Saturno>Lukas Urkijo

29.Luxemburg

yo te soy fiel.

El día amaneció radiante, con el sol brillando intensamente a través de la ventana de Kelly. Aunque el clima era hermoso, ella se sentía un poco inquieta. La conversación que había tenido con Sofía la noche anterior la había dejado pensativa. Sabía que tenía que hablar con Lukas y que la reconciliación era necesaria, pero no tenía claro cómo abordar el tema.

Al mediodía, decidió que era momento de enviarle un mensaje a Lukas. Lo hizo con algo de nerviosismo, pero también con la determinación de resolver las cosas.

“Hola, ¿podemos hablar? Me gustaría aclarar algunas cosas.”

Lukas respondió rápidamente, aceptando encontrarse en su lugar habitual: el café donde habían tenido tantas charlas y risas.

Cuando llegó al café, Lukas ya estaba allí, con un aspecto nervioso. Ella podía ver la preocupación en sus ojos. Se sentaron en una mesa en el rincón, lejos del bullicio. El aroma a café recién hecho y pasteles llenaba el aire, pero la tensión entre ellos era palpable.

—Gracias por venir —dijo Lukas, rompiendo el silencio. Su voz sonaba un poco temblorosa.

—Claro, siempre estoy dispuesta a hablar. Necesitamos aclarar lo que pasó entre nosotros —respondió Kelly, sintiendo que debía ser directa.

Lukas asintió, su mirada fija en la mesa.

—Sé que he estado actuando de manera posesiva y que te he hecho sentir incómoda. No debería haber dejado que mis inseguridades se interpusieran entre nosotros. Me arrepiento de cómo reaccioné —dijo, su tono era sincero y lleno de remordimiento.

Kelly lo observó, sintiendo una mezcla de alivio y tristeza. La honestidad de Lukas le llegó al corazón.

—Me alegra que lo reconozcas, Lukas. Pero también quiero que sepas que esto no es solo sobre mí. Tienes que trabajar en tus inseguridades para que nuestra relación funcione. No puedo ser la única que esté intentando resolverlo —respondió Kelly, intentando ser firme.

—Lo entiendo y estoy dispuesto a hacerlo. Quiero que estemos bien, Kelly. Te necesito en mi vida —dijo Lukas, su mirada intensa.

Ella sintió un calor en su pecho ante sus palabras, pero también sabía que no sería fácil.

—No es solo una promesa vacía. Necesito que sea real. Quiero que ambos nos sintamos seguros y felices juntos. No quiero que esto se repita —agregó Kelly, sintiendo la necesidad de ser clara.

—Lo prometo. Estoy dispuesto a trabajar en mí mismo y a buscar ayuda si es necesario. No quiero perderte —dijo Lukas, su voz más firme ahora.

El ambiente entre ellos comenzó a cambiar. La tensión se disipaba lentamente mientras Kelly se daba cuenta de que Lukas realmente quería hacer las cosas bien. Decidió que era el momento de dejar atrás el pasado.

—Entonces, ¿podemos comenzar de nuevo? —preguntó Kelly, sintiendo una chispa de esperanza.

Lukas sonrió, una luz de alivio brillando en sus ojos.

—Me encantaría. Pero esta vez, con la promesa de ser más abiertos y honestos el uno con el otro. Sin secretos ni inseguridades —dijo Lukas.

Kelly asintió, sintiendo que un peso se levantaba de sus hombros.

—Eso suena perfecto. Quiero construir algo especial contigo, pero necesitamos tener una base sólida —respondió.

—¿Te gustaría salir este fin de semana? Podemos hacer algo divertido juntos, algo que nos haga reír y recordar por qué nos gustamos en primer lugar —sugirió Lukas, su tono lleno de entusiasmo.

Kelly no pudo evitar sonreír.

—Me encantaría. ¡Vamos a hacer eso! —dijo, sintiendo que la chispa de su conexión se reavivaba.

Con la conversación terminada y el ambiente más ligero, comenzaron a hablar sobre planes y sueños, riendo y disfrutando del momento. La reconciliación les había permitido acercarse más, y aunque sabían que el camino hacia la estabilidad requeriría esfuerzo, estaban dispuestos a enfrentarlo juntos.

Mientras el sol comenzaba a ponerse, llenando el café de una luz dorada, Kelly se sintió agradecida por este nuevo comienzo. La relación con Lukas estaba en un nuevo nivel, y aunque habría desafíos por delante, la esperanza de un futuro más brillante la llenaba de optimismo.