El diablo me ha atrapado.
Lo que comenzó como un error inocente se convirtió en un verdadero infierno.
En mi defensa, no quise involucrarme con una princesa de la mafia. Pero ella irrumpió en mis defensas de todos modos.
Me acechó desde las sombras...
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Las dos semanas pasan como un borrón.
Un loco y retorcido borrón que no puedo seguir.
En el momento en que empiezo a adaptarme, Lisa me quita la alfombra de debajo de los pies y volvemos al principio.
Cada noche, tengo que aparecer en la casa de campo. Si no lo hago, su sombra aparecerá dondequiera que esté. Ya sea que esté en el refugio, en la biblioteca, o saliendo con amigos.
En cualquier lugar.
Se ha convertido en una acosadora experimentada que está en todas partes. No necesita decir nada para demostrar su existencia: sus acciones hablan más que las palabras.
No hay nada más aterrador o amenazador que su mera presencia, que utiliza a conciencia para intimidar a la gente, incluida yo.
La idea de que cumpla sus amenazas y le diga a todo el mundo lo que me gusta hacer en la oscuridad me aterroriza más de lo que me gusta admitir.
Así que cada noche, después de que las chicas se duerman, me escabullo del piso como un ladrón y conduzco hasta el lugar gótico en medio de la nada.
Es donde estoy velada por la noche. Nadie ve cuando voy a participar en mis tendencias depravadas, y nadie oye cuando grito mientras me folla hasta el olvido.
Porque lo hace, y a menudo, a veces varias veces durante la misma noche.
Me persigue tanto dentro de la casa como por toda la propiedad. Cuanto más corro y lucho contra ella, más animal se vuelve, como un ser primitivo que reclama su derecho.
Cuanto más grito, más profundo llega, exponiendo y provocando las partes más oscuras de mí.
También me hace rogar a veces, y siempre me dice que grite su nombre cuando me folla, rompiendo mi mundo en pedazos y desgarrándolo.
Lisa es un demonio salvaje y una sociópata sin disculpas. Lo sé porque he estado cerca de ella el tiempo suficiente para ponerle una etiqueta apropiada.
Aunque podría ser una psicópata, considerando su falta de acciones impulsivas. Siempre parece tener el control, ser el comandante de su ser, y una planificadora. Pero de alguna manera se preocupa por los más cercanos a ella, es decir, Irene, y sus Heathens.
Sus padres también, según nos cuenta su hermana.
Pero no estoy segura de sí se trata de un cuidado genuino o de un sentido de la responsabilidad que se ha implantado en ella desde que era joven. En cualquier caso, Lisa carece de humanidad y empatía.
No tiene reparos en destruir a cualquiera que se interponga en su camino, y desde luego no siente ningún remordimiento por sus acciones. En su mente, cree que el curso de los acontecimientos que se produjeron tenía que suceder de esa manera, y no hay fuerza de la naturaleza que pueda convencerla de lo contrario.
