lado del auto alguien muy conocido para él bajaba.

Kyuhyun que era quien en ese momento estaba bajando del vehículo, se mostró algo sorprendido por el encuentro con su asistente en ese lugar, eso era algo totalmente inesperado y que salía de lo que tenía presupuestado para ese día.

- vaya, un buen momento - sonrió el anciano, mirando a Yesung y luego a Kyuhyun y recordando por fin cierto encuentro en un conocido restaurante, hasta ese momento no se había dado cuenta pero ahora que miraba a Yesung su imagen junto a Kyuhyun venía a su mente.

Aún nervioso, Yesung se inclinó haciendo una venia hacia Kyuhyun como muestra de respeto, sintiéndose obviamente incómodo pues eso se salía de todo lo que esperaba para ese día.

- Oh... parece que se te ha caído algo - exclamó el anciano al recoger el papel que llevaba Yesung en sus manos, provocando que éste volviera su atención al anciano al notar que había hablado nuevamente, viendo que el papel en sus manos era el que él llevaba antes - oh, esa es mi lista!! - dijo asustado pues realmente sería su fin si la perdía seguro Heechul lo crucificaría vivo - muchas gracias señor...- añadió, haciendo una venia para el anciano.

- Smith - le respondió el anciano - creo que nos hemos visto, en alguna que otra ocasión, pero no pudimos hablar mucho en esa oportunidad - agrego el anciano con una sonrisa amigable.

Fue entonces que Yesung asintió colocándose rojo por que parecía ser que el anciano también lo había reconocido, justo en ese momento Kyuhyun llegó junto a ellos desde el otro lado del vehículo, mirando con seriedad a su asistente; Yesung al sentirlo ya cerca decidió saludar.

- bu... buenos días señor...- dijo nervioso, bajando la mirada con incomodidad.

Kyuhyun cerró sus ojos y metió una mano en su bolsillo mientras asentía con su cabeza lo cual significaba una respuesta a su saludo, por supuesto notaba que Yesung no estaba cómodo cerca de él, igual que el día anterior y eso le molestaba un poco aunque no sabía por qué pues esperaba que después del regalo el mayor volviera a ser el mismo pero parecía ser que no lo había conseguido mucho.

- ¿te gustaría acompañarnos? - preguntó repentinamente el anciano hacia Yesung, haciendo uso de toda su elegancia y actitud agradable.

Yesung lo quedó mirando algo perplejo en el inicio aunque al notar que el anciano aún lo miraba empezó a balbucear - y... yo... la... la verdad yo... - hablaba algo confuso, pues se había sorprendido y estaba notablemente nervioso sobre todo al sentir la mirada que le daba su jefe quien estaba algo incrédulo por la pregunta que el anciano le había hecho a él.

El anciano señor Smith no comprendió el nerviosismo de Yesung hasta ver a Kyuhyun y su expresión, entonces sonrió al entender lo que sucedía ahí por lo menos de parte de Yesung.

- Lo digo porque no pareces muy ocupado, además solo será por algunos minutos, no estaría mal para nosotros que nos acompañaras, pareces un chico muy amable - dijo el anciano sonriendo y poniendo aún más nervioso a Yesung quien miró de reojo a su lado y pudo reconocer ese sitio, donde había una gran rejilla dorada que cerraba el lugar.

- Pu-pues yo... - Yesung miró sus manos antes de llevar una a su cabeza para peinar su cabello hacia atrás y luego levantar su rostro hacia Kyuhyun que todavía miraba en desaprobación al anciano.

- Entiendo - susurró el anciano - Kyuhyun-ah, ¿te molesta que este joven nos acompañe?- agregó mirando al menor que no supo que decir porque la pregunta lo tomó desprevenido.

En realidad el menor lo había mirado con un enojo que no pudo disimular más cuando se percató que su asistente inclinó su cabeza con tristeza y algo de decepción al ver su expresión de molestia obvia, entonces cerró sus ojos con altanería y tomó rumbo hacia el interior de aquel sitio.

- Usted lo ha invitado, no me pregunte cosas sin sentido cuando obviamente no le interesa mi opinión - así el menor se adelantó haciendo que uno de los porteros del lugar corriera la rejilla.

Yesung le miró con algo de tristeza y también incomodidad, realmente no quería ser una molestia para nadie allí y era obvio que si se quedaba Kyuhyun no estaría feliz.

- tal vez en mejor que me vaya... no creo que sea buena idea - le dijo Yesung con una media sonrisa al anciano para que éste no malentendiera, aunque sus palabras también fueron escuchadas por Kyuhyun.

- Oh, por supuesto que no, no eres ninguna molestia, ahora si me disculpas... - dijo indicándole el camino a Yesung - disfrutaría mucho de tu compañía ya que cierto jovencito que nos acompaña no suele ser muy hablador a menos que diga algo para irritar a los demás y yo quiero tener a alguien que por lo menos sonría - añadió sonriéndole a Yesung quien terminó sonriendo también, al reconocer que tenía razón, entonces decidió acompañarlo, solía hacer eso... hacer que los demás estuvieran felices a pesar que eso no tuviera que ver con él.

Cuando la rejilla se corrió Yesung pudo percatarse del lugar, era un sitio de grandes extensiones verdes como un parque, pero la diferencia es que había muchas lápidas por todo el lugar. Sin poder evitarlo Yesung entristeció al recordar aquel primer encuentro con Kyuhyun, donde él había salido de un cementero, pensando en ello, miró la espalda de Kyuhyun, gracias a que éste iba caminando varios pasos delante de ellos.

- No te preocupes demasiado por él, hace que tu sonrisa desaparezca y eso no es bueno para un lugar como este donde lo mejor es traer un buen ánimo - dijo el anciano atrayendo la atención de Yesung.

Yesung miró al anciano, pero éste no parecía dejar de mirar al frente mientras avanzaban, atento a él Yesung se pregunto si realmente estaría haciendo bien al ir con ellos o se buscaría un problema estando allí.

Llegaron hasta un sitio un poco apartado, en él había una lápida que estaba a solo unos pasos cerca de un árbol, provocando sobre esta una sombra y frescura agradable, los rayos del sol pasaban a través de las hojas con mucha dificulta dándole solo un poco de luz.

- Si me disculpas - dijo el anciano, alejándose un poco de Yesung - debó revisar algo - luego de decir aquello el anciano miró a lo lejos como su chofer levantaba su mano en señal de algo.

- No, para nada - le sonrió Yesung con tranquilidad, mientras miraba como el anciano se alejaba hacia donde estaba un hombre de traje llamándolo.

Kyuhyun que estaba pendiente de ellos, pudo notar lo feliz que era su asistente junto a ese anciano; supuso que era por la forma tan abierta y amable con que el anciano lo trataba y por las cosas agradables que le decía a Yesung, y debía admitir que todas eran sin duda ciertas. Pensando en ello aclaró su garganta un poco, mientras sentía un leve rubor en sus mejillas, entonces miró la lápida para distraerse un poco.

Yesung por su lado, después de mirar como el anciano se alejaba, miró al menor que estaba de espaldas a él y se acercó hasta colocarse a su lado mirando también la lápida. Entonces miró a Kyuhyun por algunos segundos analizándolo; notando como el brillo de sus ojos se notaba apagado.

- Aquí... ¿hay alguien especial? - preguntó Yesung tímidamente, mirando nuevamente la lápida.

- ¿qué? - preguntó Kyuhyun mirándolo de reojo pues no estaba muy atento a su pregunta.

- Su expresión... es una muy serena aunque... algo triste - dijo Yesung mirándole directamente.

Kyuhyun se sorprendió por aquello ¿cómo era posible que se diese cuenta?, cuando trataba siempre de no mostrar emociones y menos con esa lápida, pensando en ello recordó de pronto algunos rumores; que él había deseado la muerte de su hermano solo para quedarse con la total herencia... y todo gracias a no mostrar ninguna emoción al ser conocedor de la muerte de él, eso lo hacía sentir repugnancia por aquellas personas que habían dicho aquello... y también por sí mismo por no haber podido demostrar todo lo que le había dolido que aquello pasara.

Yesung notó como la expresión de Kyuhyun cambió a uno de furia repentinamente - lo siento no quise - dijo, inclinando su cabeza al pensar que su comentario era el causante de la expresión molesta del menor.

- No ha sido nada - respondió Kyuhyun en tono seco mirando el árbol a su lado.

Yesung le miró con preocupación, preguntándose si Kyuhyun habría sonreído alguna vez; se sonrojo al pensar lo feliz que sería si notara una sonrisa sincera en el menor para él... una que no fuera provocada por un comentario burlón o sarcástico contra alguien más.

- No tienes por qué temerme tanto Jongwoon - le dijo en tono simple cuando lo vio nervioso e incómodo, notando su propio estado de humor y la expresión molesta que pudo haber hecho en ese momento, la que pensó pudo causar temor o algo así en su asistente.

- ¿Temerle? - repitió Yesung con algo de sorpresa, era verdad que en algunas ocasiones cuando estaba de mal humor le podía causar casi susto, pero la mayoría del tiempo solo era aquel nerviosismo que no podía ocultar lo que sentía por el menor.

- Lo cierto es que me parece extraño que hayas durado tanto siendo mi asistente Jongwoon y más sabiendo lo sanguinario y sarcástico que puedo llegar a ser, por lo menos de esa manera me han catalogado - dijo Kyuhyun encogiéndose de hombros como si aquello no le importase aunque sonrió con algo de burla para sí mismo por la denominación que le daban los demás.

- ¡Por supuesto que no! - exclamó rápidamente Yesung, tomando toda la atención del menor - no es sanguinario, digo... creo que esa es una expresión demasiado exagerada - tosió algo incómodo - pienso que es una buena persona y que no es capaz de ver a alguien en apuros - añadió desviando la mirada con algo de nerviosismo al saberse visto tan fijamente.

Kyuhyun que no esperaba escuchar eso, se sonrojó levemente, y terminó desviando su mirada, ¿qué era lo que estaba diciendo Yesung?, se mostró algo extrañado por aquel comentario para con él.

Yesung que regresó sus ojos a él al notarlo tan callado, no pudo evitar ruborizarse, mientras cubría su boca con la palma de su mano - lo siento... no quise... es solo que- empezó a hablar atropelladamente el mayor.

- Supongo que cada quien tiene su propia opinión, pero pienso que la tuya está demasiado errada, tal vez deberías ir al psicólogo y preguntar si no tienes alguna tendencia masoquista - respondió Kyuhyun incómodo.

Yesung estaba a punto de negar, pero decidió callar pensando en lo incómodo que Kyuhyun podía llegar a sentirse si él seguía hablando y diciéndole todas esas cosas, sin olvidar que tal vez por esa honestidad podía llegar a salírsele algo más que no pretendía Kyuhyun supiera.

- E-ese día... ¿fue el funeral de esta persona? - preguntó Yesung cambiando la conversación y recordando su primer encuentro con Kyuhyun.

- ¿ah?- dijo el menor al notar que ahora Yesung hablaba de otra cosa totalmente diferente.

- El día que lo conocí digo... había salido de este sitio... - añadió Yesung, volviendo su mirada hacia Kyuhyun quien miró al frente con seriedad, hacía mucho que no recordaba ese día.

- si - fue la respuesta cortante del menor.

Un silencio se formó, uno no incómodo, pero sí bastante prolongado entre ellos que ninguno de los dos parecía querer cortar. Yesung suspiró un poco y recordando algo sacó de su bolsillo un caramelo de café, entonces se arrodilló y lo colocó sobre aquella lápida leyendo por fin el nombre de la persona que yacía en esa tumba.

- ¿Qué haces? - preguntó Kyuhyun extrañado al ver que Yesung estaba dejando el caramelo sobre la tumba.

- Entregando mis respetos - dijo Yesung mirándole sonriente - pienso que se debe dejar algo para que la persona se ponga feliz- añadió el mayor con tranquilidad.

- No sirve de nada, la persona ya murió - respondió Kyuhyun en tono indiferente más una pequeña muestra de tristeza no pasó desapercibida para Yesung en los ojos del menor.

- Eso se sabe pero... si las personas que lo amaron no mantienen vivo su recuerdo, no sirve de nada venir a este lugar - dijo Yesung poniéndose de pie, dejando al menor bastante curioso por su respuesta.

Yesung se distrajo un poco y miró que a lo lejos venía el anciano con un enorme ramo de flores blancas.

- No pensé que Jongwoon creyese en tonterías - murmuró Kyuhyun haciendo que Yesung girara a mirarlo.

- No son tonterías - le trató de aclarar con calma el mayor mirándolo tranquilamente.

Repentinamente Kyuhyun comenzó a sonreír de la manera más sarcástica posible, haciendo que Yesung dejase de hablar - ese es un pensamiento demasiado irreal y rural, muy ingenuo para alguien de la edad de Jongwoon - dijo Kyuhyun al fin dándole la espalda, Yesung se sintió ofendido pero no alcanzó a decir nada porque el anciano apareció.

- siento la tardanza - dijo interrumpiéndolos, mientras depositaba el ramo de flores sobre la lapida - tenía que entregar algo y buscar estas lindas flores - añadió sonriéndole a Yesung.

Yesung le sonrió de regreso al ver que ese hombre compartía su idea sobre traer algo para dejar los respetos en la tumba de quienes ya no están presentes.

- Oh, pero... ¿qué es esto? - preguntó al ver el caramelo sobre la tumba.

- So-solo quería... dejar mis respetos por eso...- empezó a decir Yesung ruborizándose un poco por solo haber dejado un pequeño caramelo.

El anciano rió de manera agradable - eres un joven muy dulce y amable, dime ¿te gustaría trabajar para mí?, es un buen lugar y...- Yesung se sorprendió y obviamente no supo que decir.

- Y-yo... verá usted...- empezó sin saber que decir realmente pues no esperaba que le dijeran eso realmente.

- He de recordarle - Kyuhyun habló en un tono helado y aún de espaldas a ellos - que él trabaja para mí, así que ni siquiera piense en ofrecerle algo - añadió molesto con el anciano.

-ah!!, así que es a tu lado que lo necesitas... - murmuró el anciano mirando como Yesung se sorprendía y se sonrojaba enormemente debido al comentario - entonces debo recordarte que al final él es quien toma su decisión, además no siempre estará contigo - añadió el anciano con tranquilidad y una sonrisa segura.

Kyuhyun se giró a mirarlo sin expresión alguna pero con los ojos fijos como si lo atravesara pues el anciano, en su opinión, se estaba pasando bastante - nunca dije que alguien debía estar conmigo para siempre, solo le recordaba que hemos hecho negoci...- Yesung interrumpió las palabras de Kyuhyun.

- Por supuesto que siempre estaré con él - eso que se suponía debía tomar otro significado a Yesung se le hizo muy sorpresivo cuando salió de su propia boca, tratando de defenderse; más cuando notó como ambos le miraban con sorpresa, su rostro se ruborizó enormemente y desvió la mirada golpeándose internamente - di-disculpen... yo me refería a... digo... lo del negocio y eso de... - se inclinó y comenzó a retirarse.

- Aun no hemos terminado - trató de detenerlo el anciano entonces Yesung se giró a ellos completamente rojo de vergüenza.

- Di-discúlpeme por favor, pero yo debo terminar lo que hacía, estoy algo retrasado... permiso - con aquel pretexto se retiró rápidamente del lugar, haciendo que los dos no despegaran la vista de él hasta que salió completamente del área del cementerio.

- Es muy rápido - dijo el anciano con diversión, mirando a Kyuhyun quien volvió su vista a la lápida como si nada hubiese ocurrido - y es muy lindo - añadió divertido.

- Es muy distraído y casi siempre actúa así, siendo torpe y soltando tonterías de la nada - respondió Kyuhyun como si nada.

- Si hubiese sido otro el caso, pensaría que son un par de enamorados, tanto él que te mira un poco embobado como tú que no quieres separarte de él - añadió el anciano sonriendo con algo de burla.

- ¡No diga tonterías! - Le miró Kyuhyun frunciendo el entrecejo ya fastidiado del anciano - y deje de malinterpretar a la gente, tanto él como yo sabemos que toda nuestra relación son solo asuntos de trabajo- añadió con tranquilidad.

- Puede que tú si pero él...- empezó a decir el anciano atrayendo la atención de Kyuhyun.

- ¿a qué se refiere?- preguntó el menor curioso por lo que empezaba a decir el anciano.

- ¿Aún no te das cuenta? - le pregunto el anciano mirándolo como si se tratase de un maestro a su alumno que no entiende un simple problema de matemáticas.

- No tengo tiempo para estas tonterías suyas, deje de decir cosas absurdas - dijo repentinamente Kyuhyun, mirando nuevamente la lápida sintiéndose fastidiado y molesto.

- Primeramente quisiera saber si aún sientes algo por Zhoumi shi, tengo esa duda desde hace días - interrumpió el anciano repentinamente.

Esta vez Kyuhyun le miró con reproche y molestia - el paseo terminó - exclamó cortante el menor, comenzando a retirarse.

- ¿Te irás caminando? - preguntó el anciano divertido sin moverse de su posición.

-No tengo más nada que hacer, además es mejor que estar viendo su cara y escuchando sus estupideces de anciano incoherente y ebrio - le dijo molesto Kyuhyun, mientras el anciano se sorprendía y luego sonreía, en algunas ocasiones Kyuhyun solía comportarse aun como un niño.

-creo que tu hermano aún no ha aprendido nada más que a abrir la boca y decir lo que se le antoja - susurró el anciano mirando hacia la tumba - creo que todos te necesitábamos aún Ryeowookie, si nos ves desde donde estás, ayuda a tu arrogante y testarudo hermano a abrir más los ojos y no pasar de largo las cosas buenas que tiene cerca - entonces suspiró regresando los ojos hacia donde caminaba Kyuhyun a lo lejos, recordando cuando en el pasado ese joven frío negaba con infantilismo lo enamorado que estaba de Zhoumi a quien ahora detestaba ver y que afirmaba odiar, aunque él no estaba muy seguro de eso.

Continuara...