H de ? :¿Quién mató a Brais?

Capitulo 30.

En ocasiones, dejar algunos enigmas sin resolver puede preservar su atractivo y su aura de misterio. La curiosidad humana, aunque natural, puede llevarnos a indagar más allá de lo que es prudente, lo que a menudo resulta en un desorden inesperado. La vida está repleta de sorpresas, peculiaridades y secretos que, en su esencia, son parte de lo que la hace tan fascinante. A veces, es mejor permitir que ciertos aspectos permanezcan en la penumbra, ya que su desconocimiento puede ser más cautivador que la verdad misma.

Sin embargo, nuestra naturaleza humana nos impulsa a ser más inquisitivos de lo que deberíamos. Esta curiosidad innata nos lleva a explorar lo desconocido, a desentrañar lo que quizás debería permanecer oculto. En este proceso, a menudo nos encontramos enfrentando las consecuencias de nuestras acciones, ya que hay misterios que están destinados a permanecer sin respuesta. Aceptar que algunos enigmas son parte de la vida puede ser un desafío, pero también es una lección valiosa sobre los límites de nuestra comprensión.

En medio de esta vorágine de cambios inesperados, la situación dio un giro sorprendente. Todo lo que conocía se transformaba rápidamente, pero, a pesar de la confusión, contaba con un plan bien estructurado. Mi esperanza radicaba en que ciertas mujeres se unieran a mí en esta misión, colaborando para llevar a la responsable ante la justicia. La determinación de resolver este asunto se convertía en una prioridad, y con el apoyo adecuado, estaba convencida de que podríamos lograrlo, enfrentando juntos los desafíos que se presentaran en el camino.

—Hillary...

Hillary se encontraba de rodillas, sumida en un llanto desgarrador que la hacía parecer una niña vulnerable. Mientras tanto, yo recorría la habitación, sintiéndome profundamente conmovida por la intensidad de su dolor. Las palabras que había leído en el diario eran brutales y me dejaron en un estado de reflexión que se prolongó durante días. Cada frase parecía un golpe directo al corazón, revelando verdades que nadie debería tener que enfrentar, especialmente en un momento tan frágil.

En un giro devastador de la historia, Hillary descubrió que su padre le había sido infiel a su madre, utilizando a esta última como un mero recurso para olvidar a su amante. La revelación de la existencia de Hillary cambió la perspectiva de su padre, pero, sorprendentemente, poco después comenzó a hablar mal de su propia hija. Este descubrimiento no solo desmoronó la imagen que Hillary tenía de su familia por lo que se logra apreciar, sino que también la sumió en una confusión emocional que la dejó sin aliento. La traición y el desprecio se entrelazan en su mente, creando un torbellino de sentimientos contradictorios.

El dolor era palpable en los ojos de Hillary mientras las lágrimas caían sin control, aferrándose al diario como si fuera su único salvavidas. Estaba en estado de shock, y las palabras de aliento que intentaba ofrecerle parecían no tener eco en su corazón roto. Comprendía su sufrimiento, ya que había vivido una vida plagada de mentiras y secretos, donde su padre había mantenido una relación con la mejor amiga de su madre. Esta revelación no sólo la despojó de la confianza en su familia, sino que también le mostraba una versión de sí misma que nunca había imaginado, una que había sido moldeada por las decisiones egoístas de quienes debían protegerla.

—Lo sabía —llora—. Era consciente de que la engañaba, pero nunca pensé que fuera con Hanna.

—Lo siento, Hillary —digo en voz baja—. Pero necesitas hablar con ella, solo así podrás comprender su perspectiva.

—¿A quién apoyas?

—A la verdad y a la justicia por tu padre.

—Está bien, colaboraré —dice mientras se levanta—. Pero en cuanto termine esta pesadilla, quiero que se marchen de la mansión.

La miró con una profunda tristeza, su estado es evidente, está claramente herida. A pesar de ello, se esfuerza por mantener una fachada fuerte, como si esa fuera su forma de ocultar el sufrimiento que la consume por dentro. Esta lucha interna me duele, me provoca una sensación de impotencia al ver a esta joven lidiar con su carga emocional de una manera tan solitaria. Es desgarrador pensar en lo que debe estar sintiendo, y no puedo evitar sentir compasión por ella, por esa chica que parece tan perdida en su propio mundo de dolor.